viernes, 5 de julio de 2024

¿Quién es Pedro Urra González? *

Por la Dra.C. Maria del Carmen González Rivero


1. ¿Quién es Pedro Urra González? 

El abuelo de Pablito Urra Íñigo 

2. ¿Qué lo llevó a interesarse por la computación y la información durante sus estudios en el Instituto Superior de Relaciones Internacionales (ISRI)? 

Siempre me gustaron las matemáticas y cuando aprendí los fundamentos de la computación, que formaban parte del plan de estudios, quedé atrapado. A eso se sumó, de manera muy importante, que la novia con la que me casé era ingeniera en computación. 

3. ¿Qué lo motivó a unirse al Centro Nacional de Información de Ciencias Médicas (CNICM) en 1992 y a crear el proyecto Infomed, una red telemática que conecta a los profesionales de la salud de Cuba y ofrece servicios de información, educación y comunicación en ciencias de la salud? 

Una querida amiga, Mireya Vilaseca, que era la hija del Rector del ISRI, Salvador Vilaseca y que trabajaba en el MINSAP, me habló muy bien de los profesionales de la salud. Me dijo que siempre era muy estimulante trabajar con ellos y que si eras serio y dedicado respetaban mucho tu trabajo. Además, me contó del Centro y de un par de personas especiales que entonces dirigían el CNICM. Los Doctores Jeremías Hernández Ojito y Jehová Oramas. Además de tener nombres bíblicos me mostraron que eran personas excepcionales que me permitieron unirme al equipo y me ofrecieron guía y un respaldo inmenso.

Fue muy grato incorporarme a un colectivo de trabajo con una tremenda tradición en el campo de la información, con quienes a las semanas de incorporarme a trabajar al centro ya estábamos buscando soluciones a problemas e inventando sueños digitales y no digitales. 

4. ¿Qué características debe tener un líder para impulsar el trabajo en equipo y motivar a los integrantes de un proyecto? 

Estar convencido profundamente de que todos importan y que todos pueden aportar. Todos pueden liderar, cuando así lo exija el proyecto, a partir de las competencias de cada uno y del compromiso de todos, con valores compartidos. Perseguir en uno mismo cualquier vestigio de vanidad y reconocerse como un ser humano imperfecto pero que quiere luchar por hacer el bien. Y, muy importante, buscar constantemente la justicia, aunque sea difícil. 

6. ¿Cómo ha logrado conciliar su vida familiar y su trabajo cuando estuvo al frente del proyecto Infomed y como profesor e investigador en ciencias de la información?

Es que no hay otra opción que valga la pena vivir. Somos una totalidad y la vida es una sola. Creo que las personas que nos rodean, a las que amamos y nos aman, son quienes nos ayudan a lograrlo. Mi familia, mis amigos, mis compañeros fueron decisivos para lograr esa conciliación. Siempre tuve mucha consideración y colaboración de quienes compartieron el proyecto. 

7. ¿Cómo logró superar los obstáculos técnicos y financieros que se presentaron en el contexto que se desarrolló el proyecto Infomed? 

No sé si logramos superar todos los obstáculos, pero unos cuantos creo que sí. Tal vez los más importantes. Un compromiso profundo con los objetivos que teníamos y una muy hermosa camaradería nos permitió atrevernos a muchas cosas y salir adelante. Un respeto profundo al conocimiento acumulado y en desarrollo, y una disposición a aprender todo el tiempo. Cierta osadía, a la cubana, que aportaron miembros fundamentales del equipo y mucha cohesión. Mucha solidaridad de amigos en Cuba y el mundo. Todos me perdonarán si menciono solo a un cubano y un extranjero aunque fueron muchos los fundamentales: David Wald, creador del grupo solidario Infomed USA y Jeremías Hernández Ojito, cubano, director del CNICM, cuando iniciamos Infomed. En ambos podemos vernos reflejados, y al homenajearlos, todos los que se sienten dueños de Infomed, pueden sentirse mencionados. 

8¿Qué retos y oportunidades se presentan para Infomed en el escenario de la transformación digital y la inteligencia artificial aplicadas al campo de la salud? 

Creo que es un momento de desafíos y oportunidades tremendas. Hoy más que nunca se necesita de una institución que lidere el esfuerzo para poner esos procesos al servicio de la salud de Cuba y del mundo. Hacen falta liderazgos en un mundo como el que estamos viviendo. Profundizar en la conexión entre las reales prioridades de la salud y las oportunidades de la transformación digital y la inteligencia artificial exige rigor, conocimiento profundo, dedicación y valorización del papel de los recursos humanos para apropiarse de los conocimientos y las herramientas necesarias y ponerlas a trabajar en función del bien común. Retomar la visión de la red de personas e instituciones que comparten el propósito de mejorar la salud poniendo esas herramientas a su servicio y haciéndolo con profesionalidad y excelencia. 

9. ¿Qué opinión tiene sobre el uso de la inteligencia artificial en ciencias de la información y qué aplicaciones prácticas ha encontrado o espera encontrar para mejorar los servicios instituciones de información? 

La inteligencia artificial ya dio el salto que, aunque anunciado, no acababa de suceder. Es una especie de salto cuántico. Es decir, de una dimensión que no podemos manejar con los métodos tradicionales pues no somos capaces de trabajar con determinaciones claras. Eso exige entonces unos compromisos éticos, de valores y de humildad científica tremendos.

El potencial en el campo de las ciencias de la información y las ciencias de la salud es enorme. De hecho, ya los sistemas que se han generalizado de manera tan rápida están avanzando por días, digamos que hasta por horas. La búsqueda del bien común es la guía y la lucha por la equidad, el norte que ayude a parar el desenfreno que puede provocar si lo que prevalece es la búsqueda del beneficio sin compromiso social y sin responsabilidad. Confieso que ya no concibo un día de trabajo sin mis compañeras inteligentes artificiales, y muchos de los desafíos que teníamos en la gestión de la información hoy se hacen más viables con su apoyo. 

Hace años, en una entrada en un blog que publiqué sobre un estudio que se había hecho sobre la información que consolidaba MEDLINE, llamó mi atención el hecho de que, de los millones de referencias bibliográficas acumuladas, solo una pequeña parte contenía nuevos aportes conceptuales al conocimiento médico y de salud. La iniciativa en aquel entonces se denominó Wikiprofesional y era un intento de desarrollar una red de científicos para anotar el corpus del conocimiento médico y de salud acumulado en esa base de datos. Aquel proyecto no avanzó, pero hoy la inteligencia artificial y particularmente las herramientas disponibles pudieran retomar con éxito una iniciativa como esa . 

Eso, por una parte, nos dice que la creación e inteligencia humanas tienen mucho por hacer, además de seguir desarrollando la inteligencia artificial; pero, por otra parte, nos dice que la capacidad de la inteligencia artificial de complementar esas capacidades de forma extraordinariamente más eficiente puede servir de base a una verdadera revolución en los campos mencionados. 

10.¿Qué actividades realiza actualmente como profesor e investigador en la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana? 

Me mantengo vinculado a varios proyectos en el campo de las ciencias de la información, en varias instituciones, incluida el propio Infomed. He trabajado de forma más particular en temas de interoperabilidad y, en específico, en fomentar su aplicación en proyectos de colecciones documentales cubanas. Una iniciativa que me ha motivado mucho es el uso del marco internacional de interoperabilidad de imágenes, entre un grupo de instituciones relacionadas con la custodia del patrimonio documental digitalizado. La iniciativa tiene un portal, desarrollado precisamente con el apoyo de Infomed y la Universidad de la Habana, y está accesible en http://iiif.sld.cu/. Agrupa colecciones de la Biblioteca Nacional José Martí, la Biblioteca Central de la Universidad de la Habana, el Instituto de Historia de Cuba, la Oficina del Historiador de la Ciudad, la Facultad de Comunicación de la Universidad de la Habana y la Biblioteca Médica Nacional, entre otros. 

12. Para finalizar por favor, nos puede responder: 

Su canción favorita: "Oda a la alegría", de Beethoven. 

Su libro: "El siglo de las luces", de Alejo Carpentier. 

Una ciudad: La Habana. 

Su color: El Azul

Una manía: Torcerme el pelo cuando me crece de más. 

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* Entrevista aparecida en el Nº 6 del periódico digital "Horizontes", de la Escuela Nacional de Medicina.

1 comentario:

silvio dijo...

REINO UNIDO: FIN DE CICLO

Las encuestas a pie de urna y los primeros resultados anunciados hasta el cierre de esta edición indican que el Partido Laborista obtendrá una victoria aplastante en las elecciones parlamentarias del Reino Unido, lo que permitirá a su dirigente, Keir Starmer, formar gobierno en solitario y desplazar al Partido Conservador por primera vez en 14 años. Para el laborismo se trata de un triunfo incontestable que le dará, según las predicciones, 410 de los 650 escaños en juego, mientras para el conservadurismo supondrá el mayor descalabro en su historia, una caída incluso más significativa si se considera que apenas en 2019 obtuvo sus mejores resultados desde 1987.
Este drástico viraje en las preferencias se explica por las dificultades económicas causadas por factores externos como la pandemia o la guerra en Europa del Este, pero, sobre todo, por la manera en que han sido gestionados por las administraciones derechistas. En el momento más álgido de las restricciones dispuestas para frenar el contagio de covid-19, el entonces primer ministro, Boris Johnson (2019-2022), celebró una fiesta con sus colaboradores en el mismo momento en que la fallecida reina Isabel II velaba completamente sola a su esposo. Ese acto de insensibilidad, que fue también una insólita falta de respeto a la institución de la corona, caló más en el ánimo del electorado que las mentiras, la corrupción, el deterioro económico, la xenofobia, el belicismo y la insondable frivolidad de Johnson. Su efímera sucesora Liz Truss (6 de septiembre al 25 de octubre de 2022) propuso un recorte de impuestos a los más ricos en un momento en que gran parte de la población sufría para llegar a fin de mes debido a la inflación y a las consecuencias de abandonar la Unión Europea sin un verdadero plan de transición.

El mandatario saliente, Rishi Sunak (2022-2024), mostró un talante institucional y una prudencia de la que carecieron sus dos antecesores inmediatos, pero mantuvo intocado el modelo neoliberal que tiene en crisis el acceso a la vivienda, la educación, la salud (otrora orgullo británico) y el conjunto de los servicios públicos. Tecnócrata ortodoxo, Sunak no atendió el clamor social de refrenar la desigualdad y rearticular el Estado de bienestar. Por el contrario, se embarcó en el delirio imperial de sostener una guerra con Rusia peleada por soldados ucranios: hizo del Reino Unido el tercer país que más recursos aporta para sostener al régimen de Kiev, hasta destinar medio punto del producto interno bruto (PIB) a ese fin. En abril, ya embarcado en la campaña electoral, prometió aumentar el presupuesto militar hasta 2.5 por ciento del PIB y dilapidar casi 100 mil millones de dólares en un relanzamiento belicista que no puede devolverle al país un papel relevante en la geopolítica, pero sí implica perpetuar la ruina de la seguridad social y de todas las instancias que mejoran la calidad de vida de las mayorías.

Ante ese desastre multidimensional, no es casualidad que el lema central de Starmer y los suyos haya sido el cambio. El electorado votó con claridad por el cierre del ciclo conservador y la renovación de la vida pública, tomando una alternativa que resulta saludable en un contexto de ascenso generalizado de la ultraderecha en Europa. Cabe a los ciudadanos británicos exigir a sus nuevos gobernantes que cumplan con el mandato de tomar decisiones en función del bien común y no de los intereses de corporaciones y capitales financieros, de impulsar la recuperación del salario, rescatar la seguridad social y no azuzar la guerra. En suma, de responder a los ideales laboristas y no ser un gobierno de la traición como el que encabezó el infame Tony Blair entre 1997 y 2007.

https://www.jornada.com.mx/noticia/2024/07/05/editorial/reino-unido-fin-de-ciclo-7245