Salvar vidas en el Mediterráneo, un mar de trabas para las ONG Por Lola Herrero
A las 14.06 del viernes 28 de abril, cuatro miembros de la tripulación del Astral, el velero de salvamento marítimo de la ONG española Open Arms, sacaban del buque el cuerpo sin vida de un hombre ante la mirada del empleado de una funeraria, una médica forense y cuatro efectivos de la Guardia Costera italiana. Apostados en la bocana del puerto de Lampedusa, los agentes recibieron el cadáver y lo depositaron en un ataúd de madera. El único comentario que se escuchó fue por parte de la sanitaria, al abrir la cremallera del sudario y observar en su interior: “Irreconocible”, sentenció. El Astral navegó con un cadáver a bordo durante 24 horas. Chrys Basso, el cocinero del equipo, fue el primero en avistarlo con los prismáticos en la inmensidad azul del Mediterráneo central, el viernes a mediodía. No parecía un bidón, ni un neumático como los que quedan en las inmediaciones de donde se llevan a cabo rescates de pateras, así que Basso pidió por el walkie-talkie a sus compañeras de la zódiac que se acercaran a mirar. La respuesta llegó a los pocos minutos: “Confirmo. Es el cuerpo de un hombre”.
Italia vive un aumento de llegadas que no se daba desde el año 2017. El canal de emergencias de Radio Lampedusa está ocupado las 24 horas y la Guardia Costera no parece dar abasto. Porque no hay que olvidar la otra cuenta, la de los vivos: más de 46.000 personas que han emigrado desde las costas norteafricanas en una patera en lo que va de año y han sido rescatadas. De ellas, 36.000 han llegado a costas italianas. Este repunte motivó que el Gobierno de ultraderecha de Giorgia Meloni aprobara hace un mes escaso un “estado de emergencia migratoria” que le permite tomar decisiones sin pasar por el Parlamento y que incluye medidas para facilitar las expulsiones. “La declaración viene porque [el ministro de Transporte y extitular de Interior] Matteo Salvini desmanteló el sistema de acogida y la Guardia Costera”, afirma Óscar Camps, fundador de Open Arms, en referencia al eterno caballo de batalla electoral en Italia.
En ese contexto, las ONG denuncian que no pueden trabajar, lastradas por un rosario de normativas que pasan por encima del derecho internacional. Recuerdan cómo les declaró la guerra el Gobierno de Salvini en 2018, nada más ganar las elecciones. “Desde 2015, todos nuestros movimientos siempre habían estado ordenados por el Centro de Coordinación de Rescate Marítimo (CCRM) y no había ningún problema. Rescatábamos 4.000 personas en un día y nadie jamás se quejó. Luego se acabó todo. Ahora están como pollos sin cabeza”, continúa Camps.
Desde que se avistó el cadáver, la tripulación del Astral intentó que alguna autoridad se hiciera cargo del fallecido. Primero, con Malta, dado que el barco navegaba por aguas de su jurisdicción. No hubo respuesta y probaron con Italia. “Nos dicen que tienen muchas pateras a las que auxiliar, que esperemos”, informó la jefa de misión, Esther Camps, tras contactar con el CCRM. El cadáver era de un varón adulto, vestido con un abrigo naranja y atascado en la cámara de un neumático que debió emplear como un flotador. Yacía doblado sobre sí mismo y con la cabeza sumergida. Por su avanzado estado de descomposición, debió morir al menos 48 horas antes. En los últimos 10 días, 300 personas han muerto o desaparecido en las aguas del Mediterráneo central, según la Organización Internacional de las Migraciones. Ese cuerpo mecido por las olas se suma a la macabra cifra.
El colofón de los problemas de las ONG tuvo lugar el 2 de enero, con la aprobación de un decreto que incluso se ha ganado la reprobación del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos. Una de las medidas es asignar puertos lejanos para desembarcar a los rescatados. “Pedimos ir a Lampedusa, ya que era el más cercano, pero el CCRM nos asignó Taranto, a 61 horas. De camino tuvimos que evacuar a dos personas porque se encontraban en estado crítico”, describe por correo electrónico Axel Steier, portavoz de la ONG Mission Lifeline, que opera con el barco Ocean Viking. También al Humanity 1, de la organización SOS Humanity, se le pidió viajar hasta el puerto de Rávena, a más de 1.600 kilómetros de su ubicación. Estas dos organizaciones y la alemana Sea-Eye han iniciado acciones legales contra Italia por “la asignación sistemática e ilegítima de puertos distantes”, expresa también a través de un correo electrónico su representante, Wasil Schauseil.
De hecho, SOS Humanity ha documentado todas las operaciones, tanto propias como de otras organizaciones, desde diciembre de 2022. En ninguna de ellas se determinó como destino Lampedusa o algún puerto de Sicilia, que son los más cercanos a la zona de búsqueda y rescate de Italia, Malta, Túnez y Libia, donde se producen todos los naufragios. “Esta es una de las prácticas que puso el Gobierno para minimizar el tiempo que podemos ser operativos, cubriendo el trabajo que los mismos Estados han dejado en esta franja del mar”, denuncia por teléfono Juan Matías Gil, jefe de misión del Geo Barents, el buque de salvamento de Médicos Sin Fronteras.
MSF y otras organizaciones humanitarias también denuncian la práctica del desembarco “selectivo”, por la que en noviembre se vivieron momentos críticos. Las autoridades solo admitieron a 357 personas rescatadas por el Geo Barents, dejando a 215 a bordo dos días más. En esos momentos también se aplicó la política de bloqueo de puertos, una de las promesas electorales de la ultraderecha italiana, lo que provocó que otras tres ONG tuvieran que esperar varios días hasta obtener permiso para desembarcar. Entre las cuatro sumaban 1.080 personas recogidas en el mar. Por una situación similar ocurrida en 2019, Open Arms ha llevado ante los tribunales al entonces primer ministro, Matteo Salvini, acusado del “secuestro” de los migrantes que habían sacado del agua. El proceso judicial aún está en marcha.
57 procesos judiciales contra ONG
Otro punto polémico de la nueva norma italiana surge por la obligación de los buques a dirigirse inmediatamente a puerto después de cada actuación, algo que retrasa las operaciones de salvamento, ya que habitualmente estos barcos llevaban a cabo más de un rescate en varios días. La detención de miembros de ONG, sanciones administrativas, multas e inspecciones ha sido analizada por la oficina de la UE para derechos humanos, FRA, que ha contabilizado 57 procesos judiciales contra las organizaciones dedicadas al salvamento en el Mediterráneo entre 2016 y junio de 2022. De estos, 34 terminaron en absolución; tres, en condenas, y 18 están pendientes. La mayoría se decide en tribunales italianos, pero también hay causas abiertas en España, Malta, Grecia, Alemania y Países Bajos. “Todas estas prácticas suponen una violación del derecho marítimo internacional y una restricción a la asistencia humanitaria”, concluye Gil.
Frente al discurso del “efecto llamada” del trabajo de estas ONG, el investigador principal del ISPI (Istituto per gli Studi di Politica Internazionale), Matteo Vila, publicó recientemente unos números que muestran cómo, en un contexto de llegadas como el actual, estas organizaciones solo rescataron alrededor de un 8% de esas personas. En el mismo periodo del año anterior, con menos llegadas, las ONG intervinieron en el 21% de las operaciones de salvamento.
En medio de tal maremágnum de restricciones, el propio CCRM se ha visto obligado a pedir ayuda a las ONG, algo que no se veía desde hace más de un lustro. El Astral ha sido el último barco en ser requerido por las autoridades para acudir al auxilio de una patera que acabó naufragando con 47 personas a bordo. El velero Nadir, de la ONG Resqship, intervino el 9 de abril, cuando la Guardia Costera italiana les pidió buscar otra embarcación. “Había demasiadas peticiones de socorro y ellos habían llegado al límite de sus capacidades”, relata su portavoz, Andrea Finker. Salvaron a 22 personas y recuperaron dos cadáveres, pero los supervivientes aseguraron que otros 20 más se habían ahogado durante la espera. El 26 y el 28 de abril esta organización recibió nuevos avisos para ocuparse de otros dos naufragios.
Para Gil, de MSF, estos episodios obedecen también a que después de la tragedia de Crotona, en la que murieron más de 90 personas en febrero, no se puede permitir ninguna más en costas italianas. “Es muy evidente que aquello ocurrió por una negligencia, por omisión de rescate”, asegura.
Cadáver en la cubierta
Costó trabajo que alguien se hiciera responsable del cuerpo que recuperó el Astral. Caía la tarde en el Mediterráneo central, el mismo día del hallazgo, y este seguía en el agua. El CCRM insistía al capitán, Savvas Kourepinis, que siguiera esperando porque había mucho trabajo de rescate de los vivos. Dado que con la llegada de la noche iba a ser más difícil tenerlo localizado, obtuvieron el visto bueno para subirlo al velero. La operación se llevó a cabo con todas las precauciones y no estuvo exenta de dificultad. Una vez fuera del agua, el hombre fue cuidadosamente envuelto en un sudario y depositado en la proa.
Unas horas después, recibieron noticias de que se aproximaba una lancha de la Guardia Costera para recoger al cadáver y a 21 jóvenes de origen tunecino que el Astral también había localizado, pero cuando llegaron, ya en plena noche, se negaron a hacerse cargo del fallecido y se marcharon. De nuevo, Kourepinis pidió instrucciones y la orden en esa ocasión fue que ayudaran a localizar más pateras e informaran de sus posiciones. El ahogado anónimo, mientras, pasó la noche en la cubierta. El viernes por la mañana, la radio siguió escupiendo maydays, pero el Astral no pudo atenderlos: por fin habían obtenido permiso para navegar hasta Lampedusa y entregar el cuerpo recuperado del mar.
Como aclaró el Presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez: "Quienes han movido la matriz de no celebrar la fiesta del proletariado mundial en Cuba son la contrarrevolución y los odiadores, no los trabajadores del país."
A título personal, propongo a mi Gobierno, en mi modesta condición de Ciudadano, modesto veterano Combatiente de Lucha Clandestina y Economista jubilado evaluar sin dilación en lo posible:
-La necesidad de crear un CONSEJO ECONÓMICO ASESOR para enfrentar y proponer las medidas pertinentes para resolver el grave problema cambiario, a fin de comenzar a controlar la inflación y equilibrio monetario / financiero de nuestra ECONOMIA.
Me atrevo a sugerir entre sus componentes a los compañeros: Joaquin Benavides Rodríguez ( ponente); Prof. Humberto Pérez, Fidel Vascós, Julio Carranza, Humberto Herrera Carles, A. Terrero, Figueras, PROF. Juan Triana, Luis Marcelo, Carlos Alzugaray, otros).
Todos somos necesarios…Nuevamente sobre la Estabilización Macroeconómica… Por Félix Sautié Mederos
Los viejos que ya no aportan, nunca deberian ser subestimados, porque su aporte histórico fue decisivo y siempre lo será…
Es muy importante pensar en los viejos sin despriorizarlos ante los que en la actualidad, dado su edad más joven continúan aportando…
La grave situación económica que estamos sufriendo requiere de urgencias y del establecimiento de prioridades. Es algo necesario y evidente que no debe afectar la integralidad de las soluciones que se planteen, porque hay sectores poblacionales, como son el de los viejos de más de 65 años que fueron durante mucho tiempo los constructores del socialismo en Cuba, que asumieron la vida , las soluciones, los momentos difíciles y todos los logros sociales que han llegado hasta nuestros días; pero que hoy, no pueden continuar aportando dado su longevidad y achaques.
Este sector de la sociedad que ya no puede continuar aportando como antes lo hacían, es el que más sufre las actuales contigencias y reducciones a que estamos expuestos y que ya no concitan una prioridad esencial . Además que dado el año en que se jubilaron lo tuvieron que hacer conforme a una anterior Ley de Jubilación más desfavorable que la actual por lo que sus pensiones son más insuficientes que las de los que se jubilaron por la actual Ley al respecto. Esta desventaja, evidentemente ,no se tuvo en cuenta en el diseño del “ORDENAMIENTO”.
Lo que planteo constituyen situaciones negativas que tienen un trasfondo muy especial, que quizás no es lo suficiente evidente que tuvieran que ser y que pueden convertirse en una bomba de tiempo.
Quiero exponer al respecto lo que pienso: En especial,cuando me pongo a analizar los problemas que tenemos por delante y las concepciones de que se puede partir en algunas propuestas de soluciones al respecto en las que las precariedades endógenas de la ancianidad, en mi criterio. no sean tomadas en cuenta como deberían ser. Porque no se analicen integralmente las afectaciones que tendrían. La vida es una sola y se vive una única vez. El derecho a vivirla es de todos sin excepciones.
Además quiero plantear, que hay una causal en la espiral migratoria que estamos sufriendo, quizás poco evidente, que es la concepción negativa que muchos jóvenes perciben a partir de todo lo que sus padres hicieron y la insuficiente consideración de que disfrutan en la actualidad. Por lo que ellos, jóvenes, se sienten desmotivados al respecto.
Si se hiciera un análisis profundo del actual escapismo que sufre la sociedad cubana, pienso que se haría evidente esta desmotivación en muchos jóvenes que se marchan y, que las plantean a sus padres y familiares. Lo he analizado a profundidad e incluso lo he sufrido personalmente.
Así lo pienso y así lo expreso con toda franqueza respetando la diferencias de opiniones al respecto. Además sin querer ofender a nadie en particular.
Finalmente planteo que en las circunstancias actuales, renuevo mi voto de confianza al Gobierno de las nuevas generaciones, que han asumido los timones de mando de la sociedad y que tienen que asumuir las soluciones necesarias para la Economía cubana, lo que reitero es urgente, tal y como se plantea en casi todas las propuestas de soluciones que se están expresando.
Hace poco tuve el placer de leer el libro autobiográfico Tan solo con 16, escrito por el general Rogelio Acevedo y publicado por la Casa Editorial Verde Olivo. En esta obra, Acevedo narra sus experiencias como guerrillero, uno de los más jóvenes en incorporarse al Ejército Rebelde. Son entrañables páginas, muy honestas, que narran con lujo de detalles todas las peripecias y dificultades que protagonizara el entonces joven teniente en la Sierra Maestra y en la invasión hasta el Escambray, culminando con la épica batalla de Santa Clara.
Si tuviera que elegir una frase que sintetizara todo el libro, escogería una dicha por el Che a sus subordinados: «Valiente es el que tiene más vergüenza que miedo». Acevedo no extrapola la frase ni trata de buscarle un mayor significado: la aplica en su narración como mismo la aplicara en su vida de guerrillero, con sentido práctico. Ser valiente implicaba tenerle miedo al miedo, implicaba no la ausencia irracional de ese sentimiento sino la decisión consciente de vencerlo para no ser tildado de cobarde.
El valor personal ha sido, para la historia de Cuba, un elemento constitutivo sine qua non de la autoridad moral y política. Desde el siglo XIX, con los mambises, un jefe que no cargara al machete de primero contra los españoles tenía escasas posibilidades de dirigir en el Ejército Libertador. De ahí que las bajas entre oficiales eran tan numerosas: sin dinero, sin comida, sin avituallamiento alguno… ¿con qué llamar a la muerte a esos soldados de la manigua? Solo con el ejemplo, solo apelando a la vergüenza.
En la Sierra Maestra ocurriría lo mismo. Pese a la persistente voluntad del alto mando rebelde por preservar a los cuadros más valiosos, la dinámica misma de la guerrilla compulsaba a sus tenientes, capitanes y comandantes a asumir las posiciones de mayor riesgo. ¿De qué otra forma llamar a campesinos y jóvenes a que se colocaran en la línea de fuego? Los casi legendarios relatos de arrojo de jefes como Camilo Cienfuegos son prueba de ello, o el hecho de que el Che –y así lo recoge Acevedo en su libro– valorara por encima de todo, aun de las capacidades intelectuales, el arrojo personal.
Un líder histórico como Fidel nunca hubiera tenido la autoridad moral y política que poseyó si no se hubiera expuesto a la muerte tantas veces, desafiándola y venciéndola. El pueblo de Cuba no sigue a cobardes. Se hace sencillo, por ende, entender que aquellos «líderes» que, a distancia prudente, encomiendan a los que aquí vivimos a «tomar la calle»; a esos «agitadores» que pagan por transferencia para que otros acometan actos de vandalismo; a esos que, desde el extranjero, llaman «carneros» a los que elegimos permanecer en nuestro país; a los que se dicen martianos, pero han hecho de la Patria un pedestal por el que no están dispuestos a sacrificar ni una gota de sangre ni un centavo; a ellos nadie los sigue en realidad, salvo las víctimas del (auto)engaño.
El coraje es un valor tan indisolublemente unido al alma de esta nación que hasta sus poetas lo hacen parte de un romance. No extraña que cante Silvio: «Los amores cobardes no llegan a amores ni a historias, se quedan allí. Ni el recuerdo los puede salvar». Por eso y por tantas otras cosas, que no podría explicar aquí, me siento tan identificado con la frase del Che y con esa actitud de asumir la batalla, por cruenta que sea, que recorre el libro del general Acevedo. Porque pueden llamarme muchas cosas, pueden insultarme de muchas formas; pueden no entenderme o no compartir lo que digo y pienso; pero lo que nunca admitiría, bajo ningún concepto, es que alguien me llamase cobarde.
10 comentarios:
Armando G. Tejeda: Se desploma la afiliación a sindicatos en Europa
Javier Sulé: Treinta años de impunidad de la contaminación de Chevron-Texaco en Ecuador: "La Amazonía sigue sangrando"
El caso Chevron no ha acabado, pero ilustra muy bien el poder de las grandes corporaciones y la impunidad con la que actúan en los países del sur global ante la falta de una regulación internacional que vele por el cumplimiento de los derechos humanos por parte de las empresas.
Salvar vidas en el Mediterráneo, un mar de trabas para las ONG
Por Lola Herrero
A las 14.06 del viernes 28 de abril, cuatro miembros de la tripulación del Astral, el velero de salvamento marítimo de la ONG española Open Arms, sacaban del buque el cuerpo sin vida de un hombre ante la mirada del empleado de una funeraria, una médica forense y cuatro efectivos de la Guardia Costera italiana. Apostados en la bocana del puerto de Lampedusa, los agentes recibieron el cadáver y lo depositaron en un ataúd de madera. El único comentario que se escuchó fue por parte de la sanitaria, al abrir la cremallera del sudario y observar en su interior: “Irreconocible”, sentenció. El Astral navegó con un cadáver a bordo durante 24 horas. Chrys Basso, el cocinero del equipo, fue el primero en avistarlo con los prismáticos en la inmensidad azul del Mediterráneo central, el viernes a mediodía. No parecía un bidón, ni un neumático como los que quedan en las inmediaciones de donde se llevan a cabo rescates de pateras, así que Basso pidió por el walkie-talkie a sus compañeras de la zódiac que se acercaran a mirar. La respuesta llegó a los pocos minutos: “Confirmo. Es el cuerpo de un hombre”.
Italia vive un aumento de llegadas que no se daba desde el año 2017. El canal de emergencias de Radio Lampedusa está ocupado las 24 horas y la Guardia Costera no parece dar abasto. Porque no hay que olvidar la otra cuenta, la de los vivos: más de 46.000 personas que han emigrado desde las costas norteafricanas en una patera en lo que va de año y han sido rescatadas. De ellas, 36.000 han llegado a costas italianas. Este repunte motivó que el Gobierno de ultraderecha de Giorgia Meloni aprobara hace un mes escaso un “estado de emergencia migratoria” que le permite tomar decisiones sin pasar por el Parlamento y que incluye medidas para facilitar las expulsiones. “La declaración viene porque [el ministro de Transporte y extitular de Interior] Matteo Salvini desmanteló el sistema de acogida y la Guardia Costera”, afirma Óscar Camps, fundador de Open Arms, en referencia al eterno caballo de batalla electoral en Italia.
En ese contexto, las ONG denuncian que no pueden trabajar, lastradas por un rosario de normativas que pasan por encima del derecho internacional. Recuerdan cómo les declaró la guerra el Gobierno de Salvini en 2018, nada más ganar las elecciones. “Desde 2015, todos nuestros movimientos siempre habían estado ordenados por el Centro de Coordinación de Rescate Marítimo (CCRM) y no había ningún problema. Rescatábamos 4.000 personas en un día y nadie jamás se quejó. Luego se acabó todo. Ahora están como pollos sin cabeza”, continúa Camps.
Desde que se avistó el cadáver, la tripulación del Astral intentó que alguna autoridad se hiciera cargo del fallecido. Primero, con Malta, dado que el barco navegaba por aguas de su jurisdicción. No hubo respuesta y probaron con Italia. “Nos dicen que tienen muchas pateras a las que auxiliar, que esperemos”, informó la jefa de misión, Esther Camps, tras contactar con el CCRM. El cadáver era de un varón adulto, vestido con un abrigo naranja y atascado en la cámara de un neumático que debió emplear como un flotador. Yacía doblado sobre sí mismo y con la cabeza sumergida. Por su avanzado estado de descomposición, debió morir al menos 48 horas antes. En los últimos 10 días, 300 personas han muerto o desaparecido en las aguas del Mediterráneo central, según la Organización Internacional de las Migraciones. Ese cuerpo mecido por las olas se suma a la macabra cifra.
Salvar vidas en el Mediterráneo... (2)
El colofón de los problemas de las ONG tuvo lugar el 2 de enero, con la aprobación de un decreto que incluso se ha ganado la reprobación del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos. Una de las medidas es asignar puertos lejanos para desembarcar a los rescatados. “Pedimos ir a Lampedusa, ya que era el más cercano, pero el CCRM nos asignó Taranto, a 61 horas. De camino tuvimos que evacuar a dos personas porque se encontraban en estado crítico”, describe por correo electrónico Axel Steier, portavoz de la ONG Mission Lifeline, que opera con el barco Ocean Viking. También al Humanity 1, de la organización SOS Humanity, se le pidió viajar hasta el puerto de Rávena, a más de 1.600 kilómetros de su ubicación. Estas dos organizaciones y la alemana Sea-Eye han iniciado acciones legales contra Italia por “la asignación sistemática e ilegítima de puertos distantes”, expresa también a través de un correo electrónico su representante, Wasil Schauseil.
De hecho, SOS Humanity ha documentado todas las operaciones, tanto propias como de otras organizaciones, desde diciembre de 2022. En ninguna de ellas se determinó como destino Lampedusa o algún puerto de Sicilia, que son los más cercanos a la zona de búsqueda y rescate de Italia, Malta, Túnez y Libia, donde se producen todos los naufragios. “Esta es una de las prácticas que puso el Gobierno para minimizar el tiempo que podemos ser operativos, cubriendo el trabajo que los mismos Estados han dejado en esta franja del mar”, denuncia por teléfono Juan Matías Gil, jefe de misión del Geo Barents, el buque de salvamento de Médicos Sin Fronteras.
MSF y otras organizaciones humanitarias también denuncian la práctica del desembarco “selectivo”, por la que en noviembre se vivieron momentos críticos. Las autoridades solo admitieron a 357 personas rescatadas por el Geo Barents, dejando a 215 a bordo dos días más. En esos momentos también se aplicó la política de bloqueo de puertos, una de las promesas electorales de la ultraderecha italiana, lo que provocó que otras tres ONG tuvieran que esperar varios días hasta obtener permiso para desembarcar. Entre las cuatro sumaban 1.080 personas recogidas en el mar. Por una situación similar ocurrida en 2019, Open Arms ha llevado ante los tribunales al entonces primer ministro, Matteo Salvini, acusado del “secuestro” de los migrantes que habían sacado del agua. El proceso judicial aún está en marcha.
57 procesos judiciales contra ONG
Otro punto polémico de la nueva norma italiana surge por la obligación de los buques a dirigirse inmediatamente a puerto después de cada actuación, algo que retrasa las operaciones de salvamento, ya que habitualmente estos barcos llevaban a cabo más de un rescate en varios días. La detención de miembros de ONG, sanciones administrativas, multas e inspecciones ha sido analizada por la oficina de la UE para derechos humanos, FRA, que ha contabilizado 57 procesos judiciales contra las organizaciones dedicadas al salvamento en el Mediterráneo entre 2016 y junio de 2022. De estos, 34 terminaron en absolución; tres, en condenas, y 18 están pendientes. La mayoría se decide en tribunales italianos, pero también hay causas abiertas en España, Malta, Grecia, Alemania y Países Bajos. “Todas estas prácticas suponen una violación del derecho marítimo internacional y una restricción a la asistencia humanitaria”, concluye Gil.
Frente al discurso del “efecto llamada” del trabajo de estas ONG, el investigador principal del ISPI (Istituto per gli Studi di Politica Internazionale), Matteo Vila, publicó recientemente unos números que muestran cómo, en un contexto de llegadas como el actual, estas organizaciones solo rescataron alrededor de un 8% de esas personas. En el mismo periodo del año anterior, con menos llegadas, las ONG intervinieron en el 21% de las operaciones de salvamento.
Salvar vidas en el Mediterráneo... (3 y fin)
En medio de tal maremágnum de restricciones, el propio CCRM se ha visto obligado a pedir ayuda a las ONG, algo que no se veía desde hace más de un lustro. El Astral ha sido el último barco en ser requerido por las autoridades para acudir al auxilio de una patera que acabó naufragando con 47 personas a bordo. El velero Nadir, de la ONG Resqship, intervino el 9 de abril, cuando la Guardia Costera italiana les pidió buscar otra embarcación. “Había demasiadas peticiones de socorro y ellos habían llegado al límite de sus capacidades”, relata su portavoz, Andrea Finker. Salvaron a 22 personas y recuperaron dos cadáveres, pero los supervivientes aseguraron que otros 20 más se habían ahogado durante la espera. El 26 y el 28 de abril esta organización recibió nuevos avisos para ocuparse de otros dos naufragios.
Para Gil, de MSF, estos episodios obedecen también a que después de la tragedia de Crotona, en la que murieron más de 90 personas en febrero, no se puede permitir ninguna más en costas italianas. “Es muy evidente que aquello ocurrió por una negligencia, por omisión de rescate”, asegura.
Cadáver en la cubierta
Costó trabajo que alguien se hiciera responsable del cuerpo que recuperó el Astral. Caía la tarde en el Mediterráneo central, el mismo día del hallazgo, y este seguía en el agua. El CCRM insistía al capitán, Savvas Kourepinis, que siguiera esperando porque había mucho trabajo de rescate de los vivos. Dado que con la llegada de la noche iba a ser más difícil tenerlo localizado, obtuvieron el visto bueno para subirlo al velero. La operación se llevó a cabo con todas las precauciones y no estuvo exenta de dificultad. Una vez fuera del agua, el hombre fue cuidadosamente envuelto en un sudario y depositado en la proa.
Unas horas después, recibieron noticias de que se aproximaba una lancha de la Guardia Costera para recoger al cadáver y a 21 jóvenes de origen tunecino que el Astral también había localizado, pero cuando llegaron, ya en plena noche, se negaron a hacerse cargo del fallecido y se marcharon. De nuevo, Kourepinis pidió instrucciones y la orden en esa ocasión fue que ayudaran a localizar más pateras e informaran de sus posiciones. El ahogado anónimo, mientras, pasó la noche en la cubierta. El viernes por la mañana, la radio siguió escupiendo maydays, pero el Astral no pudo atenderlos: por fin habían obtenido permiso para navegar hasta Lampedusa y entregar el cuerpo recuperado del mar.
https://elpais.com/internacional/2023-05-01/salvar-vidas-en-el-mediterraneo-un-mar-de-trabas-para-las-ong.html
Ñó..!
Arturo Chang: La Guagua: Se les aguó la fiesta a los odiadores
Como aclaró el Presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez:
"Quienes han movido la matriz de no celebrar la fiesta del proletariado mundial en Cuba son la contrarrevolución y los odiadores, no los trabajadores del país."
De Dionisio Andrés Soto Arado:
Estimados compañeros, amigos y colegas:
A título personal, propongo a mi Gobierno, en mi modesta condición de Ciudadano, modesto veterano Combatiente de Lucha Clandestina y Economista jubilado evaluar sin dilación en lo posible:
-La necesidad de crear un CONSEJO ECONÓMICO ASESOR para enfrentar y proponer las medidas pertinentes para resolver el grave problema cambiario, a fin de comenzar a controlar la inflación y equilibrio monetario / financiero de nuestra ECONOMIA.
Me atrevo a sugerir entre sus componentes a los compañeros: Joaquin Benavides Rodríguez ( ponente); Prof. Humberto Pérez, Fidel Vascós, Julio Carranza, Humberto Herrera Carles, A. Terrero, Figueras, PROF. Juan Triana, Luis Marcelo, Carlos Alzugaray, otros).
Cordialmente
Lic. Dionisio Andrés Soto Arado
ECONOMISTA- COMBATIENTE LC.
Todos somos necesarios…Nuevamente sobre la Estabilización Macroeconómica…
Por Félix Sautié Mederos
Los viejos que ya no aportan, nunca deberian ser subestimados, porque su aporte histórico fue decisivo y siempre lo será…
Es muy importante pensar en los viejos sin despriorizarlos ante los que en la actualidad, dado su edad más joven continúan aportando…
La grave situación económica que estamos sufriendo requiere de urgencias y del establecimiento de prioridades. Es algo necesario y evidente que no debe afectar la integralidad de las soluciones que se planteen, porque hay sectores poblacionales, como son el de los viejos de más de 65 años que fueron durante mucho tiempo los constructores del socialismo en Cuba, que asumieron la vida , las soluciones, los momentos difíciles y todos los logros sociales que han llegado hasta nuestros días; pero que hoy, no pueden continuar aportando dado su longevidad y achaques.
Este sector de la sociedad que ya no puede continuar aportando como antes lo hacían, es el que más sufre las actuales contigencias y reducciones a que estamos expuestos y que ya no concitan una prioridad esencial . Además que dado el año en que se jubilaron lo tuvieron que hacer conforme a una anterior Ley de Jubilación más desfavorable que la actual por lo que sus pensiones son más insuficientes que las de los que se jubilaron por la actual Ley al respecto. Esta desventaja, evidentemente ,no se tuvo en cuenta en el diseño del “ORDENAMIENTO”.
Lo que planteo constituyen situaciones negativas que tienen un trasfondo muy especial, que quizás no es lo suficiente evidente que tuvieran que ser y que pueden convertirse en una bomba de tiempo.
Quiero exponer al respecto lo que pienso: En especial,cuando me pongo a analizar los problemas que tenemos por delante y las concepciones de que se puede partir en algunas propuestas de soluciones al respecto en las que las precariedades endógenas de la ancianidad, en mi criterio. no sean tomadas en cuenta como deberían ser. Porque no se analicen integralmente las afectaciones que tendrían. La vida es una sola y se vive una única vez. El derecho a vivirla es de todos sin excepciones.
Además quiero plantear, que hay una causal en la espiral migratoria que estamos sufriendo, quizás poco evidente, que es la concepción negativa que muchos jóvenes perciben a partir de todo lo que sus padres hicieron y la insuficiente consideración de que disfrutan en la actualidad. Por lo que ellos, jóvenes, se sienten desmotivados al respecto.
Si se hiciera un análisis profundo del actual escapismo que sufre la sociedad cubana, pienso que se haría evidente esta desmotivación en muchos jóvenes que se marchan y, que las plantean a sus padres y familiares. Lo he analizado a profundidad e incluso lo he sufrido personalmente.
Así lo pienso y así lo expreso con toda franqueza respetando la diferencias de opiniones al respecto. Además sin querer ofender a nadie en particular.
Finalmente planteo que en las circunstancias actuales, renuevo mi voto de confianza al Gobierno de las nuevas generaciones, que han asumido los timones de mando de la sociedad y que tienen que asumuir las soluciones necesarias para la Economía cubana, lo que reitero es urgente, tal y como se plantea en casi todas las propuestas de soluciones que se están expresando.
https://felixsautie.com/articulos.php?todos-somos-necesarios-nuevamente-sobre-la-estabilizacion-macroeconomica
COBARDE
Por Michael E. Torres Corona
Hace poco tuve el placer de leer el libro autobiográfico Tan solo con 16, escrito por el general Rogelio Acevedo y publicado por la Casa Editorial Verde Olivo. En esta obra, Acevedo narra sus experiencias como guerrillero, uno de los más jóvenes en incorporarse al Ejército Rebelde. Son entrañables páginas, muy honestas, que narran con lujo de detalles todas las peripecias y dificultades que protagonizara el entonces joven teniente en la Sierra Maestra y en la invasión hasta el Escambray, culminando con la épica batalla de Santa Clara.
Si tuviera que elegir una frase que sintetizara todo el libro, escogería una dicha por el Che a sus subordinados: «Valiente es el que tiene más vergüenza que miedo». Acevedo no extrapola la frase ni trata de buscarle un mayor significado: la aplica en su narración como mismo la aplicara en su vida de guerrillero, con sentido práctico. Ser valiente implicaba tenerle miedo al miedo, implicaba no la ausencia irracional de ese sentimiento sino la decisión consciente de vencerlo para no ser tildado de cobarde.
El valor personal ha sido, para la historia de Cuba, un elemento constitutivo sine qua non de la autoridad moral y política. Desde el siglo XIX, con los mambises, un jefe que no cargara al machete de primero contra los españoles tenía escasas posibilidades de dirigir en el Ejército Libertador. De ahí que las bajas entre oficiales eran tan numerosas: sin dinero, sin comida, sin avituallamiento alguno… ¿con qué llamar a la muerte a esos soldados de la manigua? Solo con el ejemplo, solo apelando a la vergüenza.
En la Sierra Maestra ocurriría lo mismo. Pese a la persistente voluntad del alto mando rebelde por preservar a los cuadros más valiosos, la dinámica misma de la guerrilla compulsaba a sus tenientes, capitanes y comandantes a asumir las posiciones de mayor riesgo. ¿De qué otra forma llamar a campesinos y jóvenes a que se colocaran en la línea de fuego? Los casi legendarios relatos de arrojo de jefes como Camilo Cienfuegos son prueba de ello, o el hecho de que el Che –y así lo recoge Acevedo en su libro– valorara por encima de todo, aun de las capacidades intelectuales, el arrojo personal.
Un líder histórico como Fidel nunca hubiera tenido la autoridad moral y política que poseyó si no se hubiera expuesto a la muerte tantas veces, desafiándola y venciéndola. El pueblo de Cuba no sigue a cobardes. Se hace sencillo, por ende, entender que aquellos «líderes» que, a distancia prudente, encomiendan a los que aquí vivimos a «tomar la calle»; a esos «agitadores» que pagan por transferencia para que otros acometan actos de vandalismo; a esos que, desde el extranjero, llaman «carneros» a los que elegimos permanecer en nuestro país; a los que se dicen martianos, pero han hecho de la Patria un pedestal por el que no están dispuestos a sacrificar ni una gota de sangre ni un centavo; a ellos nadie los sigue en realidad, salvo las víctimas del (auto)engaño.
El coraje es un valor tan indisolublemente unido al alma de esta nación que hasta sus poetas lo hacen parte de un romance. No extraña que cante Silvio: «Los amores cobardes no llegan a amores ni a historias, se quedan allí. Ni el recuerdo los puede salvar». Por eso y por tantas otras cosas, que no podría explicar aquí, me siento tan identificado con la frase del Che y con esa actitud de asumir la batalla, por cruenta que sea, que recorre el libro del general Acevedo. Porque pueden llamarme muchas cosas, pueden insultarme de muchas formas; pueden no entenderme o no compartir lo que digo y pienso; pero lo que nunca admitiría, bajo ningún concepto, es que alguien me llamase cobarde.
https://www.granma.cu/mundo/2023-04-28/cobarde-28-04-2023-23-04-43
Si alguien sabe en qué librería se puede adquirir el libro de Acevedo, que, por favor, me lo haga saber por ojala@cubarte.cult.cu
Gracias
Publicar un comentario