jueves, 19 de octubre de 2017

Los bombardeos ciclónicos y las 70 cooperativas de la construcción

Por Ricardo J. Machado.

“La casa es el 40 % de la felicidad de la familia.”
Del refranero eslavo.

CICLONES Y DESAMPARO SICOLÓGICO

Probablemente muchos cubanos consideren que la  proporción entre casa y  la felicidad humana es superior a la sugerida por el mencionado refrán. La cifras sobre el efecto de los ciclones  sobre las viviendas de los ciudadanos cubanos son impresionantes cuando se ven juntas, de un vistazo. Por solo mencionar las de los 200 meses transcurridos en el siglo XXI; nos han golpeado 13  ciclones –incluido Irma– de diferente intensidad, de los cuales  8 han sido de las categorías superiores de  4 y 5 según la conocida clasificación . (Granma , 9 de septiembre, 2017).

En su edición de 29 de septiembre de este año Granma publicó los datos relativos a este último huracán; se reportaron 158,554 viviendas afectadas, de ellas 14,657 con derrumbes totales. Si hacemos un cálculo conservador –seguramente existe una investigación con los datos reales– y suponemos de que cada uno de los 13 ciclones haya destruido 4,000 viviendas como promedio, la suma de lo que va de siglo alcanzaría la cifra de 52,000 casas  destruidas y un número equivalente de familias viviendo en albergues temporales.

Hay que mencionar aquí que existe un acumulado histórico del  fondo habitacional del país integrado por viviendas que tienen alto grado de vulnerabilidad –cerca del 40 % muestran condiciones de regulares a malas– , lo que debe incluirse en el cálculo de la demanda total, cuya cifra es altísima.

En lo que va de  siglo, como promedio, cada 11 meses y medio la geografía del país recibe latigazos de vientos que afectan entre una y cuatro provincias. El efecto más sensible –fallecidos aparte– es la perdida de la condición de habitabilidad –temporal o definitiva– de las viviendas de miles de cubanos. Una y otra vez la TV muestra escenas desgarradoras. Los efectos sicológicos de la perdida de la vivienda en los seres humanos han sido estudiados principalmente por los estrategas militares, fundamentalmente los de los países del norte, muchos de los cuales sostienen economías que no pueden vivir sin las guerras. Como dijo el papa Francisco “es una economía que mata“.

Una referencia histórica contemporánea muy conocida fue el bombardeo de los aliados durante la II Guerra Mundial, sobre la ciudad de Dresde, paradigma de la cultura alemana (por eso lo hicieron).

Después le tocó  el turno a Hiroshima y Nagasaki. A partir de la década de los 60  el gobierno de USA  se ensañó con bombardeos de saturación sobre las aldeas vietnamitas. Ahora junto con sus amigos israelitas disfrutan bombardeos sistemáticos sobre pueblos árabes, matando en solo minutos decenas de mujeres y niños, de un solo zarpazo. Después, con una descarada frialdad, dicen que fueron daños colaterales y hasta piden disculpas. El cinismo se ha instalado como parte del ADN de la cultura de la elite que pretende gobernar el mundo.

Según los sicólogos de la guerra, no hay nada que desmoralice y deprima más a un ser humano que contemplar su vivienda destruida. Lo que se busca con ello es debilitar los cimientos morales y quebrantar la resistencia de la población. El dolor la mata por dentro. Es como destruir la memoria de la familia y romper de un golpe parte de las relaciones con los seres queridos. Eso es lo mismo que hacen los ciclones; desde el punto de vista sicológico, no hay muchas diferencias con los bombardeos. Por eso este asunto ya merece una atención especial. Fidel  hizo esta comparación en cierta ocasión.

Es esencial identificar el punto crucial a partir del cual la nación disponga de una capacidad de construcción de viviendas superior  a la que tienen los ciclones para destruirlas. El problema tiene aristas éticas e ideológicas que no pueden ser soslayadas. No es conveniente para la sostenibilidad y equilibrio de nuestro sistema mantener un volumen tan grande de ciudadanos  en un estado de relativa indefensión desde el punto de vista moral.

El nivel de la respuesta cubana ante desastres naturales ha estado por encima de la totalidad de los países  del continente, incluyendo EU. Hemos creado en casi todo el país una cultura codificada sobre el tema. Los más rezagados eran los santiagueros, pero aprendieron la lección con el Sandy (25 de octubre de 2012), y ayudados  posteriormente por la presencia  física del presidente y varios ministros, que esperaron el Matthew junto con ellos –algunos   durmiendo en el suelo– ( 4 de octubre de 2016) .

Pero creo que en este asunto está lloviendo sobre mojado  y sobre ello el país debe construir una respuesta de mayor calibre. En la reconstrucción actual de viviendas se continúa con las tejas de zinc y fibrocemento. Los expertos aseguran que estas solo resisten hasta vientos de 100 kilómetros. Una  humilde depresión tropical. Hasta que vuelva el próximo ciclón que las hará volar  nuevamente. Esto debe ser considerado como una facilidad temporal, a la espera de una solución definitiva.

Hay que superar esta suerte de suplicio de Tántalo, según el cual la sociedad cubana construye viviendas por un lado y los ciclones se dedican a destruirlas por otro, como si ambos estuvieran emulando sobre la base de un plan anual, pero con diferente signo. No basta ya con una buena guía familiar para protección contra ciclones y el conjunto de medidas del gobierno para salvar vidas. Hay que aceptar el reto de la naturaleza a otro nivel. Los ciclones consideran  esta zona del Caribe  como su espacio natural de tránsito, y no  es posible quitarnos de su camino . Ellos llegaron primero.

A partir de los datos del último año –informe del ministro Cabrisas en la última Asamblea Nacional– el país tiene hoy una capacidad de construcción  de unas 24,000 viviendas anuales (de ellas 13,000 por esfuerzo propio y 9,700 por el Estado) Esta respuesta de mayor  envergadura que la nación tiene como expectativa, pasa primero por una ampliación significativa del potencial  constructivo del país  y en segundo lugar por la activación del comportamiento de las 70 cooperativas del sector de la construcción. El punto crucial mencionado arriba pudiera estar, por ejemplo, entre 40 y 50,000 viviendas. Habría que distribuirlas entre diferentes actores, entre ellos principalmente las cooperativas de la construcción.

¿QUE ESTÁ PASANDO CON LAS COOPERATIVAS Y COMO SE LLEVAN CON EL SOCIALISMO CUBANO?

Las relaciones entre  socialismo y cooperativas han sido difíciles y contradictorias, según muestra la historia en esta esfera. El Che alertó muy temprano sobre los peligros de las cooperativas en el  caso de la URRS. En su texto –redactado en los años 60– “Apuntes críticos a la Economía Política” (Editorial Ciencias Sociales 2012) señaló: “No hay una negación convincente de que las cooperativas no engendren capitalismo. Aunque tiene tendencias colectivas, es un colectivismo en contradicción frente al gran colectivismo“. El Che no disponía entonces de INTERNET, lo que le habría permitido comprobar los resultados positivos de las cooperativas en muchos países.

Recientemente se publicó en Cuba un  texto de los expertos estadounidenses R. Keeran y T. Kenny (Socialismo traicionado, tras el colapso de la Unión Soviética, Ed. Ciencias Sociales, La Habana 2012 ) En su investigación dedican bastante espacio a los problemas del cooperativismo en la URRS, en una parte del mismo señalan: “las cooperativas en la URRS fueron un disfraz para empresas privadas en manos de delincuentes.  Estas falsas cooperativas estaban infestadas por el mundo del hampa”.

Pero aquí  las cosas tampoco  andan muy bien, si juzgamos a partir de los criterios  expresados por el presidente en su discurso de clausura en la última sesión de la Asamblea Nacional: “Decidimos hacer las cooperativas, probamos con algunas e inmediatamente nos lanzamos a hacer decenas de cooperativas de la construcción. ¿Nadie ha analizado las consecuencias que esto trajo y los problemas que esto ha creado?“.

En marzo de 2017 la Contraloria General de la República  de ciudad de La Habana realizó una inspección de 24 Cooperativas no agropecuarias, algunas de la construcción. Los datos son preocupantes.  Menciono algunas de las tendencias que encontraron los auditores: falta de  precisión y vigilancia de las entidades estatales, que en muchos casos actúan como su cliente. A principios de este año una cooperativa presentó una factura a un grupo hotelero por 300,000 CUC. Cuando el presidente de la entidad los llamó para discutir el asunto, en pocos minutos ¡¡la redujeron a la tercera parte!!

 Los auditores fueron severos con los órganos estatales, según ellos; los ministerios  les aceptan presupuestos que no detallan transparentemente los conceptos que forman los precios. No existe una cultura cooperativista de socios y no se sienten dueños del patrimonio.  (¿Como va a existir esta cultura, si no recibieron ninguna preparación ni entrenamiento previo?. En República Dominicana –no Alemania– nadie puede crear una cooperativa si no recibe un certificado después de tres meses de capacitación. Estamos haciendo cooperativas sin formar cooperativistas).

Los auditores también detectaron deterioro de valores éticos y conductas individualistas que se oponen a los principios de responsabilidad, altruismo e interés que sustenta nuestro modelo. También encontraron violaciones de normas contables y de control interno.

Pero lo más grave, en nuestra opinión, es que comprobaron que existían “cooperativas” en las que el presidente actuaba como dueño y se repartían las utilidades entre un pequeño número de socios. Esto puede ser considerado ya como una lesión tumoral de alto riesgo. Desde el punto de vista general, el Presidente adelantó una explicación en  el citado discurso, definiendo como  causa ”el deseo de hacer cosas rápidas, sin una preparación correcta, en primer lugar de los que tienen  que aplicar medidas, y después criticamos a los que no debemos.”

Pero esto tiene además otras explicaciones. La editorial Caminos realizó, desde 2012, dos ediciones del excelente texto Cooperativas y socialismo. Una mirada desde Cuba, compilado por la economista Camila Piñeiro Harnecker, y que tiene con amplitud todo lo necesario para comprender la complejidad de esta forma de organización. Desde mediados de los 90 existe  una maestría en gestión cooperativa en la universidad de La Habana (patrocinada por FLACSO). Se han redactado decenas de tesis de maestría y doctorados sobre la temática. Los ejecutores de estos desajustes no consultaron ni estudiaron lo suficiente. Aquí la causa  principal está en el comportamiento apresurado de los funcionarios que han realizado estas incongruencias que han indignado al Presidente. En su falta de humildad y de conciencia acerca de la naturaleza del problema.

Esas decisiones competen  a la burocracia de alto nivel. No uso aquí el término con tono despectivo. Es un fenómeno necesario e inevitable en la sociedad moderna. Solo resta esperar que aprendan de esta experiencia, que controlen su ego, que pregunten a los que saben y que aspiren a adquirir la sabiduría que proviene de la percepción que tengan acerca de su papel  determinante en el futuro de la nación.

Ahora vamos a ver como se arregla este desaguisado. Muchos de estos “cooperativistas” están recibiendo ingresos entre 10 y 15 veces por encima del salario promedio. Por ejemplo, en el caso de las CNA de gastronomía, algunas de las “malitas“ reciben ingresos por 50 CUC diarios;  las mejorcitas reciben 170. Seguirán el camino que abrieron hace algún tiempo los sembradores de ajos y cebollas: primero dos o tres veces al año en Varadero, con familia incluida; después Cancún, hasta llegar –pasando por MIAMI– a Roma y Paris, como hacía la burguesía cubana del siglo XX. Pronto no podrán vivir sin ello, mientras decenas de miles de cubanos no tienen un lugar decente donde consolidar una familia.

 HAY QUE DETENER A ESTE MONSTRUO

Es necesario  crear un centro de desarrollo e investigación cooperativa donde se realicen los estudios necesarios, se imparta la capacitación correspondiente, y hacerla obligatoria por ley. Organizar cooperativas especializadas en construcción de viviendas sólidas, cosa que sabemos hacer, porque aprendimos con el movimiento de microbrigadas, integrando a los mismos damnificados.

 Buscar fórmulas de financiamiento, régimen especial de tributos y mecanismos creativos  para enfrentar este grave problema y ganarle la guerra a los ciclones. Pero ante todo someter a la mayor brevedad este estamento –no es una clase social– que se enriquece de manera desmedida, pensando solo en ellos mismos. No es que defienda el igualitarismo paralizante; que cada cual gane lo que se merezca. Pero en esto se han traspasado los límites.

Por otra parte, no se trata de buscar culpables, sino gente honesta y con valores altruistas que sin duda existen dentro de esa masa de cooperativistas de la construcción. La dirección de ese ministerio tiene conciencia del problema y creo que lo vieron venir, pero da la impresión de que no  están actuando con la celeridad necesaria ni comprenden la importancia decisiva de la capacitación y de la asesoría especializada.

Hemos estado creando un Frankenstein que, más temprano que tarde, terminará agarrándonos por el cuello. Hay que derribarlo lo más pronto posible y enderezar el movimiento cooperativista sobre firmes bases éticas, ideológicas y administrativas. Esto debe comenzar por la implementación de rigurosos programas de  formación, y para ello es necesario  tener el teléfono de los que saben. Hay que meterle cabeza a este asunto y releer de nuevo lo que dijo el Presidente en la reunión ampliada del Consejo de ministros del 28 de septiembre de 2011:

“Las cosas siempre salen bien cuando se piensan antes de hacerlas”.

31 comentarios:

silvio dijo...

No son los primeros ni serán los últimos:
Luis Silva: “Hemos aprendido a respirar bajo el agua”

Orestes H dijo...

"Es necesario crear un centro de desarrollo e investigación cooperativa donde se realicen los estudios necesarios, se imparta la capacitación correspondiente, y hacerla obligatoria por ley. Organizar cooperativas especializadas en construcción de viviendas sólidas, cosa que sabemos hacer, porque aprendimos con el movimiento de microbrigadas, integrando a los mismos damnificados."

Esta es la clave. Lo demás seria como botar el sofá.

Saludos,

Orestes H

Bárbara Vasallo dijo...

Silvio y amig@s querid@s, no tiene esto nada que ver con el tema que trata el post, pero quiero compartirles este material a propósito del aniversario 90 del natalacio de Abel Santamaría
Los quiero siempre

http://giron.cu/es/noticia/historia/abel-santamar%C3%ADa-%C3%A9pica-e-inspiraci%C3%B3n

Valladares dijo...

Saludos, no se les puede tener miedo a los nuevos ricos, aquellos que viajan varias veces al año a Varadero, viajan a Cancún con visa mexicana y a Miami también con visa de 5 años. Eso es lógico están aprovechando mecanismos en los negocios que fueron ineficientes o prohibitivos en el esquema socialista. Hay una realidad la iniciativa privada es superior a la planificación socialista.
Fidel antes de enfermar esbozó el derrollo de un programa de construcción de vivienda o de inmobiliarias, bajo otros conceptos, más cercanos a los utilizados en el capitalismo. Por ese mecanismo el metro cuadrado de superficie será mucho más caro, así la calidad. El evaluó el plan de construcción de casas para los médicos cumpliendo misión, donde el financiamiento no lo generaba ell estado.

Orestes H dijo...

Silvio:

Excelente aparición de Silva.

Digo aparición, porque esta entrevista es el claro ejemplo de que hay periodistas que en cada pregunta presionan y presionan para que por ejemplo Silva diga que "sí, nos censuran, nos quitan los libretos y nos obligan a decir lo que quieren".

Pero Silva, es un muy buen interlocutor y a todas luces una persona honesta y un joven de su tiempo.



Saludos,

Orestes H

Carlos Ernesto dijo...

Muy bueno este artículo que pone las cosas claras. Análisis de esta índole deberían ser publicadas por la prensa escrita y televisiva. Necesitamos que todos y no solo algunos de los que están llamados a actualizar el país razonen conscientemente y dialécticamente, sin prejuicios y sin apuros. La nación lo necesita imperiosamente, y hay que pensar bien las cosas porque no se puede desmoralizar las herramientas que tenemos. Hay gente que en todo ve lo malo y lo señala para hacer daño, no para construir.

Mirta Núñez Gudaz dijo...

Me animo a escribir mis recuerdos sin que realmente pueda definir las fechas exactas.

En octubre de 1962 yo tenía 14 años y estaba estudiando en el Instituto Pre-universitario de Sagua la Grande “Miguel Diosdado Pérez Pimentel” que estaba ubicado en una carretera que iba hacia el Central Santa Teresa, separado algunos kilómetros del centro del pueblo.
Para llegar hasta el Instituto la mayoría de los estudiantes se trasladaban en bicicleta o en una guagua que llevaba a los estudiantes que no vivían en Sagua pues ese era el único Pre de toda la región.
Para entonces yo cursaba el 3ro y 4to año de bachillerato y había comenzado recientemente en este Pre-universitario, luego de la nacionalización de la escuela privada todos los estudiantes de los pequeños poblados tuvimos que dejar de estudiar en las escuelas privadas e incorporarnos al Instituto de Segunda Enseñanza. Al poco tiempo de estar en el instituto mis compañeros me eligieron Presidenta de la Unión de Estudiantes Secundarios, UES, del centro.
En la carretera que unía el pueblo de Sagua con el central habían unas casas “señoriales” que habían sido abandonadas por sus dueños en su huida hacia los Estados Unidos. Fue poco después de empezar el curso escolar que comenzamos a ver que aquellas casas estaban habitadas por jóvenes que en sus patios jugaban voleibol y que usaban para sus prácticas deportivas unos shorts-calzoncillos que eran de tela color verde olivo o azul y que solo tenían elástico a la cintura y llegaban hasta medio muslo, vestimenta que era algo rara para nuestras costumbres.
Eran jóvenes musculosos muy muy blancos y no sabíamos nada más porque nosotros los veíamos a distancia y a nuestro paso hacia la escuela. Los días fueron pasando y empezó a correr el rumor, o mejor la bola como se decía entonces, de que aquellos muchachos eran militares rusos que estaban en un “entrenamiento” o “apoyando” a la Revolución.
Comenzaban los días de octubre y se desencadenaron los acontecimientos conocidos hoy en todo el mundo y que ya han ido relatando los otros participantes de SC, yo solo quiero contar lo que vivimos en esos días en aquel rinconcito de Cuba.
Resultó que aquellos “deportistas” eran los soldados que montaban una de aquellas rampas de misiles que estaban construyendo en la zona y que estaba en un área detrás de nuestro Instituto. Al desencadenarse los acontecimientos relatados nos reunieron a todos los miembros de la Asociación de Jóvenes Rebeldes (AJR) y de la UES y nos informaron que el país se movilizaba y que nosotros cuidaríamos las instalaciones de nuestro centro.
Fidel decreta el estado de alerta y a los estudiantes nos piden que cuidáramos el instituto, nos entregaron unos fusiles que casi eran más grandes que yo (debo decir que yo soy una persona de baja estatura, 1.50 metros y por aquellos años apenas pesaba 120 libras) nos enseñaron a armarlo y desarmarlos y comenzamos a hacer guardias las 24 horas del día, nos “acuartelaron” teniendo en cuenta lo cercano que estábamos a una de aquellas instalaciones.

Mirta Núñez Gudaz dijo...

Allí entre otras cosas se nos orientó que preserváramos la documentación que pudiera tener alguna información de importancia y, en nuestra ingenuidad, tomamos todos los carnets de miembros de la AJR, las actas de las reuniones y algunos manuales y los envolvimos muy bien en unos nylons, para ponerlos a resguardo del enemigo, se nos ocurrió enterrarlos en una zona al lado de la pista de atletismo. Así que cavamos un hoyo y allí pusimos a buen resguardo nuestros “secretos importantes”.
Luego vinieron los tremendos días de la crisis, allí vi los vuelos rasantes de los U-2 y cada vez que pasaban, que era alrededor de las 11 de la mañana, me ponía en guardia con mi pesado fusil, eran tan rasantes y pasaban tan cerca del instituto que podíamos casi ver las caras de los pilotos, nosotros entonces estábamos muy orgullosos del papel que estábamos jugando en la defensa de la patria, al menos yo nunca me di cuenta que estuvimos a un tin de la guerra nuclear.
Oíamos a Fidel, sus intervenciones, los cinco puntos, en fin todo lo que ya es historia y se anunció el retiro de los misiles y en casa (pues por esos días ya vivíamos en Sagua) presenciamos el paso por la calle del frente, que se unía con la carretera que iba desde Sagua la Grande hacia la Isabela de Sagua, de muchas rastras muy largas en las que iban, muy bien cubiertos, los cohetes y el resto de los aditamentos que se estaban retirando por el puerto de la Isabela hacia la Unión Soviética.
Al día siguiente en el pueblo todos se preguntaban ¿y cuándo fue que entraron todas estas armas que nunca nos dimos cuenta? Así fuimos testigos del retiro de parte de las armas estratégicas que los rusos habían instalado en esta zona,
Ah, y algo que no debo dejar de decir, era octubre mes de lluvias, al acabar el incidente de los misiles fuimos a recuperar nuestros documentos secretos y parece que en la premura de la situación el nylon que los cubría no fue bien sellado y todos estaban mojados e inservibles.

silvio dijo...

Siria:
La victoria de la vida contra la muerte

Anónimo dijo...

Perdón por decir un comentario que va por las tres entradas :

En la naturaleza como en los sistemas políticos casi siempre pagamos los platos rotos los humildes .
De acuerdo con el refrán eslavo y la entrada ; pero sí los sistemas políticos no son totalmente capaces de resolver éstas y otras necesidades humanas , tenemos que buscar las soluciones dentro de nosotros mismos .
De ello nace un llamado a la rebelión ( individual o colectivamente ) que también es tan natural porque es una cuestión de supervivencia ( crisis de octubre ).

Considero el ejemplo y el liderazgo también como algo innato en los seres humanos ( que emana de algunos seres únicos e iluminados ).

No tengo otra elección Silvio ...

Saludos desde Quito .

Ojalá dijo...

Viernes 27 de octubre: Concierto en Cojímar

El concierto 86 de la gira por los barrios será el viernes 27 de octubre a las 6:00 pm en Cojímar -municipio Habana del Este-; en la Calle San Marcos, entre A y Malecón (frente al Torreón y la estatua de Hemingway).

En su presentación Silvio estará acompañado por Niurka González (flauta y clarinete), Jorge Aragón (piano), Jorge Reyes (bajo), Emilio Vega (vibráfono y percusión), Oliver Valdés (batería y percusión)

El artista invitado será el cantautor mexicano Alejandro Filio.

René Rodríguez Rivera dijo...

Un articulo muy bueno, con criticas objetivas y constructivas, lo que hace falta es poder llevar todo eso a la practica. Magnifica la entrevista de Silva, el sabe muy bien donde tiene puesto los pies. El concierto de Cojimar me queda ahi mismo, trataremos de ir. Interesante... Mirta estuvo muy proxima a la hecatombe. R3.

Félix Sautié Mederos dijo...

He estado sin electricidad y sin comunicaciones desde por la mañana temprano hasta ahora 7 pm que regresó todo. Parece que hubo una rotura grande en las redes de Centro Habana y de algunas partes de La Habana vieja inclusive. Cuando regreso a Segunda Cita veo este análisis de Ricardo J. Machado profundo y bien informado como siempre. Lo voy a estudiar; pero de inmediato quiero decir que su frase final: "Las cosas siempre salen bien cuando se piensan antes de hacerlas" concuerda plenamente con lo que escribí en mi última crónica que pegué en el anterior debate sobre la crisis de octubre cuyo título es:
"Pensar para actuar, es quizás lo más importante..."; con el exergo "Para enfrentar el ‘ya verán...’ de Mr. Trump."
Claro que en circunstancias y temas distintos pero en el fondo un mismo criterio.
De nuevo en el combate con todos (as) en Segunda Cita y Silvio.

silvio dijo...

La primera vez que estuve en “el zoológico de piedra”, obra del escultor guantanamero Ángel Íñigo, le pregunté cómo había podido realizar aquella maravilla. Recuerdo que me dijo: “Todo lo que está bien pensado sale bien”.

Pía Denis dijo...

Buenas noches Silvio y SC💫
Muy atinado el artículo de la entrada. Acá en Santa Fe, después de las inundaciones se vio claramente lo que expone la frase "no hay nada que desmoralice y deprima más a un ser humano que contemplar su vivienda destruida".
En este momento muchas son las viviendas destruidas entre ciclones y terremotos. Cuánto habrá que hacer para devolverles la moral a esas personas.

Cubano de a pie dijo...

No estoy de acuerdo para nada con la segunda parte del articulo, y menos que menos con la solución de crear un qué?, un qué? ahhh!!!, nada mas y nada menos que otro centro más!!! ahora uno llamado "un centro de desarrollo e investigación cooperativa" Pero POR FAVOOOR!!!
Las cooperativas funcionaron mal o tuvieron problemas por dos causas:
La primera porque son la única forma de hacer negocios con forma de persona jurídica. Porque no está permitido a los cubanos organizar sus empresas usando otras formas jurídicas, como las sociedades mercantiles. Entonces, el cubano que piensa en grande, que no quiere forrar botones o desmochar palmas, que quiere montar algo mejor organizado que un negocito individual SOLO TIENE LA COOPERATIVA porque le tenemos prohibido otra cosa, entonces, una vez más, usa una figura jurídica para encauzar su interés legítimo. Si hubiera más libertad, los que se asociaran como cooperativas es porque quieren ser cooperativas y asumir su naturaleza jurídica y sus reglas, pero si otros lo que quieren es organizarse en una empresa con personalidad juridica propia, para desarrollar una actividad lícita, pues no tiene alternativas, tiene que morder el cordobán y constituirse en cooperativa. Mientras no haya libertad, no habrá prosperidad. Y que se olvide el autor de obligar a nadie ni de que nadie va a desarrollar negocios sobre bases "ideológicas". Hay que se r muy desconocedor de las leyes economicas, sociales y humanas para semejante planteamiento. Los negocios no tienen bases ideologicas, si no que se lo pregunte a todos con lso que hacemos negocios en este mundo. Y las cooperativas se parecerana las cooperativa cuandol os que quieres hacer empresas prosperas tenga la libertad de decidir la forma asociativa que mejor se adapte alo que desea.
En segundo lugar, porque el Estado no controla adecuadamente, porque persigue la ganancia en vez de propiciarla, porque obstaculiza la gestión de los emprendedores en vez de facilitarla y porque ni siquiera es capaz de controlar eficientemente, porque no tienen los medios, porque no hay infraestructura , porque los inspectores del fisco siguen usando métodos medievales y son muy corruptibles, van tocando de puerta en puerta y no hay ni siquiera posibilidad de rastrear la ruta del dinero porque seguimos siendo una sociedad menos que medieval, donde todo circula en cash, y esto es una locura, por tanto el Estado ni podrá construir viviendas, ni podrá obligar a a nadie que las construya, lo unico que puede hacer el Estado es ponerse las pilas y dejar quela gente prospere, que 180,000 viviendas en el piso y el Estado no las va a cosntruir, POR FAVOOORRR!!!!!!

Félix Sautié Mederos dijo...

En la tranquilidad de la noche, después de mi dosis final de insulina, muchas veces aprovecho para releer a Segunda Cita, busco, comparo, compruebo y confieso que me da saisfacción leerlos de nuevo a todos, lo hago varias veces. Hoy para mí es un día muy especial porque mi hijo Ricardito después de todo lo que pasó em Dominica en donde lo perdió todo, y después de unos días de recuperación con Elena y conmigo, está regresando a Madrid donde debió haber ido antes de los ciclones y tuvo la mala suerte que sus dos reservaciones coincidieron exactamente con la fecha de los ciclones, la primera suspendida y la segunda por causa de la primera también suspendida y después el caos y la desolación él y todos del barrio deonde vivían,salvo unos pocos, perdieron sus casas y todo lo que estaba adentro y allí como decimos en Cuba "no hay ni donde amarrar la chiva". Ahora ya podrá resolver en Madrid todo lo laboral que tenía pendiente. Como padre es lógico que esté preocupado pero a la vez tranquilo porque ya está en el rumbo normal de su vida. Todos fueron testigos de mis angustias en esos días. Por eso comprenderán la tranquilidad que tengo ahora, también con electricidad después del apagón rotura desde la mañana temprano a las 7 pm (las 19).
Bueno en esa tranquilidad que planteo encuentro que el datos que les dí en mi anterior post no es el correcto porque mi crónica "PENSAR PARA ACTUAR, QUIZÁS LO MÁS IMPORTANTE", no se encuentra en el anterior debate sobre la la Crisis de octubre , sino que está en el debate de "Che antidogma" de José Alejandro. http://www.poresto.net/ver_nota.php?zona=yucatan&idSeccion=22&idTitulo=595690
13 de octubre de 2017,11,54 y 11:55.

Anónimo dijo...

Silvio, estoy viendo en youtube esta entrevista, y aunque supongo que la tendrás, por las dudas: https://www.youtube.com/watch?v=X0E7dl4IFGA
Me parece entrañable, tanto por el contenido como por el recuerdo de Juan Carlos Mareco.

silvio dijo...

Gisselle Morales: Yaguajay malherido

Charles Romeo dijo...

Hay una frase que repito con frecuencia al comentar las reacciones ante el desarrollo de un sector económico no estatal en Cuba, para usar esta designacion que evita utilizar la palabra "privado", y es "el presente entra en escena con la mascara del pasado".
En economia, una actividad individual y privada solo existe si hay quienes recurren a ella para satisfacer una necesidad y si es asi, significa que es socialmente necesaria. De no serlo simplemente desaparece por que nadie la va a subsidiar si pierde dinero.
Las cooperativas existen y se desarrollan y ello indica objetivamente que el cuerpo social no solamente las acepta si no que ademas, las considera necesarias. Si un privado las contrata alla él, que sabe que le conviene y que no le conviene, asumiendo teoricamente que existe una solucion alternativa, lo que no es el caso. Si, en materia de construccion existe el MICONS y sus contingentes, pero el auge de las cooperativas en este campo revela una verdad indiscutida: o no logra satisfacer la demanda por este tipo de actividades o no lo hace con la calidad y prontitud necesaria.
Los cooperativas prosperan, con sus aberraciones y todo, pero prosperan asi como sus integrantes que ganan mucho mas que cuando eran simples trabajadores estatales y esto rompe la tradicion o al menos la idea de que en Cuba todos somos iguales, como lo demostro durante decadas la institucion de la libreta de racionamiento.
En el fondo la cuestion es que el Estado no es capaz de satisfacer todas las necesidades de la población, como quiso e hizo honradamente hasta donde pudo en los tiempos en que no habia otra solución revolucionaria posible. Y funciono, pero existia un campo socialista con el cual se habia integrado la economia cubana en condiciones especialmente ventajosas para Cuba en virtud de la capacidad de los cubanos de establecer relaciones de intercambio mucho mas favorable para ellos que las existentes en el mercado internacional capitalista. Pero ese mundo dejo de ecistir hace 27 años y no queda mas remedio que establecer una nueva organizacion de la economia nacional del tipo descrita por Deng Xiaoping cuando dijo "Que importa el color del gato. Lo que importa es que cace ratones". Habra cubanos mas ricos que los demas, pero su numero y su riqueza pependera de hasta donde lo permitan los cubanos de a pie, que son quienes en ultima instancia tienen el poder politico en Cuba.

silvio dijo...

Hay una nueva entrada

Carlos Ernesto dijo...

Lo que quisiera saber es, humilde y respetuosamente, cómo rayos vamos los cubanos de a pie a permitir o no permitir como un ente único el número y grado de riqueza de los cubanos más ricos. Me disculpo con antelación porque se me van muchos detalles de las relaciones económicas.

Yenny dijo...

Me parece muy buena idea lo del centro, la teoría, demostrar la capacidad de la cooperativa, las leyes, todo muy bien, el ser realmente un negocio de varias personas y no un único dueño, pero qué tiene que ver esto con que yo escoja reunir todos mis ingresos y visitar el resto del mundo? Por qué decirme burguesa cuando eso es por lo que trabajo, no lo robo? Dónde está el control en las empresas estatales y su falta de priductividad? Las verdaderas preguntas están en por qué los trabajadores se están moviendo de un sector al otro rápidamente? Salario superior, mayor creatividad, agilidad. El estudio debe hacerse, pero prohibirle o mirar mal a las personas por querer utilizar sus ingresos en lo que quieran, por favor, pleno siglo XXI. Slds

Michel dijo...

Como alumno de la Facultad de Derecho en ese entonces, participé en la inspección que realizara la Contraloría al sector cooperativista y que menciona el autor en su escrito. Entre las deficiencias que pude evidenciar (muchas de ellas mencionadas por el autor), la más sobresaliente era el hecho de que algunas personas eran "socios" de varias cooperativas a la vez, e incluso, ocupaban simultáneamente la presidencia de dos cooperativas. Cuando lo señalé ante algunos juristas, la respuesta me pareció facilista: lo que la ley no prohíbe, está permitido. Y es cierto: el Decreto-Ley No. 305, que regula a las cooperativas no agropecuarias, no tiene una prohibición expresa en este sentido. Pero existe en Derecho algo más que normas, y son principios. Y los principios del cooperativismo también son mandatos rectores por los que se deben guiar los cooperativistas y los controladores. La cooperativa no es una empresa privada, donde se articula (según la ley cubana) la estructura de sociedad anónima, y donde se puede ser dueño o accionista de cuantas empresas sostenga el bolsillo. La cooperativa es una alternativa (capitalista, sí, pero alternativa) a la explotación de los trabajadores y a la apropiación de la plusvalía por los dueños de los medios de producción, en la que cada socio devenga utilidades según su aporte en trabajo. Si no se trabaja, no se gana; y esas utilidades se aprueban en asamblea, lo que, en teoría, debe garantizar su justeza. Por ello, amén de las subjetividades y necesaria preparación de los cooperativistas presentes y futuros, creo que es necesario que se apruebe una Ley de cooperativas, que saque de la duda a los que prefieren desentenderse de estos asuntos ("eso no está prohibido") y establezca con claridad las reglas del juego.
Creo, con sinceridad, que nuestro modelo socialista debiera apuntar, como mínimo, a un 70 u 80 % de cooperativización en el sector obrero, pero ajustando este movimiento a la lógica jurídica socialista. Una Ley debiera limitar el número de socios, para que la cooperativa no crezca hasta tal punto que se desnaturalice y se asemeje a una empresa privada, debe puntualizar la relación entre la institucionalidad y estas; además, el Estado (y el Partido) deben idear una estrategia comunicacional que logre armar a los cooperativistas del conocimiento de sus derechos, y de su poder, para que no se confundan con trabajadores asalariados.
La cooperativa, ya lo decía el Che, es un colectivismo dentro del colectivismo más amplio, que sin dudas puede generar conflictos. A él no le gustaban: a mí tampoco me gustan demasiado. Pero cuando veo la otra opción posible, en la que pululan los nuevos ricos y los potentados, admito que me coloco como partidario de esta opción, que si no óptima, es al menos la más factible, en sectores como la construcción o la gastronomía. Del lobo, un pelo.

Norma trv dijo...

Los problemas detectados en el desempeño de las cooperativas de la construcción, según he podido deducir de algunas opiniones que he leído (no se ha rendido informe oficial alguno), es resultado, en mi criterio, de dos factores:
Primero, las cooperativas son la única opción organizativa que tienen aquellos cubanos residentes en Cuba que desean desarrollar una actividad por cuenta propia con un nivel de operaciones y organización más elevadas que las de un empresario individual (trabajador por cuenta propia). De haber tenido la posibilidad de escoger, estos trabajadores por cuenta propia probablemente se hubieran asociado formando otro tipo de persona jurídica diferente a la cooperativa, una sociedad mercantil, cuyas reglas y tratamiento legal se adapta mejor a ese tipo de necesidades e intereses empresariales. La cooperativa, con su personalidad jurídica, sin duda, puede potenciar la capacidad de organización y ejercicio económico de los trabajadores por cuenta propia asociados, si no hay otra opción, pero las sociedades mercantiles serían la forma idónea para la asociación de empresarios que buscan constituir una persona jurídica con ánimo de realizar emprendimientos mayores. La forma de resolver esta situación no es otra que adecuando la realidad a la norma legal, ofreciendo a los empresarios individuales/trabajadores por cuenta propia que deseen asociarse para formar empresas más organizadas y capaces de asumir mejor las demandas de bienes y servicios de la sociedad, las formas societarias adecuadas a la naturaleza del objeto social de su emprendimiento. De esta forma el Estado y la sociedad las podrían supervisor y controlar sabiendo de lo que se trata, con transparencia y reglas adecuadas para ello. En este supuesto, si alguien escogiera la forma cooperativa, sería porque realmente es la que se adapta a sus intereses, al tipo de actividad que quiere desarrollar, a las reglas que quiere asumir y no porque no tienen otras opciones.

Norma trv dijo...

Segundo, la mayor parte de la burocracia estatal y una buena parte de decisores, no logran comprender ni controlar adecuadamente la gestión no estatal. El Estado no puede convertirse en un perseguidor de emprendimientos, de empresas privadas, cubanas o extranjeras, de trabajadores por cuenta propia o de empresas estatales. Mucho menos establecer un insostenible apartheid económico en el cual cualquier empresario o compañía extranjera pueda montar negocios en Cuba, enriquecerse, y los cubanos no. El Estado tiene que ser un facilitador de los negocios y sobre todo de los negocios de los cubanos, sean estos públicos o privados, para que estos actores generen empleos y crecimiento económico en y para Cuba, y sobre todo para que PAGUEN IMPUESTOS. Son los impuestos el pollo del arroz con pollo, son los mejores reguladores del crecimiento (tampoco se trata de que sea como es hoy, que no estimulan el crecimiento e impiden que amplios sectores de trabajadores por cuenta propia rebasen la pobreza) y también son un mecanismo efiente de redistribucion de la riqueza. El Estado tiene que propiciar que los emprendedores generen riquezas y ha e ejercer la supervisión y el control sobre ellos sin impedir su desarrollo.
Por otro lado, sin transparencia, sin reglas para concurrir en una licitación, sin medios de cobros y pagos informatizados, pagando en cash, dejando a la decisión discresional de la administración de una empresa u organización estatal o pública la contratación con actors del sector privado, tratando de controlar el pago de impuestos y la legalidad con inspectores tocando las puertas de los negocios, y un largo etc. el Estado no impedirá los ilícitos ni la corrupción, todo lo contrario. La solución no está entonces en destruir organizaciones empresariales útiles a la sociedad, no está en botar el sofá ni tampoco en crear centros de capacitación obligatorios para formar cooperativistas puros y castos, amantes de la legalidad, la solución está en saber lo que hacemos y cómo lo hacemos, está en reglas claras y justas, y está en adecuados métodos de supervisión y control.
En otro orden de cosas, lo que hace cada quien con su dinero líicitamente obtenido y gastado o invertido, es de su única y exclusiva competencia.

Norma trv dijo...

Debió decir "adecuando la norma legal a la realidad".

Norma trv dijo...

Narciso Cobo es uno de los más eminentes juristas cubanos contemporáneos. Un hombre bueno, profundamente revolucionario y sabio. Fue Presidente de la Sala Económica del Tribunal Provincial de La Habana por muchos años y un experto en temas de la economía cubana desde la perspectiva del Derecho. Esta entrevista que le hiciera Fernandito Rojas para "Temas" es fundamental:
http://temas.cult.cu/content/el-socialismo-es-esencialmente-un-ejercicio-de-participaci-n
Narciso Cobo: El socialismo es esencialmente un ejercicio de participación
“En el socialismo que me represento es la gente lo que tiene otra centralidad, no el Estado. Este último tiene un papel ordenador, conductor hasta cierto punto, en la transformación de las relaciones sociales, pero es la sociedad la que construye el socialismo. Y no sé si “construir” sea la palabra. Pero lo cierto es que este no se hace sin participación, sin oír a la gente. Suele decirse que tenemos diseñados los espacios, pero en la vida real yo creo que todos, en un grado u otro, somos conscientes de que ni son todos los que deben y pueden ser ni son lo efectivos que quisiéramos que fueran. Hay un cierto autoritarismo o centralismo que, perdonando la expresión, más que anular, “suplanta” esta participación. “
(…)
“FLR: Aunque usted evita la simplificación, en la insuficiente credibilidad de nuestro sistema lo económico mantiene un peso significativo.
NC: Y lo político. Dos pueden ser los rasgos que presenta nuestro socialismo que, a mi juicio, le restan igualmente credibilidad: la centralidad del poder y la falta de participación, que quizás puedan sintetizarse en el verticalismo que padecemos. La primera se expresa en todos los campos y si por una parte hace densa la red que se estructura jerárquicamente, por otra anula la iniciativa, la creatividad, la autonomía de los órganos que están llamados a compartir funciones de gobierno o administración. En el plano de los valores, hacer lugar a la participación solo de manera figurativa, sin concederle verdadera importancia, cuando en rigor el socialismo es esencialmente un ejercicio de participación, no deja de ser caldo de cultivo del oportunismo, la complacencia, la mediocridad y la doble moral.”
(…)
“En cuanto a los medios de producción, término que a veces nos ha llevado por derroteros equivocados, pienso que los pasos que se dan en relación con las formas de gestión empresarial no estatal, expresión que continua poniendo de relieve una visual estatista, van dirigidos a reconocer el papel de estos nuevos actores y, como corolario, la diversidad de formas de titularidad e intervención de estos sobre los medios de producción a su disposición. Todo medio o instrumento de producción, equivale a decir todo actor económico, cuenta. Todo lo que obstaculice o haga ineficiente su empleo va en contra de la racionalidad económica que pienso debe primar para acabar de salir adelante.”

Abeja dijo...

Lo de los ataques sonicos se parece a la cancion Imposible
"Para expresar la clave de su angustia secreta".
Humor de R.M. Villena

Milton Ermitaño70 !! dijo...

Jesús Valladares N ... concuerdo contigo q no se debe temer a los nuevos ricos, pero tampoco se trata que éstos (cuentapropistas y/o empresarios privados en cualquier parte) acumulen una riqueza descomunal mientras hay gente que aún no tiene alcantarillado ... humanamente nadie puede acumular disparadamente riqueza, a menos q sea apropiándose (robando) del valor del trabajo de otro ... por otra parte, no entendí eso de q la iniciativa privada es superior a la planificación socialista. Quizá la 1ra es más fácil porque su ámbito es muy menor. En tal caso hay q meter más gente al aparato estatal a planificar como lo hace un empresario privado (la actividad económica requiere planificación) ...

Jolubaro dijo...

Saludos Silvio y demás segundaciteros. El sábado vi los minutos finales de la Entrevista Hoy es la Víspera de siempre, impresionado, ahora lo estoy bajando desde youtube para verlo completo. Sobre el tema de hoy, las cooperativas están concebidas para repartir las utilidades entre todos, siempre habrá quienes intentarán transgredir esto. Me llama la atención la aseveración de que "Muchos de estos “cooperativistas” están recibiendo ingresos entre 10 y 15 veces por encima del salario promedio". El salario promedio en Cuba es de 740 pesos (http://www.cubadebate.cu/noticias/2017/06/30/ha-crecido-el-salario-medio-en-cuba-infografia/) Es decir que estamos hablando que esos cooperativistas estarían recibiendo ingresos entre 7400 y 11mil pesos, o lo que eso lo mismo, entre 300 y 460 cuc. Yo pregunto, acaso eso es DEMASIADO dinero? No lo creo en un país donde el salario mínimo debería rondar los 3mil pesos(125). Si se cumpliera ese salario mínimo, como debería ser, la aseveración cambiaría al decir "Muchos de estos “cooperativistas” están recibiendo ingresos entre 2.5 y 4 veces el salario mínimo". Visto así parecería ridículo llamar la atención sobre ese hecho, pues yo mismo con mis 750 pesos de salario supero 3 veces el salario mínimo. Como alguien ya ha dicho por ahí, el lío no es luchar contra la riqueza(bien habida)sino contra la pobreza. Gracias