miércoles, 12 de noviembre de 2025

Enfrentar esta epidemia como mismo se hizo con la Covid-19

 Por Alina Perera Robbio

«Vamos a trabajar esta epidemia como mismo se trabajó la COVID-19», dijo en la tarde de este martes el Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en la Reunión de Expertos y Científicos para temas de Salud. 

Desde el Palacio de la Revolución, donde confluyeron especialistas en diversas aristas que tienen que ver con defender la salud, y entre los cuales había rostros conocidos de quienes aportaron mucho con sus saberes cuando Cuba enfrentó el coronavirus, el Jefe de Estado convocó a encuentros semanales para, desde la ciencia, aportar análisis y propuestas de soluciones a la epidemia de casos con Síndrome Febril Inespecífico, provocada, sobre todo, por arbovirosis.

El primer punto de la jornada –que también contó desde la presidencia con el vice primer ministro de la República, Eduardo Martínez Díaz– versó sobre la actualización de la situación epidemiológica de las arbovirosis en la Isla. Al respecto, el doctor José Raúl de Armas Fernández enunció que la que ha concluido es la segunda semana consecutiva con disminución de los Síndromes Febriles.

Tal realidad, dijo, atiende a que en ocho provincias se ha producido ese cambio –ellas son La Habana, Matanzas, Villa Clara, Cienfuegos, Ciego de Ávila, Granma, Santiago de Cuba y Guantánamo–.

El experto afirmó que este ha sido un año epidémico, y que en 68 municipios se dio el aumento de los casos febriles. Al entrar en el tema de las arbovirosis, el Doctor detalló que 38 municipios han sido escenarios de la transmisión del Dengue; y que, en el caso de La Habana, en todos los municipios fueron reportados casos de esa dolencia.

Sobre el Chikungunya, José Raúl de Armas Fernández detalló que la cifra de casos acumulados asciende a 21 681, de ellos más de 20 000 con sospecha clínica de la enfermedad, en 14 provincias, 93 municipios, y 151 áreas de Salud. Según enunció, las provincias con mayor número de casos son Matanzas, La Habana, Camagüey, Cienfuegos, Artemisa, y Villa Clara. Es en esos territorios donde se ha concentrado el 98,5 % de los casos.

En lo que respecta al Oropouche, desde el pasado 26 de septiembre hasta hoy no se reportaron casos confirmados ni sospechosos, según comentó el experto.

Entre otros datos de interés, la doctora en Ciencias María Guadalupe Guzmán Tirado comentó que 119 países han reportado transmisión del Chikungunya; que, por tal movimiento del virus, «se mantiene la vigilancia» en la Mayor de las Antillas; y que, una vez identificado el inicio de la transmisión en la provincia de Matanzas, ahora los expertos profundizan en los estudios.

IDENTIFICAR EL PROBLEMA A TIEMPO  

Una vez concluida la reunión, la doctora en Ciencias Yagen Pomares Pérez –directora general de Atención Primaria de Salud del Ministerio de Salud Pública– compartió con los periodistas ideas de valor sobre una epidemia que preocupa a muchos. Ella comenzó hablando sobre la importancia que tiene identificar el problema desde que el paciente presenta fiebre.

«El objetivo fundamental de nuestro sistema –enunció– es lograr el ingreso de todos los pacientes que tienen síndrome febril. Este ingreso puede ser en la vivienda –a través de un ingreso domiciliario–, o puede ser por los criterios que ya están aprobados».

Sobre esta última idea, hizo referencia a un protocolo que ya «está aprobado en su segunda versión». Y en la misma línea de razonamiento expresó que esa es de las experiencias obtenidas de los días de la covid-19, «cuando rápidamente fuimos poniendo la ciencia, la investigación en función de la problemática». Ella recalcó la necesidad de «lograr el ingreso de los pacientes».

Igualmente, hizo referencia a un reto en la Atención Primaria de Salud: «Lograr la disciplina de nuestros pacientes con Síndrome Febril en el aislamiento desde la vivienda es complicado, pero creo que este es el primer aspecto» que se debe  tener en cuenta.

Lo segundo –argumentó– tiene que ver con «un seguimiento desde los equipos básicos de Salud». Y en tal sentido habló sobre cómo se ha organizado, «desde nuestro propio sistema», ese seguimiento que cuenta con el refuerzo de los estudiantes de Medicina, «de quinto año, que ya tienen todas sus competencias para poder hacerlo».

Según detalló la Doctora en Ciencias, esa fue «una experiencia que la trabajamos de manera muy intensa en Matanzas», y que ya se extiende a todo el país.

En lo concerniente a los pacientes hospitalizados, la experta dijo que «todos los niños menores de dos años con Síndrome Febril deben ser hospitalizados». Lo mismo, dijo, sucede con las gestantes, quienes llevan una «vigilancia más exhaustiva». Y en el caso de los adultos, comentó que deben ser hospitalizados quienes presenten signos de alarma como fiebre prolongada, pérdida de la conciencia, dolores abdominales permanentes, u otras manifestaciones preocupantes.

Los pacientes adultos mayores –como explicó a la prensa Yagen Pomares Pérez– también deben ser hospitalizados, porque son más vulnerables, porque suelen tener comorbilidades como la hipertensión arterial, la diabetes, u otras que pongan en peligro la vida.

ACCIONES EN EL TERRENO             

«Todos sabemos que la principal preocupación que tiene hoy nuestra población es el tratamiento adulticida, la fumigación», comentó a los reporteros la doctora Madelaine Rivera Sánchez, directora nacional de Vigilancia y Lucha Antivectorial del Ministerio de Salud Pública. Ella explicó que «no se ha podido llegar a todos los lugares, como hemos estado acostumbrados durante todos los años en que hemos tenido brotes epidémicos».

La especialista dijo que se ha estado trabajando, «concentrando los equipos a nivel de municipio, para poder llegar a las zonas más complejas, en las que tenemos la evidencia de la transmisión de las arbovirosis».

Y afirmó: «A partir de análisis que hemos hecho en el país, y de cuestiones técnicas que hemos podido revisar, ya vamos a contar con equipamiento que nos va a permitir reforzar acciones sobre todo en los municipios que hoy tienen las complejidades mayores con respecto a la transmisión, sobre todo del Chikungunya».

La Doctora enunció que «estamos tratando de abarcar todas las zonas urbanas a donde podamos llegar; no solo a donde tenemos evidencias, sino también a donde las personas nos dicen que hay presencia de casos, y así poder hacer los tratamientos adulticidas».

En otra valoración necesaria, la experta afirmó: «Un problema que hemos tenido en esta etapa es que, precisamente en estas dos semanas de tratamiento que hemos venido trabajando en el mes de noviembre, hay algunas provincias en que no ha salido bien porque se han quedado equipos en el piso; y estas son de las cuestiones que vamos a reforzar».

Ella habló de dar seguimiento a cuanto se hace, porque lo inadmisible, dijo, es contar hoy con el equipo, con el insecticida, incluso con el combustible, y que no se obtengan los resultados esperados por déficit de fuerzas. De lo que se trata, recalcó, es de prepararlos en aras de la calidad, que es lo vital.

La Doctora también hizo énfasis en la participación de la comunidad: «Es muy importante la intersectorialidad, la percepción de riesgo de todos nosotros, y el apoyo siempre, para que las acciones de control de vectores se puedan realizar».

Estamos hablando de una dolencia, dijo, «que ha tenido una velocidad de transmisión muy rápida por la presencia del mosquito; y contra el vector es que tenemos que seguir realizando las principales acciones para poder, en el menor tiempo posible, solucionar esta problemática que está afectando a toda la población».

https://www.granma.cu/cuba/2025-11-11/enfrentar-esta-epidemia-como-mismo-se-hizo-con-la-covid-19-11-11-2025-22-11-01

3 comentarios:

silvio dijo...

Increíble que en esa reunión no se haya mencionado los basureros en las calles, por falta de recogida.

silvio dijo...

Esa misma rabia que nos ahoga en el mundo de hoy
Por Guille Vilar

Al evaluar la trascendencia de este disco, 50 años después de su edición, resulta inevitable recordar con nostalgia el impacto de su aparición en el mercado cubano de entonces; y, a la vez, nos ampara la certeza de estar ante un testimonio imperecedero del arte en nuestro país.

Referirnos a Días y flores, de Silvio Rodríguez, editado en 1975 por la Egrem, constituye una singular oportunidad para sumergirse en una valiosa pieza de la cultura cubana, cuya profundidad conceptual adquiere una mayor vitalidad con el decurso del tiempo.

Si en los primeros momentos de la salida del disco, este representó un acierto, al satisfacer la creciente demanda por la música del trovador, quien era seguido, sobre todo, a través de sus conciertos; Días y flores, como registro oficial que inicia lo que sería una extensa discografía, funcionó también cual presagio del rango creativo de relevantes proyectos que estarían por llegar, como Rabo de nube (1980) y Unicornio (1982), entre tantos otros.

Los factores humanos que intervinieron en su realización adquieren ribetes de leyenda: el tresero Pancho Amat, el guitarrista Pablo Menéndez, el bajista Eduardo Ramos, los pianistas Emiliano Salvador y Frank Fernández, los bateristas Ignacio Berroa y Leoginaldo Pimentel, los percusionistas Norberto Carrillo, y Daniel Aldama con Luis Ballard en la flauta.

Por otra parte, el maestro Frank Fernández estuvo al frente de la producción, además de asumir en buena medida la ejecución de los teclados, en su doble función de arreglista e intérprete. La grabación fue responsabilidad de todo un mito de la profesión, Jerzy Belc, y el diseño de la original portada es de Pablo Labañino.

En cuanto al aporte del propio Silvio al disco en cuestión, la crítica coincide en señalar que llama poderosamente la atención la madurez poco habitual en músicos jóvenes, por esa capacidad para asumir una amplia paleta de esencias genéricas de nuestra música, pero ajustada a sonoridades contemporáneas; al mismo tiempo que presenta una cabal declaración de los principios que, todavía hoy día, sostiene como hace cinco décadas.

Conformado por 11 canciones escritas entre 1967 y 1974, el connotado guitarrista y compositor nos muestra su intención de alcanzar un dramático equilibrio en el mensaje de la obra en su conjunto. Si bien el disco abre con una refrescante alegoría a la felicidad en Como esperando abril; nos confiesa la candente intimidad de Esta canción o alude a la intensidad de una belleza patente: En el claro de la luna y Pequeña serenata diurna, en otras como Playa Girón nos revela al Silvio inquisitivo, al trovador que, en su permanente voluntad de cuestionar, percibe nuestra capacidad espiritual para compartir las verdades que él defiende.

Como humanista, como promotor de una canción que no esté preconcebida para enajenarse, sino como un personal llamado para reflexionar en torno a las realidades que vivimos, ha conseguido que, en apenas tres minutos, permanezca intacta la lozanía del clásico que reverencia la epopeya del Mayor Ignacio Agramonte; o evocar la resistencia moral frente a la ignominia del fascismo, como lo reclama la canción Santiago de Chile.

Finalmente, cuando en este disco de 1975, Silvio acude al conocido exergo de Bertolt Brecht para interpretar la emblemática pieza Sueño con serpientes, coincidimos –ahora en 2025– en que hace rato él se ha convertido en uno de los imprescindibles; porque, desde su guitarra y el canto, nunca ha cesado de luchar por un futuro mejor; porque estamos convencidos de que la canción Días y flores fue escrita ayer, porque es esa misma rabia la que nos ahoga en el mundo nuestro de hoy.

https://www.granma.cu/cultura/2025-11-11/esa-misma-rabia-que-nos-ahoga-en-el-mundo-de-hoy-11-11-2025-19-11-34

silvio dijo...

Me ha sorprendido ver este artículo del Guille Vilar, porque yo mismo me di cuenta hace solo unos días de la fecha cerrada. Fue hablando con Niurka, a los pocos días de llegar de la gira por Latinoamérica, que de pronto comprendí que Días y Flores estaba cumpliendo medio siglo (aunque, para ser más exactos, fue grabado en 1974 y publicado en 1975).

Gracias, Guille.