Por Ernesto Padrón
La bodega es un
establecimiento comercial que viene del Medioevo. Pero estoy seguro de que las
bodegas de esa época eran más bonitas que las que tenemos en Cuba. Y perdonen
que tome la bodega para introducir este fenómeno que he querido llamar “la
cultura de la miseria”.
Se rompe el cristal
de la ventana y no hay otro para sustituirlo. La solución rápida es colocar una
tabla o algo parecido. Al principio se ve fea, pero luego pasa a ser lo feo
inevitable y se perpetúa en tiempo y espacio.
A nadie le molesta.
Pero los deterioros
se van acumulando, porque el tiempo es testarudo, sobre todo si no hay un
mantenimiento programado o se maltratan los recursos que uno tiene. Y la
solución del tablón en la ventana se convierte en una especie de “tabla de
salvación” contra la real escasez de recursos. Un pedacito de cartón sirve para
hacer un cartel anunciando una reunión o la llegada de la leche de dieta. Un
pedazo de tela puede cubrir al mostrador que hace años ni se repara ni se
pinta.
La cultura de la
miseria va más allá de lo material y no solo se sufre en las viejas bodegas. En
la moderna tienda “El Bodegón”, en el Vedado, un pequeño rectángulo de papel,
escrito a mano y pegado al cristal con trozos de cinta adhesiva decía:
“Estimado cliente: Hoy cerramos hasta nuevo aviso por reparación general.
Trabajamos pensando en usted”.
Piensen cuántas
proyecciones se descubren en ese anuncio. Lo sorpresivo de la información y la
forma de presentarla contradicen la estimación por los clientes. Y la frase
final es una muestra palpable de que el escritor de la nota desconoce su falta
de profesionalidad. El daño sobre todo está en la formación de valores. Es
importante asegurar lo material de nuestras vidas, pero los valores son los que
hacen posible nuestra vida espiritual.
La cultura de la
miseria se arraiga con fuerza y, aunque su sustento material se elimine, sigue
en las mentes de los que se adaptaron a ella. Se ve en el trabajador particular
cuando, teniendo recursos, repite en su negocio los mismos errores del Estado:
los carteles escritos a mano, abrir a destiempo, parar la venta por el cambio
de turno, no mantener la estética del lugar o la de sus empleados…
Llevamos muchos
años luchando contra las escaseces; con la mayoría de los recursos
centralizados; con el bloqueo norteamericano obligándonos a priorizar y
posponer las necesidades. Pero en esa batalla por mejorar nuestra economía
debemos luchar sin descanso por el mejoramiento humano. Si no lo hacemos estaremos
perdiendo la base de la justicia y el bienestar social que queremos alcanzar.
La bodega es una
especie de símbolo de nuestra sobrevivencia y de nuestra vocación por lograr la
justicia social, pero también es un símbolo de cuánto nos falta por hacer. Mejorar
las condiciones de trabajo, ser profesionales, ser eficientes, ser honestos,
ser disciplinados, ser solidarios, no machacar a la gente, y odiar lo mal
hecho, el mal gusto, a pesar de los pesares, es algo muy difícil en medio de cualquier
crisis, pero nos va la Humanidad y el Socialismo en ello.
Abril de 2017
221 comentarios:
«El más antiguo ‹Más antiguo 201 – 221 de 221Que impresionante y conmovedor, Silvio, estas personas como tu amiga la Dra. María del Carmen Barroso, son las que bajan el cielo, lo comparten y lo hacen una realidad tangible.
Es por ello que no se van, pues el cielo siempre estuvo con ellos y en ellos.
Que orgullo, Silvio.
http://pijamasurf.com/2017/05/por_que_instagram_representa_la_muerte_de_lo_mejor_que_tenia_internet/
Sobre Vzla: no quisiera pecar de ingenuo, pero mi impresion es que aquello se tambalea... Fuerza a los que intentan hacer la patria diseñada por el gran Chavez que se inspiro en Bolivar.
Creo que igual,Wadud, porque unos dirían que sería mejor desarrollarnos de una manera,y otros de otra. Y seguiría existiendo conflicto,aunque por otro motivo.
Lo que somos,y como desarrollarnos,esta escrito en nosotros mismos.
Sólo debemos callarnos para escucharlo.
Curioso.
La sequía en Somalia bajo el lente de un fotógrafo humanitario
NacionesUnidasVideo
https://www.youtube.com/watch?v=JkQPpLKd9sM
Sí Silvio, recemos unidos, yo te tomo en serio aunq pueda ser me estés embromando.
Mariola, claro, de todo en la viña, tal como decís.
Danieladrian, Francisco no necesita q lo defienda, pero te diría q no repitas cosas q no tienes como probar, y negar así cosas q sí están probadas, tanto q incluso Hebe de Bonafini fue al Vaticano a pedirle perdón.
Dentro de los desaparecidos olvidan con mucha frecuencia q hay gente de Iglesia, hay sacerdotes, monjas y catequistas q tuvieron q pagar x ir a las villas.
Y como dijo Mariola, de todo hubo y hay, desde un Mons Plaza, pero tb un Mons Novak o Hesaine...
Volver a los diecisiete
(Violeta Parra)
Volver a los diecisiete
después de vivir un siglo
es como descifrar signos
sin ser sabio competente.
Volver a ser de repente
tan frágil como un segundo,
volver a sentir profundo
como un niño frente a Dios,
eso es lo que siento yo
en este instante fecundo.
Se va enredando, enredando,
como en el muro la hiedra,
y va brotando, brotando,
como el musguito en la piedra,
ay, sí sí sí.
Mi paso retrocedido,
cuando el de ustedes avanza;
el arco de las alianzas
ha penetrado en mi nido
con todo su colorido,
se ha paseado por mis venas
y hasta las duras cadenas
con que nos ata el destino
es como un diamante fino
que alumbra mi alma serena.
Lo que puede el sentimiento
no lo ha podido el saber,
ni el más claro proceder
ni el más ancho pensamiento.
Todo lo cambia el momento
cual mago condescendiente,
nos aleja dulcemente
de rencores y violencia:
solo el amor con su ciencia
nos vuelve tan inocentes.
El amor es torbellino
de pureza original;
hasta el feroz animal
susurra su dulce trino,
detiene a los peregrinos,
libera a los prisioneros;
el amor con sus esmeros
al viejo lo vuelve niño
y al malo solo el cariño
lo vuelve puro y sincero.
De par en par la ventana
se abrió como por encanto,
entró el amor con su manto
como una tibia mañana;
al son de su bella diana
hizo brotar el jazmín,
volando cual serafín,
al cielo le puso aretes
y mis años en diecisiete
los convirtió el querubín.
Patricia, aqui todos pudiéramos estarnos embromando. Así que si no partimos de un respeto al menos virtual no vale la pena rezar ni luchar y mucho menos invertir un solo segundo de nuestras vidas
Silvio querido, no entiendo , soy medio bruto y gallego además
Perfecto. Espero sinceramente no tomen lo q digo como falta de respeto, nada más lejos de eso es mi intención.
Mando un sincero abrazo a todos, sin excepción.
Hasta en eso hay diferencias, Juan Tomás.
Hola Wadud.
Creo que la diferencia no tiene porque ser un problema,siempre y cuando se encamine a un buen común. No la veo como merma,sino como riqueza.
Lo trágico es cuando queremos imponer nuestro criterio.
Silvio, acabo de leer el obituario de la Dra. María del Carmen Barroso.
Habrá sucumbido ante un infarto, pero el CORAZON nunca le falló.
Otro abrazo
https://www.youtube.com/results?search_query=sony+ostrich+ad
Proximamente viene por ahí el acta de mi rendicion..
https://www.cubanet.org/facebook/musica-para-camaleones/
Volviendo a la bodega y no precisamente a la guita del medio, considero un poco exagerado lo de cultura de la miseria, pero coincido en que existe gran deterioro y falta de sentido de pertenencia de los directivos y dependientes de estos establecimientos. Lo mas difícil para el estado es asumir todos los meses la enorme factura que representa subsidiar los alimentos básicos que se entregan en la famosa cuota, y que aunque no garantizan toda la necesidad del mes, si dan un buen empujón. Entonces por qué no destinar un dinerito para que en verdad estos importantes lugares luzcan mejor. Pero además existen otros problemillas en nuestras bodegas que van desde el salario que se les paga a los bodegueros, o el que ellos se pagan, o la calidad del servicio que prestan y… en fin creo que ha sido un buen artículo, lástima que lo lean pocos bodegueros.
Querido Silvio y visitants del blog, les pido disculpa si tengo algunos errors. Ante todo empezare por decir que soy un ex medicoEstomatologo)cubano que vive en USA y ayer estaba leyendo el blog y encuentro este articulo que habla de miseria. Tengo que confesarles que casi no pude dormir tratando de buscar una solucion viable para este problema y creanme que no la encontre. Pues un pais que tiene una bodega en cada esquina, un consultorio medico en cada esquina ademas de otras cosas que muchos sabemos que hay en cada esquina debia gastar no menos del 10% del PIB a estos menesteres sin contar que el servicio y lo que se vende es gratis o subcidiado, sin anadirle otras cosas mas urgentes que nos apremian en nuestro desarrollo. Esto no quiere decir que no debemos prestart atencion a estos detalles de la vida que hacen nuestro paso por el mundo mas agradable. Aqui en Usa donde vivo tambien hay mucha miseria, claro que no es como la de cuba ni paises en desarrollo, pero existe tambien muchoas problemas de esta indole y es la potencia q todos conocemos. Eso no sale en las peli del sabado y muchos no te creen cuando lo dices. Para que esas cosas mejoren en Cuba tendria q mejorar mucho la economia y cambiar las mentes de muchos que no ven sentido de pertenencia en nada que les rodea y destruyen sin dares cuenta que ellos mismos se hacen dano. Bueno en realidad esto da para nunca acabar, les deseo lo major existe un solo camino y es luchar.
Estomatólogo, Bienvenido a Segunda cita. Ponte nombre, si te parece
Bueno. Na que ver con la cultura de la miseria, al contrario, pero sè que por aqui viene muy buena gente . Por eso dejo una notcia de trova. Abrazo a todos: https://cubatiene.wordpress.com/2017/05/12/eduardo-sosa-premiado-en-cubadisco-2017/
http://robertoroas.blogspot.cl/2017/05/el-desastre-de-la-izquierda.html?m=1
Silvio espero leas lo que me provocó escribirles a todos los que hablan de la crisis en Venezuela.
Roberts Cedeño: Espero que leas el artículo de Guillermo Rodríguez Rivera que publiqué en este mismo blog: ¡Qué fallo!
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