Pérdida de biodiversidad
Historia.
Afirman algunos botánicos que al arribo de Colón (1492) el 70% de nuestro territorio era boscoso. Actualmente se considera que el 31 % de éste tiene áreas boscosas donde se incluyen las de repoblación. Como cifra elocuente del ritmo de tala, se conoce que entre 1900 y 1959 se talaron cerca de cinco millones de hectáreas de bosques, principalmente por el incremento de tierras para sembrar caña de azúcar y para la ganadería.
Según los botánicos, en el archipiélago cubano hay 7500 especies de plantas, de las cuales el 53 % son endémicas; se encuentran amenazadas 3470 y 25 especies extintas.
En el caso de la fauna es más difícil de documentar porque son muchas más especies y el nivel de conocimiento es menor; se sabe de la extinción de algunas especies (de la macrofauna) en tiempos modernos: el Guacamayo Cubano (1864), Carpintero Jabado de Cayo Largo, la población de Cateyes de Isla de la Juventud, la subespecie de Ruiseñor de Isla de la Juventud, y se consideran casi extinguidas a: el Carpintero Real, el Gavilán Caguarero, las Jutías de los Cayos de San Felipe, la Jutía Enana de Ciénaga de Zapata y la Jutía Garridoi de los Canarreos. Están amenazadas las poblaciones del Sinsonte Prieto, el Vireo de Bahamas y el Torreornis a lo largo de la costa norte de las provincias de Ciego de Avila y Camaguey.
Resumiendo, aproximadamente el 45 % de los vertebrados cubanos conocidos (614 especies) tienen algún grado de amenaza. Pero ¿qué sabemos de los invertebrados? Los invertebrados cuentan con 13467 especies y constituyen la denominada mesofauna, con un 50 % de endémicos, realmente muy poco.
Extinciones.
Las extinciones son un fenómeno natural, un factor en la evolución. Se han producido, a lo largo de la historia de nuestro Planeta, cinco grandes extinciones masivas. La última hace 66 millones de años, en la cual se extinguieron los Dinosaurios entre otros grupos de plantas y animales. Pero otras 28 extinciones menores también han ocurrido. En todas estas extinciones se borraron de la faz de la Tierra el 75 % de las especies existentes.
Algunos expertos afirman que en el presente estamos inmersos en una sexta gran extinción, provocada fundamentalmente por la actividad de los humanos. Si comparamos algunas cifras, vemos que en los últimos 600 millones de años se han extinguido dos especies por año. Actualmente se considera que cada cinco minutos se extingue una especie (54 mil especies por año), principalmente por la tala de bosques (15 millones de hectáreas anuales). A ese ritmo en 30 años se extinguirán todas las especies conocidas (aproximadamente dos millones).
Islas y archipiélagos.
Los archipiélagos y las islas son particularmente vulnerables por diferentes causas:
1) Tienen poblaciones pequeñas en la mayoría de las especies.
2) Muchas especies son raras y exclusivas (endemismo en poblaciones relicto).
3) En el caso de los ubicados en zonas tropicales: estructura en mosaico del paisaje, con una variedad de ambientes con áreas reducidas (en comparación con áreas similares continentales).
En los últimos 300 años se han extinguido 171 especies y subespecies de aves; 155 eran de islas. Se sabe que las causas son: reducción de hábitats (por la tala de bosques); graminización (sabanización); introducción de animales exóticos en ambientes naturales.
Si comparamos la situación de Cuba en el contexto de Las Antillas Mayores vemos que, con respecto a La Española (Haití y República Dominicana), Puerto Rico y Jamaica, Cuba es el país con más biodiversidad y, a juzgar por las leyes ambientales promulgadas y el desarrollo de un sistema de áreas protegidas, existe la voluntad política adecuada de preservar nuestro ambiente.
A mi entender, estas son la principales causas de la pérdida de la biodiversidad en el Archipiélago Cubano:
1) Reducción de hábitats por la tala de áreas boscosas originales y la consecuente sabanización de esos ambientes.
2) Caza furtiva o ilegal de especies cinegéticas y silvestres; uso indebido e ilegal de especies silvestres como mascotas: Cotorras, Cateyes, Negritos, Tomeguines, Aparecidos de San Diego, Cabreros, también especies de aves migratorias como los Azulejos, Mariposas, Degollados, Azulejones.
3) Especies invasoras, que incluye la mala práctica de introducir deliberadamente especies exóticas como es el caso de la Claria, la Mangosta y el Caracol Africano, las consecuencias de la introducción de estas especies para la biota cubana se desconocen en toda su magnitud.
4) Manejo inadecuado de ecosistemas frágiles como los Cuabales, Charrascales, bordes de pinares endémicos y pluvisilva montana.
5) Desarrollo acelerado de la agricultua extensiva (hasta 1970) sin criterios de sostenibilidad.
6) Indices no satisfactorios de educación ambiental en la población (malos hábitos hacia nuestra fauna y flora autóctonas). A pesar de que se ha tratado de mejorar estos índices en diferentes actividades y campañas.
Giraldo Alayón García
Fundación Ariguanabo
Los problemas de las poblaciones relictuales de los cayos de Cuba
La isla grande de Cuba está rodeada de un gran grupo de islotes y cayos que forman cinco archipiélagos y un grupo de cayos:
1) Jardines de la Reina al sur de la provincia de Camagüey.
2) Canarreos al sur de las povincias de Artemisa, Mayabeque y Matanzas.
3) Cayos de San Felipe al sur de la provincia de Pinar del Río.
4) Archipiélago de Las Coloradas al norte de la provincia de Pinar del Río.
5) Archipiélago de Sabana al norte de las provincias de Matanzas y Villa Clara
6) Archipiélago de Camagüey al norte de las provincias de Sancti Spiritus, Ciego de Ávila y Camagüey.
En el año de 1992 publicó el ornitólogo y herpetólogo cubano (recientemente fallecido) Orlando Garrido un trabajo en la revista Bird Conservation International sobre el probable impacto del desarrollo turístico en las poblaciones relictuales de aves de estos cayos, una gran mayoría de éstas constituían subespecies o razas geográficas endémicas que pudieran ser asimiladas genéticamente o desplazadas por las poblaciones de la isla grande. En grupos tan diversos como los Carpinteros Verdes y Jabados, el Torreornis, Chichinguacos, Mayitos, Vireos, etc. E incluso varias poblaciones de reptiles (Leiocephalus y Ameiva).
De acuerdo con estudios paleogeográficos la antigüedad de nuestros cayos, es decir su afloramiento y actual posición datan de entre seis mil y 11 mil años, por lo que los procesos de diferenciación han sido relativamente rápidos en términos evolutivos. Pero su vulnerabilidad es muy alta.
La fauna de invertebrados (principalmente los artrópodos) de los cayos apenas se han estudiado, es necesario su estudio pues es muy probable que haya muchas especie desconocidas y nuevas para la ciencia. Además, el estudio integral de estas poblaciones aportaría elementos sobre los procesos de dispersión y diferenciación de las poblaciones de la mesofauna que permitiría un mejor manejo y conservación de éstas.
Les copio, según Garrido (1992), las poblaciones de aves de los cayos:
1) Coccyzus merlini santamariae (Cayo Santa María), Archipiélago Camagüey.
2) Xipidiopicus percussus cocoensis Archipiélago Camagüey.
3) Torreornis inexpectata varonai Archipiélago Camagüey.
4) Contopus caribaeus florentinoi Archipiélago Jardines de la Reina.
5) Contopus caribaeus nerlyi Archipiélago Jardines de la Reina.
6) Contopus caribaeus morenoi Archipiélago Canarreos.
7) Xipidiopicus percussus gloriae Archipiélago Canarreos
8) Melanerpes superciliaris florentinoi Archipiélago Canarreos (extinto?)
9) Vireo gundlachi magnus Archipiélago Canarreos.
10) Quiscalus niger caribaeus Archipiélago Canarreos.
11) Agelaius humeralis scopolus Archipiélago Canarreos.
12) Vireo gundlachi sanfelipensis Cayos de San Felipe.
13) Melanerpes superciliaris sanfelipensis Cayos de San Felipe.
Los Canarreos poseen el mayor número de subespecies de aves. Sería recomendable en los cayos que se están desarrollando turísticamente articular modos sostenibles de aproximarse a la fauna y flora locales para poder garantizar su permanencia.
Giraldo Alayón García
Fundación Ariguanabo
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Despliegan 10 mil efectivos en zonas afectadas por DANA ante indignación popular
Por Armando G. Tejeda
Madrid. En mitad de la devastación y la desesperación, en la localidad valenciana de Benetússer se registró un rescate sorprendente: una mujer de avanzada edad se había quedado atrapada en su coche y en compañía de su cuñada en un paso subterráneo que se inundó de forma súbita por las lluvias torrenciales. No podía salir y por la situación de las calles nadie podía acceder a la zona y así estuvieron, incomunicadas durante tres días, hasta que un equipo de salvamento escuchó sus gritos de auxilio. De inmediato se activó el dispositivo y lograron llegar hasta el vehículo, donde pudieron sacar con vida a la mujer, si bien su acompañante ya había fallecido. De inmediato fue trasladada al hospital más cercano. El último reporte en el número de fallecidos ascendió a los 211.
Este tipo de rescates milagrosos llevan algo de esperanza a los miles de damnificados por las lluvias torrenciales, que ha provocado el incremento de la indignación popular por la falta de apoyos del Estado. En respuesta a este clamor, el presidente del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, anunció finalmente, casi seis días después, el despliegue de diez mil efectivos más en la zona siniestrada, de los cuales cinco mil son miembros del Ejército y el resto de la Policía Nacional y la Guardia Civil. Además el presidente de la Comunidad Valenciana, el conservador Carlos Mazón, solicitó al Ejecutivo central incorporarse a los grupos de “respuesta inmediata”.
La Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) que inició el pasado martes de madrugada provocó el peor desastre natural en la historia reciente de España, con un saldo provisional de 211 fallecidos, de los cuales la mayoría -208- se registraron en la comunidad autónoma de Valencia, además hay centenares de desaparecidos y cuantiosos daños materiales. Las lluvias torrenciales han afectado ya a nueve comunidades autónomas -Valencia, Aragón, Andalucía, Castilla-La Mancha, Cataluña, Murcia, Cataluña, Ceuta y Melilla-, si bien el epicentro del desastre se localizó en las inmediaciones de la ciudad de Valencia y municipios limítrofes, en donde todavía hay pueblos y localidades de medio tamaño aislados y decenas de miles de personas desesperadas por la falta de ayuda.
Cuando más arreciaban las críticas por la falta de reflejo de las administraciones públicas, en las que se señalan a los ayuntamientos, a los gobiernos autonómicos y al central, finalmente se anunció una movilización masiva de militares y policías para ayudar en las tareas de rescate y proteger a los vecinos. Más allá del intercambio de acusaciones en las que el gobierno central atribuye toda la responsabilidad de la gestión al gobierno autonómico, presidido por el derechista Partido Popular (PP), y viceversa, el presidente Sánchez compareció casi seis días después del desastre para anunciar un nuevo despliegue de efectivos de militares y agentes policiales para llevar a cabo “el mayor despliegue de efectivos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, de las Fuerzas Armadas que se haya hecho jamás en nuestro país en tiempos de paz. Un despliegue que ha realizado ya cuatro mil 800 rescates y que ha auxiliado a más de 30 mil personas en viviendas, en carreteras y en polígonos inundados”. Sánchez también advirtió que le había “trasladado” al gobierno valenciano que “si necesita más recursos, que los pida. No hace falta priorizar unos municipios sobre otros ni jerarquizar tareas”, al explicar que “las autoridades valencianas conocen el terreno mejor que nadie”. Sánchez decidió no convocar de urgencia a un Consejo de Ministros y esperar hasta el próximo martes, cuando está previsto que se realice, para declarar como “zona gravemente afectada” a la región más dañada por las tormentas. Esta medida permitirá agilizar los recursos públicos para la reconstrucción y las ayudas urgentes.
Despliegan... (2 y fin)
Unas horas después compareció el presidente valenciano, Mazón, quien aseguró que la región está “pasando el peor momento de nuestra historia” e instó al gobierno central a incorporarse a los cinco grupos de respuesta inmediata que había decidido crear para paliar la crisis. Para ello instó a incorporarse a las labores de coordinación a vicepresidentas y ministros del Ejecutivo español, en áreas como sanidad -por el riesgo de contagios epidemiológicos-, la vivienda, la asistencia social, las ayudas económicas y las tareas de rescate.
Un balance provisional de los inmuebles afectados advierte que se calcula que hay más de 77 mil casas con daños. Además un informe del ministerio para la Transición Ecológica estima que hay alrededor de tres millones de personas que viven en España en zonas de alto riesgo de que sus viviendas sufran de inundaciones o desastres provocados por una DANA similar a la que inició el pasado martes. La mayoría de esas viviendas -alrededor de un millón- se encuentran localizadas en el litoral mediterráneo, donde en las últimas décadas se ha registrado una construcción intensiva y sin control de viviendas de uso turístico, muchas de ellas en zona de alto riesgo de inundación.
Además se informó que 17 personas fueron atendidas por los servicios médicos de urgencia por intoxicación por monóxido de carbono, una de ellas con una crisis convulsiva, después de que estas personas estuvieran realizando tareas de rescate en un estacionamiento inundado en la localidad e Chiva. Mientras pasan los días y continúa el agua acumulada en casas y calles, los expertos advierten de que aumenta el riesgo infecciones masivas o epidemias.
https://www.jornada.com.mx/noticia/2024/11/02/mundo/despliegan-10-mil-efectivos-en-zonas-afectadas-por-dana-ante-indignacion-popular-7285
Editorial de El País (España):
Unidad sin claridad
La dana no ha terminado, pero ya es uno de los peores desastres de la historia de España. Más de 200 muertos, miles de personas que no pueden vivir en sus hogares, miles de millones de euros en daños materiales e infraestructuras que no podrán recuperarse en meses. Paiporta, Alfafar, Massanassa, Catarroja, Chiva, Utiel, Letur son lugares que ya están en el negro libro de las catástrofes ocurridas en suelo español. Sin embargo, en medio del horror han aparecido cientos de vecinos cargando, barriendo y achicando agua. El impulso solidario de los ciudadanos llegó a tal extremo que la Generalitat, aun reconociendo su buena fe, pidió ayer que la masa de voluntarios que caminaba hacia los lugares afectados volviera a su casa o se dirigiera a centros de coordinación para no colapsar las vías de acceso a los efectivos que trabajan sobre el terreno.
Por otro lado, desde el primer momento circulan los bulos que fomentan teorías conspirativas, insultan a la Agencia Estatal de Meteorología o buscan construir un relato de la tragedia que choca frontalmente con la realidad que han visto millones de españoles y padecido centenares de miles de valencianos: una dana de alto impacto reiteradamente anunciada por los científicos de la agencia, una alerta tardía de la Generalitat a la población y un desastre que está costando mucho remediar. El ejemplo más lamentable es la denuncia contra los responsables de Aemet por parte de Manos Limpias, el constante intoxicador de la vida pública española.
Parece evidente que existe un pacto de no agresión pública entre el Gobierno central y el de la Generalitat. Una decisión, la de ofrecer una imagen de unidad y colaboración que aplaudimos desde el principio en este periódico porque es lo que la ciudadanía espera cuando están en juego la vida y la muerte. Cualquier otra actitud habría sido una irresponsabilidad. Pero pasan los días y crece la desesperación de quienes siguen sin saber nada de sus seres queridos, están sin luz o sin agua, con sus calles colapsadas por un amasijo de coches o sin una casa en la que refugiarse. Y junto a la desesperación se multiplican las críticas ciudadanas y las preguntas sobre la cantidad de recursos disponibles para hacer frente al drama.
En medio aún de una tragedia de esta magnitud, es increíble que haga falta recordar el reparto de competencias del ordenamiento español. La Generalitat valenciana tiene activado el nivel 2 de emergencia, que le permite conservar el mando, la competencia exclusiva sobre la gestión de la tragedia y solicitar la ayuda que crea necesaria al Gobierno central. Es decir, todos los efectivos que Defensa, Interior o cualquier otro ministerio envía estos días a Valencia son los solicitados por el presidente Mazón, que decide además en qué lugar operan. El presidente valenciano puede solicitar el nivel 3 y que el Gobierno central se haga cargo de todo, pero no lo ha hecho. El Ejecutivo central puede decretar una “emergencia de interés nacional” y asumir la dirección de todo el dispositivo, una especie de 155 que despojaría a la Generalitat de sus competencias, pero tampoco lo ha hecho. Han optado por colaborar bajo el mando de la Generalitat, que es el representante legal del Estado en la comunidad. Es probablemente la solución perfecta, pero ambos tienen que explicar con claridad por qué cuatro días después no se llega a todos los lugares que lo necesitan.
Un monstruo meteorológico ha traído dolor y desgracia. Su dimensión explica muchas cosas, pero no todas en pleno siglo XXI. La realidad del cambio climático hace temer nuevos episodios parecidos. La claridad y la pedagogía que ahora se haga no son solo un derecho de los afectados hoy, sino un aprendizaje para el futuro inmediato.
https://elpais.com/opinion/2024-11-02/unidad-sin-claridad.html
Javier Galán, Luis Sevillano Pires y Daniele Grasso: ¿Qué pasó en Valencia? Mapas y datos para empezar a entender la catástrofe
El temporal deja en unas horas tanta precipitación como en todo un año. La lluvia récord desbordó los barrancos y provocó un reguero de destrucción
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