Conozco un
vagabundo del espacio.
Recorre el
universo en su asteroide,
sin órbita
ni puerto ni partida.
Tapa la
soledad con todo el frío
de su vida.
Un día
llegó un pájaro a su isla,
dentro de
un pomo que cabía en su mano.
Daba
tristeza verlo allí encogido,
cantándole
al silencio sin respuesta,
sin
sentido.
El
vagabundo nunca oyó a su pájaro
y lo veía
cantar tras los cristales.
Hasta que
un día pudo más su sueño
y lo libró
de la escafandra blanca
de
animales.
El pájaro
flotó hasta congelarse,
como las
lágrimas del vagabundo.
Entonces
metió al pájaro en la jaula
y lo soltó
a la suerte con que vino,
sin comprender jamás lo sucedido.
sin comprender jamás lo sucedido.
1970
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«El más antiguo ‹Más antiguo 201 – 201 de 201Silvio:
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Sdos,
Orestes H
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