martes, 28 de octubre de 2014

40 años de hermandades

La República Dominicana fue el segundo país de América Latina que visité, y me es  entrañable. La primera vez que estuve allí, en 1974, resultó un azaroso viaje por las Antillas, junto a Noel Nicola, para asistir a aquel Festival que organizó la Central General de Trabajadores, el histórico 7 Días con el Pueblo.

No sabría decir cuántas veces he vuelto en cuatro décadas.

El viaje del que acabo de regresar ocurrió porque el año pasado fui a Baní, con mi viejo amigo Hamlet Hermann, a conocer la tierra que había parido a un dominicano particularmente querido en Cuba, el General en Jefe de nuestro Ejército Libertador, Máximo Gómez Báez. En el parque que conserva un pedazo de muro de una vivienda en que habitó, me enteré de que en 2014 se cumplirían 250 años de la fundación de la villa, para lo que me tomé la libertad de ofrecer un concierto, si me lo permitían.

La idea fue bien acogida por los naturales de Baní  y por mi amigo trovador José Antonio Rodríguez, hoy Ministro de Cultura, y desde principios de año la mantuvimos en la mira.

Coincidía con que, desde hacía tiempo, el Maestro José Antonio Molina, Director Titular de la Orquesta Sinfónica Nacional de Santo Domingo, había invitado a mi esposa, la flautista Niurka González, a trabajar con ellos.  Este concierto resultó ser el penúltimo  de la temporada 2014, y lo dirigió el austríaco Christoph Ehrenfellner.

Agradezco que la suerte me hiciera testigo de aquella noche de buena música y buenos músicos. El programa consistió en la Obertura En un día oscuro, del mismo Ehrenfellner; el Concierto de Jacques Ibert, para Flauta y Orquesta, interpretado por Niurka; y la Sinfonía nº 9 en Do mayor, de Franz Schubert.

Las tres hermosas y difíciles obras fueron memorablemente interpretadas por los artistas. Si cupiera observación, la única que haría es que hubiera sido mejor comenzar con Shubert y terminar con Ibert.

En días posteriores, mientras llegaban mis compañeros músicos, fuimos distinguidos con la oportunidad de saludar al Presidente Medina. Este tipo de visita generalmente me resulta incómoda, por el protocolo, pero lo cierto es que tanto el mandatario como sus colaboradores fueron sencillos y amables.

Me agradó el afecto y el respeto con que se habló de Cuba, y de toda Latinoamérica, y fui testigo del gusto con que el Presidente dominicano se sitúa entre los liderazgos de izquierda de los últimos años de nuestra región.

Mención especial merece la visita que hicimos a la Fundación “Nido Para Ángeles”, para niños con parálisis cerebral.

Fuimos testigos del nacimiento de esta idea de Mónika Despradel y hemos seguido su desarrollo, dirigido sobre todo a familias de bajos recursos. Un alto porciento del personal de atención a los niños son sus propias madres, que después de mucha práctica guiada resultan naturales rehabilitadoras.

Estratégica para esta humanísima Fundación ha sido la presencia de la Dra. cubana Solangel Hernández Tápanes, Presidenta de CLAGIR. Véase además este enlace:  http://elnacional.com.do/fundacion-nido-para-angeles-presenta-estudio/

El concierto en Baní se realizó el sábado 25. Por la tarde volvimos a estar en el parquecito donde guardan las ruinas de aquella casita de Máximo Gómez, porque se estaba inaugurando una Feria del Libro. Allí me hicieron visitante querido de la ciudad y me entregaron llaves.

Un par de horas después, en el estadio, tuvimos el privilegio de tener a Maridalia Hernández abriéndonos la noche. Mucho se ha dicho sobre las dotes vocales de esta gran cantante dominicana. Sólo agregar que es una persona sensible, inteligente y preparada, de una espiritualidad muy especial.

Mis compañeros fueron el aguerrido trío Trovarroco, con quienes ya comparto 10 años de brega, Oliver y Niurka, más el cuarteto de jazz con el que he trabajado Amoríos.

Al final del concierto no pude despedirme sin expresar una sensación que me daba vueltas desde que pisé la tierra hermana: en cuatro décadas era la primera vez que visitaba ese país sin la presencia física de Sonia Silvestre. Cuánta ausencia. Que en gloria esté.

Así fue el orden de nuestro programa:

una canción de amor esta noche
tu soledad me abriga la garganta
día de agua
mujeres
el papalote
tonada del albedrío
mariposas
unicornio
exposición de mujer con sombrero (tetralogía)
la gota de rocío
quién fuera
hoy mi deber
el mayor
el necio
la era esta pariendo un corazón
ojalá
te doy una canción

Gracias, Santo Domingo. Y que viva Gómez, eterno compañero de Maceo y Martí.


El Maestro José Antonio Molina, dirigiéndose a la Sinfónica

Niurka saluda al público

José Antonio Rodríguez, trovador y ministro
Palomas dominicanas

La Dra Solangel nos explica un procedimiento magnético

Fundación Nido Para Ángeles

Angelito

Angelito con su mamá

Público de Baní

Abigaíl y Julián

Sol del regreso

lunes, 20 de octubre de 2014

La Impresionante Contribución de Cuba en la Lucha Contra el Ébola

Editorial del diario The New York Times

Cuba es una isla pobre y relativamente aislada. Queda a más de 7,000 kilómetros de los países africanos donde el ébola se está esparciendo a un ritmo alarmante. Sin embargo, debido a su compromiso de desplazar a cientos de médicos y enfermeros al eje de la pandemia, Cuba podría terminar jugando el papel más destacado entre las naciones que están trabajando para refrenar la propagación del virus.

La enorme contribución de Cuba, sin duda, forma parte de sus esfuerzos por mejorar su estatus en el escenario mundial. Aún así, debe ser aplaudida e imitada.

El pánico que ha generado la epidemia alrededor del mundo no ha producido una respuesta adecuada por parte de las naciones que tienen la capacidad de contribuir. Aunque Estados Unidos y otros países han ofrecido su disposición a contribuir dinero, únicamente Cuba y unas pocas organizaciones no gubernamentales están proporcionando lo que se necesita con mayor urgencia: profesionales médicos dispuestos a atender pacientes.

Los médicos en África occidental necesitan urgentemente apoyo internacional para construir centros de aislamiento y poner en práctica mejores mecanismos para diagnosticar pacientes, antes de que desarrollen síntomas avanzados. Más de 400 profesionales médicos han sido infectados y, aproximadamente, 4,450 pacientes han muerto. Dado que se han diagnosticado unos pocos casos en Estados Unidos y Europa, las autoridades médicas temen que el virus pronto podría volverse una crisis mundial.

Es lamentable que Washington, el principal contribuyente financiero a la lucha contra el ébola, no tenga vínculos diplomáticos con La Habana, dado que Cuba podría terminar desempeñando la labor más vital. En este caso, la enemistad tiene repercusiones de vida o muerte, ya que las dos capitales no tienen mecanismos para coordinar sus esfuerzos a alto nivel.

Para la administración Obama, este dilema tiene que enfatizar la idea de que los frutos de normalizar la relación con Cuba conlleva muchos más beneficios que riesgos.

De los extranjeros que trabajan en África occidental, los médicos cubanos van a estar entre los más expuestos y, es muy posible, que algunos contraigan el virus. La Organización Mundial de la Salud está coordinando la labor de los médicos, pero no está claro cómo manejaría la atención y el traslado de aquellos que llegaran a enfermarse.

Para transportar pacientes con ébola se necesitan equipos de expertos y aviones equipados con cabinas de aislamiento. La mayoría de compañías de seguros han dicho que no están dispuestas a trasladar pacientes con ébola.

El Secretario de Estado John F. Kerry elogió el viernes el “coraje de todo profesional médico que está asumiendo este desafío”, e hizo una alusión breve a la contribución de Cuba.

El Ejército estadounidense ha desplazado aproximadamente 550 soldados para respaldar a las autoridades médicas en los países afectados. Sería cuestión de sentido común y compasión que el Pentágono les ofreciera asistencia a los cubanos, en caso de que alguno se enfermase. Por ejemplo, debería darles acceso al centro médico que construyó en la capital de Liberia, y ayudar con la evacuación de médicos enfermos. Es indispensable reconocer que la labor de los especialistas cubanos contribuye al esfuerzo mundial.

Sin embargo, las autoridades estadounidenses, insensiblemente, se han rehusado a indicar si estarían dispuestos a brindar algún tipo de apoyo.

Miembros del sector médico en Cuba son conscientes de los riesgos que toman al asumir misiones peligrosas. Médicos cubanos desempeñaron el rol principal en la lucha contra el cólera en Haití, después del terremoto de 2010. Cuando algunos regresaron enfermos a Cuba, la isla tuvo que combatir el primer brote de la enfermedad en una década.

Si el ébola llegara a Cuba, representaría un desafío más serio para la isla y la región, lo que elevaría el riesgo de que se dispare el número de casos en el hemisferio.

Cuba ha enviado médicos y enfermeros a zonas de desastre durante décadas. Luego del huracán Katrina en 2005, el Gobierno en La Habana ofreció enviar a equipos médicos para atender heridos en Nueva Orleans. Líderes estadounidenses rechazaron ese ofrecimiento. Pero se alegraron al oír, en días recientes, que Cuba estuviera movilizando un grupo para misiones en Sierra Leona, Liberia y Guinea.

Con apoyo técnico de la Organización Mundial de la Salud, el gobierno cubano capacitó a 460 médicos y enfermeros en cuanto a las estrictas precauciones que son necesarias para atender a los pacientes que padecen un virus altamente contagioso. El primer grupo, conformado por 165 profesionales, llegó a Sierra Leona en días recientes. José Luis Di Fabio, el representante de la entidad de salud, dijo que el equipo enviado a África incluye médicos que han trabajado anteriormente en la región, lo cual los hace aún más valiosos. “Cuba cuenta con un personal de salud muy competente”, dijo Di Fabio, quien es de origen uruguayo.

Di Fabio dijo que las sanciones que Estados Unidos mantiene sobre la isla han generado dificultades para el sector médico, ya que varios centros carecen de equipos modernos y suministros suficientes.

En una columna publicada este fin de semana en el diario del Gobierno cubano, Granma, Fidel Castro argumenta que Estados Unidos y Cuba deben poner a un lado sus diferencias, así sea temporalmente, para combatir una amenaza global. Tiene toda la razón.

Fuente: http://www.nytimes.com/2014/10/20/opinion/la-impresionante-contribucin-de-cuba-en-la-lucha-contra-el-bola.html

martes, 14 de octubre de 2014

Lo que no podrá olvidarse nunca

Por Fidel Castro Ruz
Ayer, domingo 12 de octubre, por la mañana, la edición dominical en Internet del The New York Times —órgano de prensa que en determinadas circunstancias traza pautas sobre la línea política más conveniente a los intereses de su país—, publicó un artículo que tituló “Tiempo de Acabar el Embargo a Cuba”; con opiniones de lo que a su juicio, debe seguir el país.
Hay momentos en que tales artículos son suscritos por algún prestigioso periodista, como alguien a quien tuve el privilegio de conocer personalmente en los primeros días de nuestra lucha en la Sierra Maestra con los restos de una fuerza que había sido casi totalmente eliminada por la aviación y el ejército de Batista. Éramos entonces bastante inexpertos; ni siquiera concebíamos que dar esa impresión de fortaleza a la prensa constituía algo que pudiera merecer una crítica.
No era así como pensaba aquel valiente corresponsal de guerra con una historia que le dio nombre en los tiempos difíciles de la lucha contra el fascismo: Herbert Matthews.
Nuestra supuesta capacidad de lucha en febrero de 1957 era un poco menor, pero más que suficiente para desgastar y derrotar al régimen.
Carlos Rafael Rodríguez, dirigente del Partido Socialista Popular, fue testigo de lo que, después de la Batalla del Jigüe en que una unidad completa de tropas selectas fue obligada a capitular tras 10 días de combate, expresé sobre mi temor de que las fuerzas del régimen fueran a rendirse en julio de 1958, cuando sus tropas élites se retiraban precipitadamente de la Sierra Maestra, a pesar de estar entrenadas y asesoradas por los vecinos del norte. Habíamos encontrado la forma adecuada para derrotarlas.
Era ineludible extenderme un poco en este punto si deseaba explicar el ánimo con que leí el mencionado ar­tículo del periódico norteamericano el pasado domingo. Citaré sus partes esenciales que irán entre comillas:
“…el Presidente Obama debe sentir angustia al contemplar el lamentable estado de las relaciones bilaterales que su administración ha intentado reparar. Sería sensato que el líder estadounidense reflexione seriamente sobre Cuba, donde un giro de política podría representar un gran triunfo para su gobierno.
“Por primera vez en más de medio siglo, cambios en la opinión pública estadounidense y una serie de reformas en Cuba, han hecho que sea políticamente viable reanudar relaciones diplomáticas y acabar con un embargo insensato. El régimen de los Castro ha usado dicho embargo para excusar sus fallas y ha mantenido a su pueblo bastante aislado del resto del mundo. Obama debe aprovechar la oportunidad para darle fin a una larga era de enemistad, y ayudar a un pueblo que ha sufrido enormemente desde que Washington cortó relaciones diplomáticas en 1961, dos años después de que Fidel Castro llegó al poder.”
“…el deplorable estado de su economía ha obligado a Cuba a implementar reformas. El proceso se ha vuelto más urgente a raíz de la crisis financiera en Venezuela, dado que Caracas le proporciona petróleo subsidiado. Con el temor de que Venezuela tenga que recortar su ayuda, líderes en la isla han tomado pasos importantes para liberalizar y diversificar una economía que históricamente ha tenido controles rígidos.”
“…el gobierno cubano ha comenzado a permitir que sus ciudadanos se empleen en el sector privado y que vendan propiedades como automóviles y casas. En marzo, la Asamblea Nacional de Cuba pasó una ley con el fin de atraer inversión extranjera. (…) En abril, diplomáticos cubanos comenzaron a negociar los términos de un tratado de cooperación que esperan firmar con la Unión Europea. Han asistido a las primeras reuniones preparados, ansiosos y conscientes de que los europeos van a pedir mayores reformas y libertades ciudadanas.
“El gobierno autoritario sigue acosando disidentes, quienes frecuentemente son detenidos por períodos cortos. La Habana no ha explicado la sospechosa muerte del activista político Oswaldo Payá.”
Como puede apreciarse una acusación calumniosa y gratuita.
“El año pasado se flexibilizaron las restricciones de viaje para los cubanos, lo cual permitió que disidentes prominentes viajaran al exterior. En la actualidad, existe un ambiente de mayor tolerancia para aquellos que critican a sus líderes en la isla, pero muchos aún temen las repercusiones de hablar francamente y exigir mayores derechos.
“El proceso de las reformas ha sido lento y ha habido reveses. Pero en conjunto, estos cambios demuestran que Cuba se está preparando para una era post-embargo. El gobierno afirma que reanudaría con gusto las relaciones diplomáticas con Estados Unidos sin condiciones previas.
“Como primer paso, la Casa Blanca debe retirar a Cuba de la lista que mantiene el Departamento de Estado para penalizar países que respaldan grupos terroristas. Actualmente, las únicas otras naciones en la lista son Sudán, Irán y Siria. Cuba fue incluida en 1982 por su apoyo a movimientos rebeldes en América Latina, aunque ese tipo de vínculos ya no existen. Actualmente, el gobierno estadounidense reconoce que La Habana está jugando un papel constructivo en el proceso de paz de Colombia, sirviendo de anfitrión para los diálogos entre el gobierno colombiano y líderes de la guerrilla.
“Las sanciones por parte de Estados Unidos a la isla comenzaron en 1961 con el objetivo de expulsar a Fidel Castro del poder. A través de los años, varios líderes estadounidenses han concluido que el embargo ha sido un fracaso. A pesar de eso, cualquier iniciativa para eliminarlo ha traído consigo el riesgo de enfurecer a miembros del exilio cubano, un grupo electoral que ha sido decisivo en los comicios nacionales. (…) la generación de cubanos que defienden el embargo está desapareciendo. Miembros de las nuevas generaciones tienen distintos puntos de vista, y muchos sienten que el embargo ha sido contraproducente para fomentar un cambio político. Según una reciente encuesta, el 52 por ciento de norteamericanos de origen cubano en Miami piensan que se debe terminar el embargo. Una amplia mayoría quiere que los países vuelvan a tener relaciones diplomáticas, una posición que comparte el electorado norteamericano en general.
“Cuba y Estados Unidos tienen sedes diplomáticas en sus capitales, conocidas como secciones de interés, que desempeñan las funciones de una embajada. Sin embargo, los diplomáticos estadounidenses tienen pocas oportunidades de salir de la capital para interactuar con el pueblo cubano y su acceso a los dirigentes de la isla es muy limitado.
“En 2009, la administración Obama tomó una serie de pasos importantes para flexibilizar el embargo, facilitando el envío de remesas a la isla y autorizando a un mayor número de cubanos radicados en Estados Unidos a viajar a la isla. También creó planes que permitirían ampliar el acceso a telefonía celular e internet en la isla. Aún así, sería posible hacer más.
"Por ejemplo, se podría eliminar los límites a las remesas, autorizar mecanismos de inversión en las nuevas microempresas cubanas y expandir las oportunidades para norteamericanos que deseen viajar a la isla.
“Washington podría hacer más para respaldar a las empresas norteamericanas que tienen interés en desarrollar el sector de telecomunicaciones en Cuba. Pocas se han atrevido por temor a las posibles repercusiones legales y políticas.
“De no hacerlo, Estados Unidos estaría cediendo el mer­cado cubano a sus rivales. Los presidentes de China y Ru­sia viajaron a Cuba en julio con miras a ampliar vínculos.
“El nivel y envergadura de la relación podría crecer significativamente, dándole a Washington más herramientas pa­ra respaldar reformas democráticas. Es factible que ayu­de a frenar una nueva ola migratoria de cubanos desesperanzados que están viajando a Estados Unidos en balsas.
“Una relación más saludable podría ayudar a resolver el caso de Alan Gross, un experto en desarrollo que lleva casi cinco años detenido en la isla. Más aún, crearía nuevas oportunidades para fortalecer la sociedad civil, con lo cual gradualmente se disminuiría el control que ejerce el estado sobre la vida de los cubanos. Si bien la Casa Blanca puede tomar ciertos pasos unilateralmente, desmantelar el embargo requeriría una acción legislativa en Washington”.
“… varios líderes del hemisferio se reunirán en Ciudad de Panamá con motivo de la séptima Cumbre de las Américas. Varios gobiernos de América Latina insistieron en invitar a Cuba, rompiendo así con la tradición de excluir a la isla por exigencia de Washington.
“Dada la cantidad de crisis a nivel mundial, es posible que la Casa Blanca considere que darle un giro sustancial a su política respecto a Cuba no es una prioridad. Sin embargo, un acercamiento con la isla más poblada del Caribe que incentive el desbloqueo del potencial de los ciudadanos de una de las sociedades más educadas del hemisferio, podría representar un importante legado para la administración.
"También ayudaría a mejorar las relaciones de Estados Unidos con varios países de América Latina y a impulsar iniciativas regionales que han sufrido como consecuencia del antagonismo entre Washington y La Habana.
“…a raíz de la invitación a Cuba a la cumbre, la Casa Blanca no ha confirmado si Obama asistirá.
“Tiene que hacerlo. Sería importante que hiciera presencia y lo considerara como una oportunidad para de­sencadenar un logro histórico.”
¡¡¡¡Una de las sociedades más educadas del hemisferio!!!! Eso sí que es un reconocimiento. Pero, por qué no lo dice de una vez, que en nada se parece a la que nos legó Harry S. Truman cuando su aliado y gran saqueador del tesoro público Fulgencio Batista asaltó el poder el 10 de marzo de 1952, a solo 50 días de las elecciones generales. Aquello no podrá olvidarse nunca.  
El artículo está escrito, como puede apreciarse, con gran habilidad, buscando el mayor beneficio para la política norteamericana en la compleja situación, cuando los problemas políticos, económicos, financieros y comerciales se acrecientan. A ello se suman los derivados del cambio climático acelerado; la competencia comercial; la velocidad, precisión y poder destructivo de armas que amenazan la supervivencia de la humanidad. Lo que hoy se escribe tiene una connotación muy diferente de lo que divulgaban hace solo 40 años cuando nuestro planeta se veía ya obligado a albergar y abastecer de agua y alimentos al equivalente de la mitad de la población mundial actual. Esto sin mencionar la lucha contra el Ébola que amenaza la salud de millones de personas.
Añádase que dentro de unos días la comunidad mundial expondrá ante Naciones Unidas si está de acuerdo o no con el bloqueo a Cuba.

Octubre 13 de 2014
8 y 30 p.m.
Fuente: http://www.granma.cu/cuba/2014-10-14/lo-que-no-podra-olvidarse-nunca

martes, 7 de octubre de 2014

Noel, una foto... y a trabajar

Hoy, 7 de octubre, es el cumpleaños 68 de Noel Nicola Reyes, alias El Drácula. He tenido un día muy trajinado, pero antes de que termine le dedico esta entrada.

Recordándole les paso una foto del 29 de noviembre de 1996, cuando yo cumplía 50 y estábamos celebrando. Esa noche Santiago me había traído a su primogénito, Adriano, y le habíamos hecho un bautizo trovero. Ahí tienen a Noel, alineado con el Santi.

Lázaro, Vicente, Augusto, Noel y Santiago, yo, Amaury y José María

 En otro orden de cosas: el 22 de agosto publiqué Abdala de nuevo sin corriente, después de 8 meses esperando un proceso de traspaso que no parecía tener fin y que, al dilatarse, deterioraba un proyecto que durante tres lustros ha demostrado su utilidad como infraestructura de la música cubana.

Creía y creo que, en el socialismo sustentable que debemos hacer, la cultura y sus medios merecen tratarse como recursos de beneficio espiritual, lo que no quiere decir que piense que deben tener un cheque en blanco. 

Según el proyecto original, los resultados económicos de Abdala serían destinados a la educación. Siempre he sido consciente de que también la salud, la seguridad de los ancianos y la alimentación son más importantes que un Estudio de grabación. Pero también vivo convencido de que un medio de excelencia, una vez que se tiene, debe preservarse, al menos pensando en una futura recuperación. En el caso de un Estudio como Abdala, somos responsables de que exista como factor en una posible industria musical.

El caso es que en la tarde de ayer, 6 de octubre de 2014, los Estudios Abdala pasaron por fin a manos del Ministerio de Cultura.

Gracias a los que de verdad aman la cultura.

Ahora, a trabajar.

viernes, 3 de octubre de 2014

Cintio Vitier, entre los orígenes y la futuridad

Por Luis Toledo Sande

A Fina García Marruz, y a sus “muchachos”


No pretenderá el autor de estas líneas trazar en tan magro espacio una imagen abarcadora de Cintio Vitier. Ni siquiera intentará repetir lo que ya escribió en un texto publicado, como el presente, en Cubarte.* La vastedad y la significación de la obra del creador de tantas páginas fundamentales requiere y tendrá —ha venido teniéndolos ya— estudios a la altura de su legado, tesoro de la patria. Todo momento será apropiado para rendirle homenaje, no solo cuando se han cumplido, el 26 de septiembre, noventa y tres años de su nacimiento, y el 1 de octubre llega un lustro de su muerte.

A la sobrevida en que él creía se suma, ante los ojos de todas las personas que sepan y quieran ver, la permanencia que hacia el futuro le aseguran una obra llena de riquezas y una vida marcada por la sabiduría, la trascendencia y la honradez. Aunque se tuvieran en cuenta solamente los títulos de sus libros, un somero recuento de su producción daría para un rico inventario. Baste recordar una labor poética que, en su primer cuaderno (Poemas, 1938), mereció llevar un texto de presentación de Juan Ramón Jiménez, y de la cual brotaron numerosos volúmenes, incluidas varias antologías hechas a lo largo del tiempo.

Una exploración de su labor ensayística repararía en títulos que pronto devinieron hitos: entre ellos Lo cubano en la poesía y Ese sol del mundo moral, y los dedicados al estudio de José Martí. Son textos afincados en una seria labor investigativa, que dio vida a logros tan importantes como Cincuenta años de poesía cubana, Poetas románticos cubanos y Flor oculta de poesía cubana, este último en labor compartida con Fina García Marruz, como no pocos otros frutos de su quehacer intelectual, y de su vida.

Cuando ya tenía largamente asegurado un lugar en la historia de la literatura y el pensamiento de la nación, y más allá de los lindes de esta, aparecieron volúmenes que mostraron también al narrador, siempre en hombros de la poesía y el ensayo. Lo evidencian las novelas De Peña Pobre, Los papeles de Jacinto Finalé y Rajando la leña está, llenas de testimonios vitales y de fértiles intelecciones.

Para dar idea, sin bordear una enumeración fatigosa, del reconocimiento alcanzado en su trayectoria, solo se requeriría apuntar que en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara recibió el Premio Juan Rulfo por toda su obra, y que el Estado Cubano le otorgó las órdenes  Félix Varela, Carlos J. Finlay y José Martí. Esta última, culminación en la merecida cadena de encomios ganados por tan eminente intelectual y ser humano, remite a la devoción mayor que, junto con la lealtad al cristianismo originario y justiciero, orientó sus actos y sus ideas: la que profesó por el autor de Versos libres y héroe de Dos Ríos.

El arraigo en el pensamiento martiano, abonado en el hogar con el ejemplo de su padre, Medardo Vitier, se lo fortaleció la vocación poética e indagadora que lo llevó a ser miembro eminente del Grupo Orígenes, cuyo nombre empieza y termina por ser expresión de un programa de vida. La búsqueda de las raíces de la patria y de su cultura, de su historia, de su alma, nutrió y decidió su condición martiana, que demostró durante años en la Sala Martí de la Biblioteca Nacional y en el Centro de Estudios Martianos, donde el autor de este artículo vivió el privilegio de conocerlo de cerca y disfrutar de su amistad.

Martí no fue para Cintio Vitier solamente un tema de estudio, aunque ya eso hubiera bastado para agradecerle lo mucho que hizo en ese terreno: fue, dígase con toda claridad, su guía vital. Ello le permitió identificarse con la Revolución Cubana, y ponerse por encima de toda contradicción aparente o real, e incluso de incomprensiones que sufrió y llegaron a tener el cariz de tratos inmerecidos, injustos. Sin alimentar rencores para medrar con ellos, supo reaccionar desde la convicción propia de quien deslinda lo pasajero, por mucho que sea su peso, y lo esencial perdurable.

Sirvió a la Revolución, quizás más que con reconocida humildad, con la certidumbre consciente de que servía al camino señalado por Martí. Esa senda, en la que puede haber desviaciones, porque la transitan seres humanos, no dioses, tiene valor más que suficiente para imantar, hacia la luz de lo recto, a quienes opten por defender la justicia y el sentido ético de la existencia.

Esa lealtad a las esencias de la patria, entroncadas con una Revolución que ha valido y valdrá por la voluntad de justicia social en este mundo, lo preparó para desempeñar una misión de profunda relevancia ideológica. Ante crisis que en los años 90 del siglo pasado surgieron o se agravaron por factores foráneos e insuficiencias internas, la solidez de su pensamiento —que desde temprano braceó en las anchuras y profundidades de la historia de la filosofía, y se afianzó en el conocimiento del devenir patrio— se ratificó en su convocatoria a seguir a Martí en la hora actual.

Quien, como se ha dicho fundadamente, aún joven mostró con su labor ensayística, y con diversas antologías—, una clara vocación de ideólogo, le dio a esta carácter y rumbo de utilidad nacional con una campaña dirigida, desde la escuela, a fomentar la formación martiana de las nuevas generaciones de cubanas y cubanos. Aquel ímpetu saneador merece continuidad real por todos los buenos caminos posibles. Los útiles Cuadernos martianos fueron apenas un indicio palpable, que ratificó ante la patria los valores cívicos que le granjearon a Cintio Vitier la ojeriza de los enemigos de la Revolución, quienes ansiaban que a su turbia urdimbre fuera a parar alguien de la grandeza del autor de Lo cubano en la poesía.

Memoria y honor merece quien legó una obra que honra a la patria, y no dejará de señalar el compromiso que ella —para mantenerse a la altura de la Revolución que le ganó la admiración del mundo— debe continuar abrazando en defensa de la justicia social, los valores éticos, la espiritualidad y la belleza. Son virtudes que aterrarán, como la cruz al diablo, a quienes fueran capaces de reducirlo todo a cuestión de bienestar material, de prosperidad económica. Uno y otra, por muy necesarios que sean, no asegurarán por sí solos la luz de ese sol del mundo moral identificado por José de la Luz y Caballero; no garantizarán el triunfo de la bondad y la cultura que, lo señaló Martí, se requieren para ser dichoso y libre. Eso también lo recuerdan las lecciones de Cintio Vitier.

Fuente:  http://cubarte.cult.cu/periodico/letra-con-filo/cintio-vitier-entre-los-origenes-y-la-futuridad/25958.html