sábado, 18 de diciembre de 2021

Una entrevista a Vicente

El testimonio de Vicente Feliú que aparece a continuación forma parte del libro escrito por Luis Suárez Salazar y Dirk Kruijt titulado La Revolución Cubana en Nuestra América: el internacionalismo anónimo, Casa Editorial RUTH, 2015, pp. 338-358. 


La entrevista que sirvió de base a este testimonio se realizó el 8 de diciembre de 2011. La versión que aparece a continuación fue revisada y aprobada por su autor el 6 de septiembre de 2013.  


LA NUEVA TROVA: UNA EXPRESIÓN DE LA SOLIDARIDAD ENTRE LOS PUEBLOS DE NUESTRA AMÉRICA*

Entrevista con el trovador cubano Vicente Feliú, fundador del Mo­vimiento de la Nueva Trova. En la actualidad es el Coordinador de Canto para todos que, en las esperanzadoras circunstancias políticas existentes en el continente, ha venido movilizando a un importante número de viejos y nuevos trovadores de España, Portugal, pero sobre todo de América Latina. 

Cuando triunfó la Revolución Cubana yo tenía once años. Pero creo que no es po­sible hablar de mi participación en la posteriormente llamada “Nueva Trova” y de su contribución a la solidaridad con los pueblos de Nuestra América sin mencionar la política internacionalista de esa revolución y sin recordar a Carlos Puebla. Él fue quien puso la “primera banda sonora de la Revolución Cubana”. Es el “padre mayor”. Con su maravilloso lenguaje popular, picaresco y directo en sus canciones, comenzó a difundir, entre otros temas universales, la heroicidad del pueblo vietna­mita y nos dejó una de las canciones más bellas que se le ha compuesto al Che. 

Vicente Feliú, foto de Pepe Sulaimán

Las raíces de la Nueva Trova 

Bajo esas y otras influencias que mencionaré más adelante, varios de los jóvenes trovadores que en 1972 conformamos el Movimiento de la Nueva Trova, desde el principio empezamos a pensar en el internacionalismo. Desde los primeros años de nuestra juventud estábamos buscando la manera de colaborar con las luchas revolucionarias en América Latina, y probablemente en esos momentos ni siquiera estábamos haciendo canciones. 

Mi amistad con Silvio Rodríguez viene de principios del año 1962, y recuerdo que nuestras conversaciones giraban sobre las luchas que se estaban llevando a cabo en otras partes del mundo, sobre cómo podíamos ayudar a ese movimien­to revolucionario creciente que, sin ser muy público todavía, ya se desplegaba en América Latina. Las primeras canciones que ambos empezamos a hacer en 1964 y 1965, al igual que las de Noel Nicola y Pablo Milanés, hablaban sobre todo de la lucha armada revolucionaria. 

A partir de 1965, cuando se supo de la salida del Che hacia “otras tierras del mundo” (mucho después fue que nos enteramos que había ido a combatir en el llamado Congo belga y después en Bolivia), yo había recibido las primeras noticias del auge del movimiento revolucionario en Brasil como respuesta al golpe de Estado que en 1964 había derrocado al gobierno de Joâo Goulart. Por eso, en 1965 inicié mis estudios de portugués, buscando de alguna manera incorporarme a las luchas contra esa dictadura militar. Por esa época y con igual propósito ya había estudiado radiotelegrafía. 

Mis primeras canciones recogen ese estado de ánimo, esa búsqueda. Pero este se expresa más intensamente a finales de la década del sesenta y principios de los setenta. En las canciones de todos nosotros se reflejó el impacto que nos había causado la caída en combate del CheEn lo que me atañe, en 1967 le compuse una canción. La titulé inicialmente “Balada para que no se pierda un nombre” y más tarde “Una canción necesaria”, parafraseando el título de la introducción que hiciera Fidel al Diario del Che en Bolivia. Esta balada termina con un verso de un poema del chileno Vicente Huidobro dedicado a Lenin que dice: “Desde hoy nuestro deber es defenderte de ser Dios”. Contrastaba mi canción con “Zamba del Che”, que cantaba Víctor Jara, y que hablaba de San Ernesto de la Higuera. 

Cuando años después me encontré con ese poeta y cantante chileno (que no sabía entonces quién era), canté mi canción. Entonces él me dijo: “Mira qué curioso, yo canto una canción de un amigo mexicano que pareciera entrar en contradicción con lo que dices en la tuya”. Y me explicó por qué la religiosidad que existe en la mayoría de los países de América Latina había determinado que llamaran al Che “San Ernesto de la Higuera”; pero quien me lo explicó no fue la canción que le escu­ché, sino el hombre que la cantaba, un hijo genuino de esa realidad. 

Unos meses antes de la caída en combate del Che y de su posterior asesinato, en el verano de 1967, Haydée Santamaría, corazón con pensamiento, había orga­nizado el Primer Encuentro de la Canción Protesta en la Casa de las Américas. Esa Heroína del Moncada y presidenta fundadora de esa institución no era musicóloga, pero con el corazón les cantaba a todos. Fue una mujer preclara. Tenía demasiada sensibilidad para un cuerpo tan pequeño. Fue la que le mostró a Silvio, a Pablo y a Noel las canciones de la trovadora chilena Violeta Parra. Por eso creo que, en cierta medida, le debemos a Haydée una de las manifestaciones de nuestro espíritu inter­nacionalista. En este encuentro estuvieron presentes artistas de España, Estados Unidos, Uruguay, Argentina, Chile, México e Italia. 

Con Brasil el vínculo fue posterior, gracias a Alfredo Guevara, fundador y enton­ces presidente del Icaic, quien cuando viajó a ese país conoció el Movimiento Tropi­calista y el mundo de la Bossa Nova. En 1969 se creó el Grupo de Experimentación Sonora del Icaic (al que se incorporaron Silvio, Pablo y Noel) para componer la música que acompañó al cine cubano, sobre todo los documentales. Alfredo sabía de la importancia de la música y de la banda sonora. Nos trajo la experiencia de los brasileños que en ese momento eran la vanguardia musical de América del Sur. 

El importante papel de Casa de las Américas y del Icap 

Pocos meses después del Primer Encuentro de la Canción Protesta y de la caída en combate del Che, a principios de 1968, se realizó en Casa de las Américas el primer concierto de la que después se llamaría Nueva Trova. Allí nos encontramos seis de sus posteriores fundadores: Silvio, Pablo y Noel cantando. En el público estábamos Eduardo Ramos, Martín Rojas y yo. A partir de entonces todos íbamos bastante a menudo a cantar en el Icap, que fue la entidad de la Revolución que más nos convo­có en aquellos años. Entre otros, en sus actividades habitualmente cantábamos Los Cañas, Silvio, Pablo, Noel, Carlos Gómez, Los Dimos y yo. 

En ellas empezamos a vincularnos con muchas personas y personalidades la­tinoamericanas que visitaban Cuba. Siempre que nos encontrábamos en el Icap o en otros lugares nos preguntábamos qué canciones estábamos haciendo por Vietnam, por los movimientos de liberación de América Latina, de África. De modo que cuando en 1972 se fundó el Movimiento de la Nueva Trova, casi como orien­tación comenzamos a cantarle a las luchas de liberación. En su fundación hay que reconocer la influencia de nuestro gran amigo, pianista y maestro Frank Fernández. Él había regresado a Cuba en 1970 después de haber concluido sus estudios en el Conservatorio Tchaikovski de Moscú. Él fue el asesor, el cerebro cultural, musical de la dirección de la UJC. 

Nuestras primeras canciones que hablaban del apoyo a las luchas revoluciona­rias, a la lucha armada, se conocieron fuera de Cuba fundamentalmente a través de hermanos y hermanas de otros países. Entre ellas, Bárbara Dane (cantante de folk norteamericana, madre de Pablo Menéndez que trabajó en el Grupo de Experimen­tación Sonora del Icaic); el trovador uruguayo Daniel Viglietti, que en 1970 grabó con ese Grupo el disco Trópicos. Y, a partir de 1971, los chilenos Isabel y Ángel Parra, hijos de Violeta Parra, al igual que otros trovadores chilenos comprometidos con la Unidad Popular chilena, encabezada por Salvador Allende. En esos años visi­taron nuestro país los grupos Quilapayún e Inti Illimani. Todo esto nos fue creando un sentimiento “nuestro americano”. Somos parte de Nuestra América, como la había llamado José Martí. 

Pero también recibimos la influencia de americanos del norte (de “la otra Amé­rica”) porque allá hay mucha buena música, que desde siempre había tenido una trascendencia enorme en la canción protesta: desde Joe Hill, un sueco-norteame­ricano anarcosindicalista que fue fusilado a fines del siglo XIX; las canciones de los Guthrie (Woody y Arlo), de Pete Seeger, de Bob Dylan y de Joan Báez. En los años sesenta el folk song americano estalló como consecuencia de la repulsa a la agre­sión estadounidense contra el pueblo de Vietnam. 

Como uno de los frutos de todo eso y de otros procesos internos, en marzo de 1972, bajo el estímulo de la UJC se creó la Primera Brigada de Escritores y Artis­tas Jóvenes “Sierra Maestra”, proyecto piloto que después continuó como las “Bri­gadas 4 de Abril”, en recordación a la fecha que en 1962 la Asociación de Jóvenes Rebeldes había cambiado su nombre por el de Unión de Jóvenes Comunistas. Esas brigadas estaban integradas por artistas de distintas manifestaciones que subían a las zonas montañosas para llevarles el arte a los campesinos y a sus familias. Subie­ron a las montañas, con esfuerzos tremendos, hasta la Orquesta Sinfónica Nacional. También se llevó el cine a lomo de mulo. Yo participé de esa primera brigada. De los trovadores fuimos Enrique Núñez, Pedro Luis Ferrer, Myke Porcel y yo. El segundo jefe de esa brigada fue Frank Fernández, quien entonces trabajaba como asesor en el Departamento de Cultura del Comité Nacional de la UJC. 

En aquel momento nos llegó la información de un chileno cantante, que acababa de llegar a Cuba por primera vez. Propuso que su primer encuentro con los jóvenes artistas cubanos fuera con aquella brigada. Ese chileno fue Víctor Jara. Su primer encuentro con nuestra gente fue en Playa Las Coloradas, donde en 1956 había desembarcado Fidel y sus compañeros del yate Granma. Después nos fuimos a cantar en una actividad donde el 80 % del público eran niños. Los campesinos no entendían la mayoría de nuestras canciones y los niños menos; pero Víctor, en un segundo, se metió al público en el bolsillo conversando con ellos, porque él tenía una tradición de teatrero, de andar por todos los pueblos de Chile, al igual que había hecho Violeta Parra, explicando y contando sus canciones. Tenía una escuela extraordinaria, y un lenguaje hermosísimamente popular. Así fue como conocimos a Víctor Jara, previo a la fundación del Movimiento de la Nueva Trova. 

La influencia de los trovadores chilenos y peruanos en el Movimiento de la Nueva Trova 

Después viajamos a ese país en diferentes momentos. Silvio, Pablo, Noel en la segunda mitad de 1972, invitados por Gladys Marín al Congreso de la Juventud Comunista Chilena, y Los Cañas, Augusto Blanca y yo a principios de 1973, invita­dos a cantar en la última campaña electoral de la Unidad Popular encabezada por Salvador Allende. Aunque supe que ellos habían estado en Cuba en 1971 y 1972, fue durante ese viaje que conocí personalmente a Isabel y Ángel Parra. A pesar de que a Víctor Jara solo lo vi durante un momento, su impronta me llegó tremendamente. Ya conocía el grupo Quilapayún por uno de sus viajes a Cuba; pero en Chile conocí las escuelas que habían formado ese grupo, y a los Inti Illimani. 

Después, Los Cañas, Augusto y yo viajamos a Perú, entonces gobernado por el presidente-general Juan Velasco Alvarado. En su gobierno había personas muy afines a Cuba, como el general Fernández Maldonado, que era ministro de Minería. Él fue muy amigo de nuestro embajador Antonio Núñez Jiménez. Nos invitó a que viajáramos a Perú. En Lima fuimos a cantar no a un teatro, sino a un célebre barrio marginal: Villa El Salvador. Fuimos los primeros artistas del mundo que cantaron ahí, con un enorme telón de fondo con banderas cubanas y peruanas entrelazadas y el rostro del Che. 

En ese viaje conocimos gente tremenda: músicos, actores y actrices espectacu­lares. Uno de los músicos que conocí, Alberto (El Chino) Chávez, había musicaliza­do un poema de Javier Heraud Pérez, el poeta guerrillero que había sido uno de los fundadores del Ejército de Liberación Nacional del Perú y había caído en combate en 1963. En un verso de uno de sus poemas Javier dijo: “Yo no me río de la muerte, simplemente sucede que no tengo miedo de morir entre pájaros y árboles”. Y así fue como murió. Javier Heraud perfiló definitivamente mi concepto sobre el artista revolucionario. 

Esos viajes provocaron un intercambio natural que fue generando una especie de síntesis de todas las culturas que participaron de esos encuentros. Uno de los pensamientos que está incluido en los reglamentos del Movimiento de la Nueva Trova pertenece al poeta peruano Cesar Vallejo: “Todo acto o voz genial viene del pueblo, y va hacia él”. De modo que fuimos incorporando una especie de concepto de América para nosotros, desde nosotros, sobre la necesidad de luchar todos jun­tos por una misma causa desde el lugar que puedas hacerlo: la cultura, la canción y las armas cuando sean necesarias. 

En ese contexto, los vínculos con Chile fueron grandes. Después del golpe fas­cista de 1973 nacieron canciones de dolor y solidaridad como “Santiago de Chile” y “Canción contra la indecisión” de Silvio Rodríguez; “Yo pisaré las calles nuevamen­te” y “A Salvador Allende en su combate por la vida” de Pablo Milanés; “Andes lo que Andes” y “Las Noticias” de Amaury Pérez Vidal, entre las que recuerdo. 

Hay que mencionar que antes del golpe, en 1971, a solicitud de la UJC, habían ido a estudiar a Chile con el Quilapayún, con Víctor Jara, con Inti Illimani y con los Parra varios músicos cubanos que después formarían el Grupo Manguaré. Tengo entendido que esa fue una sugerencia de Fidel. El aprendizaje fue para todos. El mejor músico que llegó a tocar el pandero en Chile (instrumento característico de la música popular de ese país) fue Santiago García de Manguaré. Pancho Amat, siendo guitarrista, llegó a tocar la quena casi como un virtuoso. Y Víctor Jara llegó a incorporar el tres cubano en uno de sus discos.

Cuando los músicos de un pueblo y otro se empiezan a vincular y a aprender unos de otros lo que resulta es una explosión cultural. Por eso, el Manguaré des­pués de su estancia en Chile regresó a Cuba tocando exactamente una maravillosa la mezcla entre lo cubano y las culturas y la música de América del Sur. Nos trajo a los cubanos la famosa “Cantata de Santa María de Iquique”, una obra maestra de la música popular chilena. Esas canciones de pronto te llevan a otro mundo gracias al encuentro de los cantores, de la música. Esa confluencia parió a importante gru­pos musicales cubanos como Moncada y Mayohuacán. 

A partir del 1972-1973 comenzamos a viajar con más frecuencia a otros luga­res de América Latina y el Caribe; pero ya nos tenían ojerizas. Recuerdo que a fi­nales de 1974 invitaron a Silvio Rodríguez y a Noel Nicola a un Festival en República Dominicana que se llamó “7 Días con el Pueblo”. Conocieron a Víctor Víctor, a Sonia Silvestre, a otros dominicanos, así como a Pi de la Serra, un cantante catalán que luego visitó Cuba. El tristemente célebre Joaquín Balaguer estaba en la presidencia. Cuando los trovadores terminaron de cantar, no sé sabe cuántos miles de personas comenzaron a gritar: “Balaguer, Balaguer, asesino en el poder”. Las autoridades dominicanas les dieron 24 horas a los trovadores extranjeros para que se fueran del país. Éramos casi terroristas; por lo pronto, en esos años resultábamos muy subversivos, como creo que en alguna medida todavía lo somos en la actualidad. 

Los logros y desaciertos del Movimiento de la Nueva Trova 

De lo que ya he dicho se desprende que en los momentos fundacionales el Mo­vimiento de la Nueva Trova (MNT) no éramos tantos. No llegábamos a cincuenta. Después el Movimiento creció desmesuradamente y se desvirtuó su sentido, ya que dentro de él quedamos creadores y creadoras —los que componemos y cantamos nuestras canciones—, los músicos integrantes de los grupos, y toda una gran masa de gente que las reproducía en sus escuelas o centros de trabajo. Es decir, los crea­dores como tales, élite sin dudas, y todo el movimiento cultural que generaba esa vanguardia de la cultura cubana. 

Los dos fenómenos, el creador y el masivo, se entremezclaron y el resultado se nos fue de las manos. Algo parecido había ocurrido con el Movimiento de Aficiona­dos fundado en los primeros años del triunfo de la Revolución a partir de las Escuelas de Instructores de Arte. Los “artistas aficionados” llegaron a ser más del 1 % de la población y sin embargo no se llenaban los teatros y los cines que eran gratuitos o apenas cobraban un precio simbólico. Lo que debió crecer como un poderoso movimiento de aficionados al arte, con el tiempo se diluyó en fabricar miles de “artistas” sin talento. Por consiguiente, el movimiento de aficionados perdió su razón de ser. 

Y en ese mismo error caímos nosotros, hasta que en la segunda mitad de los ochenta se desintegró nuestro Movimiento. No dio para más. La organización se extinguió por su propio peso. Pero en los inicios, los del grupo inicial, en general estábamos bastante unidos (lo estamos todavía). Y a través del mismo Movimiento podíamos canalizar toda esa información que íbamos trayendo de diversos países, mandarla a la mayor cantidad de compañeros/as posible, compartirla en los en­cuentros y festivales que se hacían todos los años. 

También generamos discos colectivos. Al respecto recuerdo que, en 1973-1974, varios integrantes del Movimiento preparamos un disco destinado a conmemorar el primer aniversario del golpe fascista en Chile. En el año 1975 hicimos otro disco maravilloso dedicado a las luchas por la independencia de Puerto Rico: De un pájaro las dos alas, como había calificado a Cuba y a Puerto Rico la poetisa nacida en ese archipiélago Dolores Rodríguez de Tió (Lola)

Como ya dije el “nuestro americanismo” formó parte hasta del Reglamento. Componer canciones solidarias fue siempre un agradable deber. Antes de fundarse el Movimiento a Silvio Rodríguez le habían encargado la música de la serie Antesala de un tupamaro que se pasó con gran éxito por la televisión cubana. Poco después en Cuba se grabó a Daniel Viglietti el disco Trópicos, junto al GES del Icaic. En 1971, él cayó preso en Uruguay y se corrió la voz que sus captores le habían destruido las manos (cosa que, como se sabe, después hicieron los militares chilenos con Víctor Jara antes de asesinarlo). Pero en aquellos momentos, los trovadores cuba­nos decidimos aprendernos y montar toda la obra de Viglietti y cantarla nosotros. Eso es internacionalismo, solidaridad. Porque dijimos: Daniel se habrá quedado sin manos, pero su obra no se va a morir. Porque además su obra siempre fue muy fuerte, apoyando a los Tupamaros, la lucha armada revolucionaria y, años después, a la Revolución Sandinista. Por lo menos yo, siempre lo sentí como un hermano mayor y lo tengo todavía como un hermano mayor. Felizmente, la información sobre las manos de Viglietti resultó ser falsa. 

En esa época no había Internet, ni muchos teléfonos. Las informaciones nos llegaban días después, casi siempre a través de compañeros del Icap y de la UJC. Recuerdo que la primera vez que viajamos a Chile nos reunimos con compañeros del Departamento de Relaciones Internacionales de la UJC. Siempre que salíamos al exterior, estos nos daban información de la realidad específica, de lo que estaba ocurriendo en el país o los países que íbamos a visitar, ya fuera en América Latina o en Europa. Lo mismo hacían los funcionarios del Departamento de Relaciones Exteriores del CC del PCC. 

Después de la fundación del Departamento América del CC del PCC, los trova­dores mantuvimos nuestra vinculación con esa dependencia ya que la mayor parte de nuestros viajes eran a América Latina. En esas ocasiones sus funcionarios nos ponían al tanto de las situaciones políticas de cada país, ya que, en última instancia, quisiéramos o no, lo entendiéramos o no, a través de nuestras canciones éramos difusores y transmisores de ideas que proyectaban hacia diversos públicos e inter­locutores las posiciones internacionalistas de la Revolución Cubana. 

No obstante, vale la pena precisar que, como grupo, como Movimiento, no te­níamos vínculos con los grupos guerrilleros, ni con las organizaciones políticas o político-militares que entonces proliferaron en el continente. Como concepto gene­ral, cuando salíamos al exterior, siempre nos veíamos con los compañeros, tanto en el Departamento América, como de los Departamentos de Relaciones Internaciona­les del PCC y la UJC que atendían el país que íbamos a visitar. Ellos nos ofrecían in­formación actualizada de los países para apoyar nuestro trabajo. Y, en reciprocidad, si conocíamos algunos datos que pudieran ser útiles para el que ellos hacían, se los trasladábamos a nuestro regreso. Así lo hicimos, por ejemplo, cuando viajamos a Nicaragua poco después del triunfo de la Revolución Sandinista. 

El lugar de la Nueva Trova en la solidaridad con Angola y con la Revolución Sandinista 

Pero antes de la victoria de esa revolución, desde finales de 1975 hasta principios de 1977, varios de los integrantes del Movimiento de la Nueva Trova nos pusimos en función del apoyo internacionalista que la Revolución Cubana le estaba ofrecien­do a la lucha por la definitiva liberación de Angola y de otros pueblos africanos.

Cumpliendo con nuestro sagrado deber de ser internacionalistas, de manera totalmente voluntaria y personal solicitamos partir hacia Angola, por lo cual se conformó una brigada para cantar en los frentes de combate. Toda esa carga solidaria e inter­nacionalista que teníamos desde siempre, en el caso de Angola, la formación de la brigada fue la forma en que algunos de nosotros logramos canalizarla. 

Aunque actuamos en los frentes donde combatían los angolanos y los cubanos, también les cantamos a los congoleses, a los katangueses, a los cuatro sudafrica­nos presos y hasta a un argentino mercenario que nos sirvió de traductor de los sudafricanos. Ese descubrimiento humano del internacionalismo y de la solidaridad pudimos llevarlo a cabo en África. 

Aquel fue el internacionalismo de un pueblo entero. Mucha gente había estado cumpliendo misiones secretas en América Latina, en el Congo, en Asia, en Vietnam. Cuando se supo el “secreto” de que estábamos ayudando a Angola se des­tapó la olla hasta entonces oculta del internacionalismo cubano. ¿Quién sabía que además habíamos colaborado con el movimiento revolucionario de Venezuela, de República Dominicana, de Perú, de Bolivia, de Argentina, de Chile, de Argelia, del Congo, de Guinea? Lógicamente era una información muy controlada. 

Pero, a partir de Angola fui descubriendo que algunas personas que conocía habían tenido participación en misiones internacionalistas. Eso fue muy hermoso. Recuerdo que Fidel dijo que esa era la manera de saldar nuestra vieja deuda con la humanidad, lo cual es absolutamente cierto. En la guerra de 1868 había más de cin­cuenta oficiales chilenos, colombianos, peruanos, dominicanos, peleando junto a los mambises cubanos. La bandera de la independencia de Cuba —la que enarboló el Padre de la Patria Carlos Manuel de Céspedes el 10 de Octubre de 1868— es igual a la chilena con los colores cambiados de posición. El General en Jefe de nuestras fuerzas insurrectas en 1895 era Máximo Gómez, un dominicano que venía luchando en Cuba desde 1868. 

En África esa colaboración internacionalista no fue exclusivamente en el ámbito militar. Comenzó a crecer la colaboración médica, en la construcción, en la edu­cación; en fin, en un ámbito mucho mayor que la colaboración militar, tal y como ocurrió a partir del triunfo de la Revolución Sandinista en julio de 1979. 

En lo personal estuve bastante informado de la lucha del Frente Sandinista de Liberación Nacional a través de Orlando Castellanos, mi amigo y una de las voces más conocidas de Radio Habana Cuba, y fue siempre uno de mis asesores en temas internacionales. Un día de 1978 me llamó y me dijo: “Estuve en Nicaragua y conocí a Carlos Mejía Godoy. Él y su hermano habían sido los autores de un extraordinario disco titulado Guitarra Armada, en la que aparece una canción titulada “Comandante Carlos”, compuesta a partir de un texto del comandante sandinista Tomás Borge. Para mí ese disco es una obra maestra de la estética revolucionaria, por lo que en­seña a los campesinos analfabetos sobre la lucha, a través de la canción. 

Castellanos me dijo que había entrevistado a Carlos en el hotel en que estaba escondido. Me puso la entrevista, en medio de sirenas y algún que otro disparo suelto. A partir de ese momento Castellanos me mantuvo informado de lo que es­taba ocurriendo en Nicaragua. A menudo me llamaba para mantenerme al tanto de todas las noticias que le llegaban. En ese trasiego, el 19 de junio de 1979 me salió del alma, como parida, una canción que titulé “Nicaragua”; en la que me preguntaba cómo iba a ser esa revolución. Lo llamé y le dije: “Prepara el estudio, que voy para allá”. Él nunca me había pedido que compusiera una canción dedicada a Nicaragua; pero me salió muy de adentro exactamente un mes antes del triunfo de la Revolu­ción Sandinista. Después varios compañeros nicaragüenses me contaron que la escucharon a través de las ondas de Radio Habana Cuba en medio de la ofensiva final que derrotó a la dictadura somocista.

Eso me llenó de orgullo porque en las filas del FSLN había muchos, una infinidad de trovadores y cantantes. No fueron únicamente Carlos y Luis Enrique Godoy. Ni­caragua es el país de Centroamérica que más poetas y cantores tiene. Allí cualquiera habla en poesía. Hay un cancionero popular con una fuerza tremenda. Como hay un cancionero tan fuerte, también hay hábito de escuchar buena música poética. Uno de los más importantes festivales de la nueva canción que se hicieron en los años ochenta, fue en Nicaragua. Se realizó en 1983. A él asistieron cerca de cien mil personas en un país de dos millones de habitantes. La imagen de Augusto César Sandino presidió ese Festival. Fue una cosa impresionante. Nuestra querida Merce­des Sosa fue directamente del aeropuerto a cantar ahí. 

En ese momento ya había una guerra civil en Nicaragua auspiciada y financiada por los Estados Unidos. Organizamos brigadas para cantar por todo el país, y para moverse un cantor de una brigada a otra tenía que decidirlo personalmente el pre­sidente Daniel Ortega. Porque todas las brigadas iban a zonas de guerra, con el consiguiente riesgo que ello implicaba para los trovadores. 

En otro momento de ese año Silvio y yo actuamos en las fronteras. Estando en una ocasión cantando en la frontera con Honduras, un grupo de soldados se discul­pó porque tenían que irse a combatir muy cerca de allí. 

Hasta el año 1989 fui varias veces a Nicaragua. Allí descubrí muchas cosas. Lle­gué por primera vez en septiembre de 1980. Fui por quince días y decidí quedarme más tiempo. A los tres meses me llamaron de Cuba y me preguntaron si me iba a quedar viviendo allá. Dije: “Quisiera, pero no me van a dejar”. Por poco me quedo a vivir en ese país. De hecho, en 1983, le dije a Silvio que estaba pensando seriamente irme un tiempo para allá porque me había encontrado una revolución cuya dirección tenía mi edad. Era mi generación en el poder. Daniel Ortega tiene dos años más que yo y Humberto tiene mi edad. Omar Cabezas es más joven que yo. 

Estando en Nicaragua no me fui para El Salvador de milagro, porque muchos compañeros nicas y salvadoreños me decían, en plena efervescencia: “Vámonos para allá”. Era una época luminosamente loca. Pero la dirección del FMLN, por ra­zones políticas muy claras no quería que fueran cubanos a combatir en su territorio. 

En ese período compuse varias canciones. Lo mismo hizo Silvio. “El Unicornio” no está dedicado a nada ni nadie. No es una canción específicamente dedicada al internacionalismo, como sí lo son decenas de canciones de la Nueva Trova de los años setenta y ochenta. Pero cuando Silvio empezó a cantar El Unicornio comenza­ron a llegarle noticias de diferentes partes del mundo. Hasta que Juan José Dalton, hijo del poeta Roque Dalton (quien durante su estancia en Cuba fue muy amigo de Silvio, de Pablo, de Noel, así como de otros muchos amigos míos) le dijo desde las montañas de El Salvador que allá había un caballito azul con un cuerno. Por eso en el disco Silvio dice algo así como: “a todos les agradezco sus mensajes pero ya sé en qué lugares pasta mi Unicornio, y en parajes semejantes ningún amor está perdido”. 

Corrimos el riesgo de ser asesinados en Bolivia 

Antes de continuar hablando de otras experiencias internacionales quiero recordar que, en mayo de 1980, fui a Bolivia por primera vez. En Cuba estaban recientes la ocupación de la Embajada de Perú y el posterior éxodo de mucha gente descontenta con la Revolución. Había una enorme campaña internacional contra nuestro país. Tan grande que habían cancelado conciertos de Silvio, de Pablo, de Noel, de Virulo y de Sara González. En Bolivia se había instalado un gobierno civil después de mu­chos castrenses. En esas circunstancias, nos invitan a un festival universitario de la canción. 

Durante las gestiones del viaje me llamó Santiago, un compañero del Depar­tamento América, para decirme que había rumores de que se estaba preparando un golpe de Estado de extrema derecha y sugirió que no siguiera adelantando las gestiones para ese viaje. Le contesté que había que ir para hablar de Cuba, porque en todas partes estaban diciendo oprobios y mentiras de la Revolución. 

No sabía que en ese momento estaban por allá dos dirigentes estudiantiles cu­banos participando en un evento de la Organización Continental Latinoamericana de Estudiantes (Oclae). Para que me acompañaran a ese festival y con la idea de abarcar tres zonas de Cuba hablé con Augusto Blanca, de Oriente, quien había es­tado conmigo en Chile y Etiopía, y con Lázaro García, de Cienfuegos, quien había estado en Angola como combatiente y luego se había integrado a la brigada cultural que organizamos allí. También nos acompañó Sareskita Pantoja Escalona, estudian­te cubana, novia del boliviano Rodrigo Cottier (estudiante de música en Cuba) e hija del capitán Orlando (Olo) Pantoja, combatiente de la guerrilla del Che, quien murió el 8 de octubre de 1967 en el combate de la Quebrada del Yuro. 

Finalmente fuimos al ya mencionado festival y cantamos en muchos lugares. Para no provocar evitamos cantar nuestras canciones más fuertes. No menciona­mos nunca al Che salvo en el último concierto, en un colegio de La Paz, en que para despedirnos el público empezó a cantar “Hasta Siempre Comandante”, de Carlos Puebla. Esa noche, mientras compartíamos con unos amigos en una casa particular, se escucharon detonaciones como cañonazos o bombas, y disparos. Pensamos que estaba ocurriendo el esperado golpe de Estado. Partimos rápidamente en el jeep de una amiga hacia el lugar donde debíamos ir en esas circunstancias. No llegamos porque nos detuvo el personal de la Inteligencia del Ejército. Nos metieron presos en una de sus instalaciones. Nos golpearon. Nos interrogaron. 

Aunque estábamos en una dependencia del Ejército boliviano, tras la golpiza nos interrogaron un cubano y un argentino, posibles “camaradas” de la Operación Cón­dor. Pensamos: “Bueno, hasta aquí llegamos”. Como de inmediato no se consolidó el golpe de Estado, al día siguiente nos presentaron ante la prensa como integrantes de un presunto comando terrorista que había puesto varias bombas en la ciudad de La Paz y realizado espionaje en las altas esferas de las Fuerzas Armadas. Con vistas a allanar el camino para derrocarlo, culparon al gobierno civil por permitir la entrada de esos “terroristas”. 

Cuando, juntos a dos jóvenes bolivianas que nos acompañaban y sin que pu­diéramos decir ni una palabra nos presentaron ante la prensa internacional fue que se supo públicamente que estábamos detenidos en La Paz. Nos enviaron a las de­pendencias del Minint bolivinano. Eso nos salvó porque se produjo una presión muy grande por parte de nuestros amigos. Generaron una movilización impresionante. La ma­nifestación reclamando nuestra libertad fue encabezada por el trovador boliviano Luis Rico, junto a la trovadora Jenny Cárdenas y a un grupo de gente maravillosa muy cercana al sacerdote jesuita Lucho Espinal, quien había sido asesinado unos meses antes de que llegáramos. Esa manifestación la engrosaron muchas personas que habían compartido con nosotros esos días en Bolivia, incluidos estudiantes, obreros y otros sectores populares. 

Cuando llegó la información a Cuba, Haydée Santamaría empezó a convocar a todos los amigos de Casa de las Américas. Joan Manuel Serrat y Antonio Ga­des comenzaron a organizar una manifestación que felizmente no echaron a andar porque aparecimos maltrechos, pero vivos. Cuando salimos de Bolivia el golpe de Estado estaba latente y se produjo un mes después, el 17 de julio de 1980, bajo la dirección del general Luis García Meza. Quienes nos habían detenido eran las tropas del coronel Luis Arce Gómez, jefe del G-2 del Ejército, estrechamente vinculado al narcotráfico internacional y que luego García Mesa lo nombró ministro del Interior. 

Tres años después, ya instalado el gobierno civil presidido por Hernán Siles Suazo, regresé a Bolivia. En esa ocasión viajé con Silvio. Realizamos una gira en solidaridad con los bolivianos damnificados por las inundaciones que se habían producido en algunas zonas de ese país y por los estragos que en otras estaba produciendo la sequía. La gira fue organizada a través del Departamento América del CC del PCC y todos los fondos que recaudamos los aportamos para la rehabilitación de las poblaciones de las zonas afectadas por esos movimientos de la naturaleza. 

Los Festivales de la Nueva Canción Latinoamericana 

Previamente, en 1981, había participado en un Festival Internacional de la Nueva Canción que se realizó en México, donde siempre se han alumbrado muchas cosas. En ese año también organizamos un encuentro fraternal con todos los viejos trova­dores cubanos que quedaban vivos y les entregamos diplomas de reconocimiento. Un año después celebramos en Varadero un Festival en ocasión del X Aniversario del Movimiento de la Nueva Trova. Allí le entregamos la “Distinción X Aniversario del MNT”. De manera póstuma y simbólica también se la entregamos a Benjo Cruz, trovador argentino muerto en la guerrilla de Teoponte, Bolivia, en 1970; a Jorge Sa­lerno, trovador tupamaro muerto en combate, y a Víctor Jara, para que nadie tuviera dudas sobre cuáles habían sido los inspiradores de nuestro Movimiento. 

Con algunos participantes de otros países decidimos crear el Comité Interna­cional de la Nueva Canción, buscando concretar una experiencia similar a la del Nuevo Cine Latinoamericano. Pero aquello no fructificó, porque organizativamente era demasiado complicado. Sin embargo, nos sirvió para promover este tipo de festivales durante algún tiempo, comenzando por el que ya mencioné que se realizó en Nicaragua en 1983. En el 1984 se realizó en Quito, Ecuador. Y, en 1985 pensa­mos celebrarlo en Argentina inmediatamente después del triunfo electoral de Raúl Alfonsín, pero al final no pudo realizarse. No obstante, en 1986 y 1987 se realizaron dos eventos en Perú aprovechando que el entonces presidente de ese país Alan García había sido un adicto a la trova cuando era estudiante en París y se ganaba la vida cantando a dúo con Fernando Arias canciones de la Nueva Trova cubana y rancheras mexicanas. 

Tuve muchas responsabilidades en la organización de todos esos festivales, hasta que 1987 se desintegró el Movimiento de la Nueva Trova. Fui muchas veces a América Latina por estos trajines, a organizar primero y participar después, en mi doble condición de organizador y artista. En esos años compartí mi trabajo, primero con un pianista y, después, con un grupo musical. Con ellos realicé un par de giras por Nicaragua. 

De esos años recuerdo que en la casa de Frank Fernández —con el que a los fundadores de la Nueva Trova nos unen lazos tremendos, de toda la vida, no solo musicales y culturales sino revolucionarios— conocí a uno de los principales di­rigentes del M-19, Carlos Pizarro, quien después fue escandalosamente asesinado en un avión que despegó de Bogotá. Ese encuentro fue algo memorable, porque me acababan de hacer un afiche muy bonito. Le regalé a Pizarro un ejemplar y él me pidió otro y me lo dedicó con su firma. 

Esa noche nos invitó a Silvio, a Frank y a mí a visitarlo en las montañas de Co­lombia, cosa que lógicamente era impensable. Mi hermano Santiago —el trovador, el loco, al que llamamos Santi porque tiene el mismo nombre y el primer apellido de otro de mis hermanos que es periodista, diplomático y político— sí fue a Colombia. Estuvo con Carlos Pizarro en la guerrilla, en el campamento que tenían en una zona llamada Santo Domingo. Santi diseñó el plan de cultura del M-19 y, según me contó, disparó con Pizarro todos los tiros que nunca pensó disparar en su vida. 

Después que se acabaron las dictaduras militares y llegaron las “dictablandas”, las democracias representativas, mucha gente pensó que la canción de contenido, de protesta, como se le quiera llamar, ya no tenía razón de ser. De todas formas, como saldo de esos años y como uno de los frutos de mis vínculos con los compa­ñeros del Departamento América y con varios de sus amigos latinoamericanos se fue constituyendo una red de amistades que se mantiene muy sólida en el contexto de la lucha cultural que se sigue librando en Nuestra América y de la solidaridad que siempre ha existido y debe seguir existiendo entre sus pueblos, sus artistas y sus trovadores. 

En esa etapa, en 1986, visité por primera vez a Río de Janeiro, Brasil. Fui el pri­mer trovador cubano que cantó en esa ciudad. En el momento en que estaba volan­do desde Lima hacia Río se restablecieron las relaciones diplomáticas entre ambos gobiernos. Nunca se me olvida que, cuando llegué al aeropuerto, el funcionario de migración que me atendió me dijo: “Cubano, entra que ya ustedes no necesitan visa para entrar a Brasil. Bienvenido”. Mi anfitriona fue Marilia Guimarães, una mujer extraordinaria que había estado vinculada con la gente de líder guerrillero Carlos Marighella. Después de su asesinato, a fines de la década de los sesenta, ella, con otra persona y con sus dos hijos, se robaron un avioncito y vino para Cuba. 

Acá participó en la génesis y la fundación del Movimiento de la Nueva Trova. Es amiga del Choco, de Nelson Domínguez, de Fabelo, de Paneca y de toda la gente que fundó el Taller de Grabado en La Habana; en fin, de muchos artistas de nuestra generación. Cuando retornó a su país abrió el restaurant “La Bodeguita de Río” (rememorando la del Medio). Yo comencé la programación cultural de ese recinto y detrás de mí fueron Noel y Augusto. 

Pese a que desapareció la idea colectiva y organizada de la Nueva Trova y de la Nueva Canción, estas no desaparecieron como fenómeno cultural, ni creo que desaparecerán, aunque cambien sus formas de expresarse. 

La Nueva Generación de trovadores en América Latina 

A esa conclusión llegué en las visitas que en la década de 1990 realicé a España, Argentina, Ecuador, Perú, Chile y Bolivia. En esos países suramericanos me percaté que había o estaba surgiendo una generación nueva y robusta que estaba (y aún está) reivindicando su historia nacional y la historia americana. Casi todos son uni­versitarios, con un nivel cultural alto, con un nivel de compromiso en la búsqueda de la historia de su país, y que tienen en la que llamamos la Nueva Trova y la Nueva Canción una referencia fundamental. Al par, descubrí que los trovadores y trova­doras de mi generación, luego de un descanso obligado, estaban regresando con nuevos bríos. 

En lo que me corresponde, en 1997, presenté en Cuba mi disco Guevarianas. Lo había grabado a mediados de año y quería presentarlo el 28 de octubre, aniversario de la muerte del emblemático comandante del Ejército Rebelde Camilo Cienfuegos. Lo presenté en la sala José Martí de la biblioteca de Santa Clara, donde un par de semanas antes se habían velado los restos del Che. La preparación de ese disco era una deuda que yo tenía con él y con el 30 Aniversario de su caída en combate. Lo titulé de esa manera porque estaba disgustado con cierto guevarismo de pacotilla y mala leche que surgió con tanta gente hablando mierda del Che, prácticamente sin conocerlo y sin ser consecuentes con su legado. Decidí compilar las canciones que le había hecho o que había compuesto y cantado bajo la inspiración de su ejemplo. 

Como esas canciones no me alcanzaban para un disco, busqué en mi obra aque­llas canciones que pudieran tener que ver con situaciones similares a las que vivió el Che. Decidí seleccionar 14 y compuse una especialmente para ese disco, “Che: 30”. El 9 de octubre asesinan a Ernesto Guevara. Hasta ese momento él había sido Che para los cubanos, la CIA y algunos revolucionarios en el mundo. Pero no era una figura tan pública, hasta que lo matan. Cuando lo hicieron lo convirtieron en un sím­bolo que a diario crece más. Por ese Che, por ese símbolo brindo cada 9 de octubre. 

Previo a la presentación de ese disco había estado en la tierra de Víctor Jara. Allí conocí a unos jóvenes, nacidos en plena dictadura de Pinochet. Ellos estaban haciendo canciones muy interesantes y rencontré la leyenda de la trova popular chilena. En Bolivia, Ecuador y Perú —países que había visitado mucho durante los años ochenta— me encontré algo muy interesante: la generación que aparentemen­te estaba liquidada durante las “dictablandas”, estaba sencillamente descansando, esperando un segundo aire. Estaba con mucha fuerza trabajando en algo que a mí también me estaba empezando a interesar, buscando los orígenes, búsqueda que no siempre se había dado de igual manera en esos países, y haciendo las canciones de estos tiempos. 

En Bolivia encontré que los hermanos Junaro estaban cantando las canciones de su padre. Luis Rico estaba trabajando con bandas de música militar que tuvieron un momento importante en los años treinta y cuarenta. Carlos López, que se ha­bía quedado como dormido, estaba haciendo nuevas canciones. Pero, también me encontré con el dúo Negro y Blanco que eran sociólogos, comunicadores sociales. Ellos hicieron un bojeo a Bolivia, recorrieron todo el país, hicieron más de cincuenta canciones con las experiencias que vivieron en cada lugar. 

A su vez, en Perú encontré una generación fortísima de gente muy joven, algu­nos adictos a la Nueva Trova. A tal punto que tenían un grupo llamado “Silvio a la Carta”. Se saben completa la obra de Silvio. Son comunicadores sociales, músicos, cantantes que de pronto se han reunido alrededor de la obra de Silvio. Para mi sor­presa, a través de ella habían descubierto a la maravillosa trovadora peruana Chabu­ca Granda. Y cuando la “descubren”, se encuentran a Félix Casaverde, el compositor y guitarrista de Chabuca que había hecho la excelente síntesis de la guitarra peruana que lo convirtió en uno de los guitarristas más impresionantes que ha tenido Améri­ca Latina. Provenía del llamado Perú Negro. Por eso le decían “el Negro Félix”. Nos habíamos conocido en los años 1983-1984, ya que él también fue intérprete de toda la trova cubana, incluyendo el filin. Hasta su muerte fue un hombre de una sensibilidad especialísima, modesto entre los modestos, como son los grandes. Y, en cierta medida, eso pasa con la Nueva Trova en otros lugares de América Latina, gente que explorando nuestra experiencia descubre su propia canción nacional, que tiene piezas bellísimas. 

En Ecuador también conocí a otros jóvenes, trovadores y poetas. Hace poco por allá me encontré con un joven trovador peruano, Omar Camino, un payador extraor­dinario. En el aire improvisa y te canta una décima bella y perfecta. Además, toca todos los ritmos de la música peruana. Le pregunté que dónde había conocido esa manera de tocar la guitarra, y me dijo: “A veces hasta en los prostíbulos. Porque, en Brasil y en Perú, en los prostíbulos cantan los trovadores viejos que van allí para que les den unos pesitos”. 

De modo que me fui convenciendo que había comenzado a surgir otra genera­ción de cantores, que todavía no se conocen suficientemente. Por eso cuando en América Latina me regalan discos —la mayoría hechos por los mismos cantores en computadoras o en estudios modestos— los agarro en la Paz y lo llevo a Cochabamba. El de Cochabamba lo llevo a Santa Cruz, el de Santa Cruz a Lima, el de Lima a Quito, el de Quito a Cuenca. Así comencé, casi sin darme cuenta, a crear una especie de red. Hay radios que pasan esa música y me entrevistan. Como ya existe el MP3 y estamos en la época digital, copio los discos y los voy pasando a otras manos. De esa manera, fui creando una red de radios amigas sin saber muy bien hasta dónde llegaría, pero sintiendo que había que hacer algo; haciendo lo que puedo, “haciendo camino al andar”; ya que —aunque todavía no existía la ahora llamada Alianza para los Pueblos de Nuestra América (Alba), ya los cantores la esta­ban oteando en el horizonte. Por tanto, comprendí que era el momento de retomar alguna instancia, no oficial, que nos permitiera comunicarnos de alguna manera. 

Canto de Todos 

Con esa idea dándome vueltas en la cabeza, hacia finales de 1999 coincidí en una actividad con el entonces ministro de Cultura de Cuba, mi amigo Abel Prieto. Le hablé sobre esta red que estaba creando con los trovadores y las radios de varios países latinoamericanos. Me preguntó qué necesitaba y le dije que, hasta ese mo­mento, no necesitaba nada. Más tarde se me ocurrió la idea de que este proyecto se podía llamar, recordando a Violeta Parra, “Canto de Todos”. Y luego me acordé de otra canción titulada “Manifiesto” de Víctor Jara. Su verso final dice: “Canto que ha sido valiente siempre será canción nueva”. Pocos versos son capaces de resumir tan perfectamente una idea sobre la trascendencia del arte y la ética. 

Movido por esas convicciones, en septiembre de 2000 decidimos celebrar en la Casa de las Américas un encuentro iberoamericano que se llamó “Un Canto de Todos”. Marcia Leyseca, la vicepresidente de esa emblemática institución, y María Elena Vinueza, jefa del Departamento de Música, prepararon la convocatoria, pero aclarando que no se podían sufragar los gastos de pasajes aéreos. Solo podían garantizar hospedajes económicos, comidas, las actividades y el transporte interno. Llegaron trovadores de Latinoamérica y España. La Casa organizó muchas activida­des en centros importantes. Sin embargo, la más memorable se realizó en el barrio cuasi marginal de La Timba, bajo un torrencial aguacero que impidió el concierto en el escenario que se había preparado y terminamos cantando en las casas de la gente. Fue una cosa tremenda para todo el mundo, para el público y para los trova­dores. En el mismo año logramos hacer otro encuentro similar en Chile. No hubo apoyo oficial ni mucho público, pero fue muy interesante. Volvimos a retomar las ideas del encuentro de Cuba y de aquellos festivales de la Nueva Canción. 

Poco más de dos años después, a comienzos de 2003, hubo un evento del Foro Social Mundial (FSM) en Porto Alegre, Brasil. Los organizadores del patio me pidieron que fuera para organizar las actividades de la Casa Cuba. Esto nos permitió tener información de alguna gente que llegó a ese evento. Con ese grupo y otras personas que conocí en el camino, en una nueva visita que realicé a Porto Alegre en el FSM de 2005, terminamos de consolidar “Canto de Todos”. Les pedí a los que ya conocía que fueran al Foro y a todos les hablé claro y les dije: “No tenemos hospedajes ni comidas ni transporte, pero los necesito en Porto Alegre”. Llegaron el dúo Negro y Blanco de Bolivia; Ricardo Flecha de Paraguay; Miriam Quiñones fue en moto desde Perú; Panchito Villa llegó desde Chile; Gabriel Sequeira viajó en bus desde Buenos Aires. Además, había gente de Porto Alegre, entre ellos Pedro Muñoz, un gran trovador vinculado al Movimiento de los Trabajadores sin Tierra (MST) y el chileno Patricio Anabalón. 

Es un proyecto cultural iberoamericano; pero tiene menos que ver con España y Portugal que con Latinoamérica. De las pocas cosas útiles de la colonización y la conquista nos quedó un lenguaje común, con el que podemos entendernos; cosa que no se logra en Europa, ni en Asia ni África. ¿Por qué no es más amplio el pro­yecto? Porque no me puedo comprometer con los anglófonos y francófonos. Hablo español y un poquito de portugués. No tengo capacidad para más y hasta ahora, me he convertido en el corazón de “Canto de Todos”. Después podrán y deberán asumirlo otros trovadores. Pero, hasta ahora estoy al frente, en los costados y en la retaguardia. Y desde el principio tenemos el más profundo interés de que este no sea un proyecto oficial de ningún país, partido ni gobierno. Quien quiera colaborar, bienvenido, pero dejando en claro que las decisiones las toma “Canto de Todos”. 

No es un movimiento abierto, ni tenemos interés de agrupar a decenas, ni a cientos ni a miles. Es un pequeño núcleo de guerreros del canto, que llegaron a su mayoría de edad en la última década del siglo xx, en un momento en que parecía que esa canción ya no tenía razón de ser. La mayoría tiene de cincuenta años para abajo, aunque algunos de mi generación también colaboran, y con mucha fuerza. Tene­mos poder de convocatoria para pedirle a quien sea que comparta escenario, ideas y apoyo, como en algunos comunicados de solidaridad con Honduras y Ecuador. Inclusive, nuestros Cinco Hermanos presos en los Estados Unidos firmaron esos comunicados. Sobre todo, nos interesa trabajar con personas que sepan qué cosa es esa canción, qué significa y quiénes la hacen. Que asumen compromisos con su historia y que estén dispuestos a jugársela por esa canción. No es un proyecto de la Revolución Cubana, aunque yo y muchos de nosotros le debamos algo más que influencias a esa Revolución. 

Y vuelvo: Joe Hill el sueco-americano, fusilado; Benjo Cruz, muerto en la guerri­lla de Teoponte; Jorge Salerno, asesinado por ser Tupamaro, y Víctor Jara, en cuya persona se perpetró uno de los crímenes más aborrecidos del fascismo chileno son los cuatro paradigmas de “Canto de Todos: la guerrilla del canto”, la canción de riesgo, la canción del pueblo, la canción internacionalista, la canción que hay que defender a toda costa. 

En Argentina ocurrió algo que nos demuestra hasta dónde podemos llegar con ese canto. Allí hay desde siempre un movimiento enorme de esta canción, más fuerte que en cualquier otro país porque allí se unen poetas y cantores para hacer canciones, tal como en cierto momento ocurrió en Cuba. Varias canciones del afamado Sindo Garay no llevan textos suyos. María Teresa Vera componía con Guillermina Aramburu. Muchas canciones de Graciano Gómez tienen textos de Gustavo Sánchez Galarraga. En Argentina hay tradición de binomios autorales como Isela-Tejada, Gardel-Lepera, Lima Quintana con varios músicos y muchos más. Por lo tanto, hay una carga poética muy fuerte y una intención de trabajar con otros. No es solo la actividad individual, sino que hay la experiencia de compartir la creación artística. Pero, desde el llamado “Nuevo Cancionero Argentino”, yo no tenía referencias de que allá se hubiera unido tanta gente en torno a un proyecto artístico colectivo. 

Hace un tiempo llevé a ese país un libro de Antonio Guerrero, uno de los Cinco Héroes cubanos presos en los Estados Unidos. Ese libro se llama Poemas Confiden­ciales. Argentinos de varias regiones del país y de varias generaciones lo musicali­zaron completo y le pusieron Canciones Confidenciales. Pero, además, después que terminaron ese precioso disco, hicieron un primer encuentro nacional de trovadores en la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (Esma), ese terrible centro de re­presión y tortura durante la dictadura militar de 1976 que hoy es un centro cultural dirigido por Teresa Parodi, una gran trovadora que participó en la preparación de Canciones Confidenciales. Alrededor de la solidaridad hacia un preso injustísima­mente condenado, los argentinos se han unido para musicalizar sus poemas. Mira qué cosa más encomiable. En breve, los brasileros también van a sacar un disco con otros poemas de Antonio Guerrero. 

“Canto de Todos” se está desarrollando en Argentina, Bolivia, Chile, Ecuador, Nicaragua, Paraguay, Perú y Venezuela. Y por supuesto en Cuba. También hemos trabajado con Karla Lara de Honduras que es nuestra delegada allí. En Guatemala está Rony Hernández que hace canciones, si bien es más intérprete. En El Salvador también estamos trabajando. En México estamos al comenzar una colaboración con Gabino Palomares y en España con el andaluz Juan Trova. 

Ese es a grandes rasgos mi aporte internacionalista en la actualidad. Por eso digo que tengo sesenta y cinco años, teniendo una vida muy activa en la cultura y en la Revolución. Siento que tengo la necesidad y la responsabilidad de alertar, brindar­les informaciones que puedan ser útiles para que se orienten los que vienen detrás. De la misma manera que pido constantemente opiniones y aprendo una enormidad. Y como soy el más viejo y estoy con ellos en la misma trinchera, generalmente me oyen y sobre todo me escuchan, que es lo más importante para mí.



* La entrevista que sirvió de base a este testimonio fue realizada el 8 de diciembre de 2011. Luego de terminarlo, esta versión fue revisada por Vicente Feliú el 6 de septiembre de 2013.

 

113 comentarios:

silvio dijo...

Mensaje de Luis Suárez. Tania García, su esposa, fue compañera de Vicente y mía en la secundaria "José Antonio Hecheverría", que por entonces estaba en las antiguas Escuelas Pías de La Habana, en San Rafael y Lealtad.
srd

Querido Silvio:

Bajo la conmoción que nos causó a Tania y a mí la noticia de la muerte repentina de nuestro compañero y amigo Vicente Feliú, te adjunto el testimonio que incluí en uno de mis libros, preparado junto al colega holandés Dirk Kruijt.

Como verás en el adjunto, esa obra se publicó, en formato digital, en el 2015 por RUTH, Casa Editorial, con el título La Revolución Cubana en Nuestra América: El internacionalismo anónimo.

He sugerido que ese testimonio (inédito en Cuba) sea publicado al sitio Web de la UNEAC para que lo difunda con algunas de las fotos más recientes de Vicente Feliú; quien, al igual que tú, vivirá mientras haya algún trovador o pallador de cualquier parte del mundo que cante cualquiera de vuestras muchas, bellas y siempre comprometidas canciones.

Sin embargo, te dejo en libertad de publicarla y distribuirla en cualquier lugar donde crear que debe llegar su imperecedero mensaje.

Un abrazo,

Dr. CC. Luis Suárez Salazar
Escritor y Profesor Titular Instituto Superior de Relaciones Internacionales (ISRI)

Doris dijo...

Hola a todos

Desde ayer tengo un pesar en el alma que no se me quita. Me cuesta mucho trabajo asimilar esta pérdida.

Silvio, mi abrazo para ti por el hermano querido que ha partido.

Lissete, la esposa de Orestes, me recordó en Facebook esta canción, que hace muchos años no escuchaba. Sirva para recordarlo también.

1974. Canto Nº 1 (o El primer día)

(Vicente Feliú)

Comienza el primer día de un año que comienza contigo.
Un año es siempre un año y nunca es suficiente.
Y me besas a las doce y los amigos se abrazan
y algún hereje se acuesta temprano.

Ven a recorrer todo este día de punta a punta.
Ven a recorrerme el cuerpo, mis puertas, mis ventanas.
Ven a recorrer mi poema de luz y fe
y ven a recorrer mi esperanza.

Comenzamos de pronto por mirarnos la risa
—la risa de tus calles, la risa de mis versos—
y luego te pido un beso, café y tu mano temprana
para sembrar la mañana de este día aquí, en mi pecho.

Ven a recorrer todo este día de punta a punta,
ven a recorrerme el cuerpo, mis puertas, mis ventanas,
ven a recorrer mi poema de luz y de fe
y ven a recorrer mi esperanza, amor.

https://youtu.be/hIccIrzYO5o

Vicente, nunca te olvidaremos ❤❤❤❤❤❤❤

Mónica L. dijo...

Que infinita tristeza, mi abrazo amoroso para todo el pueblo cubano, para Aurora y para ustedes. No hay consuelo, esta distancia ahora da mucha importancia. Los amo y desde lo más sagrado de mi alma, estoy con ustedes.

Raúl Ybarnegaray dijo...

Lo primero que pensé cuando me enteré fue: "¡¿Cómo estará Silvio?!", pues, por boca del mismo Vicente y por todos los textos, libros, entrevistas, documentales y demás materiales, donde se mencionaba la relación de ustedes, conocía que entre tú y Vicente siempre hubo una hermandad infinita e inefable. "Mucho antes de la aparecer la guitarra", incluso.

Para mí fue como un balazo directamente al alma. Pues además de ser un ser humano y un artista profundamente admirado, Vicente fué un Amigo, un Hermano Mayor, un Padre de mi canto. Lo conocí cuando -sin enterarme que ya había salido de la adolescencia- andaba estrenándome en "los veintitantos", comenzando a cantar de verdad, tomándomelo en serio. Pero aún con una mirada del mundo tan pueril, que hoy me da una profunda vergüenza.

Aún así, Vicente, ese Vicente sabio que siempre fue, creyó en mi mirada idealista, creyó en mis palabras, creyó en mi canto... y me enseñó. Me enseñó que "no es fácil", pero que hay que lanzarse. Y hay que "creer".

Su abrazo lo siento hasta el día de hoy, aunque lo sentí presencialmente el año 2012 por última vez, en Lima. Su abrazo tiene tanto ancho y tanta fuerza, que calculo que lo seguiré sintiendo por varias décadas aún. Pero sigo sintiendo también, desde estas últimas horas, el dolor del balazo en el alma.

Por eso y con profunda solidaridad, Silvio querido... te abrazo con todos los colores... y lo siento profúndamente.

Abrazos también a todas y todos quienes hacen de este espacio, un espacio precioso, también.

arturo dijo...

Para quienes no somos artistas el arte también nos sirve para hacernos buenas personas, queda demostrado con el cariño que logramos sentir por los creadores y como nos afecta cuando uno de ellos tiene que partir, me paso.con Gato Alquinta, con Manss y ahora me pasa con Vicente.

A Vicente.lo vi por primera y unica vez en el concierto de homenaje al Che en el Estadio Nacional, aunque desde mucho antes conocia su obra. Un año, que ya no recuerdo, llego a mis manos un casete con una presentación suya, creo que fue en el mítico Café del Cerro del Barrio Bellavista aqui en Santiago.

Cuando un artista querido, como Vicente, deja este plano no me conformo con que quede su obra, aunque me hace feliz que en dimensiones más altas, esas que aun no percibimos los humanos, la musica también les sirve para decir te quiero.

Buen retorno, Vicente.

Raúl Hernández Flor dijo...

Silvio, luego de varios dias desconectado de esta nuestra casa y luego de lo ocurrido con ETECSA acá en Las Tunas, vengo a ofrecer mis mas sentidas condolencias para la familia de Vicente Feliu y para ti.
Vicente ya partio hacia la inmortalidad! Aqui estaremos extrañandole siempre!
Un fuerte abrazo para ti y un saludo para todos los que aqui hemos encontrado casa común!

Stella dijo...

Ese era Vicente. Y será cuando vuelva, siempre inmenso y lleno de honduras, amorosamente.
Ojalá pudiera confortarlos de algún modo.
En un rato se reencontrarán.
Mientras tanto queda hacer de tripas corazón y continuar honrándolo viviendo y luchando, no nos dan tregua.

Bayardo dijo...

He de confesar que conocí por primera vez las canciones de Vicente Feliu en la previa del último concierto que dio Silvio en Nicaragua, creo que en el 2008 me maravillo su canción créeme y así de a poco comencé a buscar su obra y descubrir su amor a Nicaragua y su vinculación con la revolución sandinistas, la que reafirma en esta entrevista. Desde Nicaragua va mis respeto a esa gran persona, y mis condolencias a sus amigos y amigas. Gloria a Vicente Feliu.

Alba Peralta M. dijo...

Silvio, un abrazo reiterando mis condolencias.
Muchas gracias por acercarnos más a Vicente, hombre afortunado que vivió los inicios de la revolución y conoció tantas personalidades de la cultura no solo cubana sino internacional.
Sus amistades y familiares también fueron afortunados al poder compartir con él y disfrutarlo.
No dejo de mirar la foto que está con Silvio en Angola y la que están ellos dos con Fidel.
Además de estar ahora con tu hermano querido y otros trovadores, estarás siempre en nuestros corazones.
La bombilla verde siempre alumbrará para tí, Tinto.
Gracias siempre.
Gracias por ser un cubano siempre fiel.

Patricia Moda dijo...

Salve Vicente!

😘😘😘😘

Pedro Alfaro dijo...

"Créeme" que no podemos creer la partida de Vicente, toda nuestra solidaridad a su familia y al pueblo de Cuba de parte de un chileno que los quiere y admira.

Norma trv dijo...

Muchas vidas y no una vivió Vicente, y las vivió a plenitud, con intensidad y alegría, con compromiso y amor, haciendo lo que quiso hacer, libre y claro, como viven los valientes! La muerte, que nos llevará a todos sin excepción, golpeó traicionera y anticipadamente, pero no se atrevió a enfrentar el azul desafiante de su mirada ni a irrespetarlo o hacerlo sufrir. Lo abrazó en un segundo y en un flashazo lo transportó a la luz que envuelve a los buenos. Desde su estrella, Vicente sigue y seguirá inspirando y acompañando. Abrazo inmenso que quiere consolar para su amante esposa, mi querida Aurora, su amada hija Feliusa, para toda su familia y amigos y para ti, Silvio, su hermano del alma. Lo extrañaremos cada día.

Unknown dijo...

Llego'con Pacheco el Ortopédico y me dijo: me dieron unos golpes en Bolivia;tenía,si mal no recuerdo,dos fracturas costales;fue en el Hosp. Naval por los años 80.Parecia que no sufria.R3.

Mike Palomino dijo...

Gracias, Dios mío, por haber sido refracatario a todo, todas las cosas, situaciones y personas, que se citan en este artículo.
Qué limpio estoy, carajo!

silvio dijo...

Enviado por Estrella Díaz

PARA RECORDAR SIEMPRE TU VOZ Y TU GUITARRA DONDE QUIERA QUE ANDES, TINTO QUERIDO

“NO HAY MAL QUE POR BIEN NO VENGA”

Por: Estrella Díaz

Con esta entrevista dedicada al reconocido trovador cubano Vicente Feliú, sumamos la voz de una de las personalidades más cercanas y queridas por nuestro Centro Pablo y quien durante dos décadas han participado activamente en los diversos proyectos culturales de la institución.

Comenzamos esta sección con el diálogo sostenido, vía electrónica, con Vicente Feliú, intentando saber ¿qué de positivo? y ¿qué de negativo? te ha traído el aislamiento que vivimos hoy todos.

“De positivo, en general todo. Aunque Aurora ha seguido trabajando casi como de costumbre, hemos compartido un poco más el hogar, lo cual es siempre agradable. Habitualmente el mayor peso del trabajo sistemático lo realizo en casa, por lo que no ha habido cambios sustanciales salvo los recitales mensuales en el Memorial de la Denuncia, que se han pospuesto para cuando se pueda. La publicación de algunas canciones nuevas y viejas en las redes sociales me ha descubierto una perspectiva interesante en cuanto a la comunicación, y me ha abierto un camino a seguir.

De negativo, nada, más que todo por un problema de principios. “No hay mal que por bien no venga”.

Desde la creación, ¿hay algún resultado concreto concebido durante el necesario recogimiento?

“Ordenando papeles y gavetas han aparecido varias canciones que creía perdidas, algún que otro texto que ha encontrado su música y cualquier cantidad de otras cosas, conservables algunas y desechables muchas, lo cual me ha dejado espacio para menesteres mejores. Ciertos documentos me sugirieron escribir algunas memorias que pueden resultar útiles para la gente, y en eso estoy”.

En el ya lejano 1978 vio la luz Créeme, tu primer trabajo discográfico. Cuando lo vuelves a escuchar, 42 años después, ¿cuánto sientes que ha cambiado (o no) tu propuesta poética?

“Creo que se ha acrecentado. Con los años uno se pone más recalcitrante en las esencias, aunque también reconozca con otra flexibilidad asuntos que en otro tiempo habría descartado. Cuando se es genuino, claro”.

En tu larga carrera, has compartido escenario con relevantes músicos de Cuba y también de otros países como España, Argentina, Chile, Estados Unidos, Uruguay y Nicaragua, entre otros. ¿Cuáles han sido los aportes mayores que has recibido de esos intercambios, de esas influencias?

“Todas las personas y hechos importantes que han encontrado sitio en mí, han dejado alguna huella. El camino me ha convencido de que el canto al cual me debo y los compañeros de ruta que me acompañan son tan necesarios para la vida como la memoria del tiempo que vivimos”.

Te has presentado en múltiples ocasiones en el Centro Pablo: recuerdo cuando cumpliste los sesenta años realizaste un íntimo concierto A guitarra limpia, y diez años después en el 2017, al arribar a los setenta, regalaste otro A guitarra… titulado Créeme que seguimos siguiendo. ¿Cómo valoras el trabajo de la institución que ya sobrepasa las dos décadas de labor sostenida en la promoción de la Nueva Trova, movimiento al que perteneces desde su creación misma?

“Sin el Centro Pablo la canción trovadoresca en Cuba no hubiera crecido como lo ha hecho hasta hoy. Luego de la desaparición del Movimiento de la Nueva Trova –ojo que no su esencia– los cantores más jóvenes de nuestro país hallaron un hogar fundamental, y también los de varias generaciones, en la casona del Patio de las Yagrumas de la calle Muralla, en La Habana Vieja. Por otra parte, los vínculos culturales con cantores y cantoras de Argentina abrieron un intercambio de gran riqueza.

El tiempo y la memoria serán los encargados de decir todo el alcance del impulso que Víctor Casaus y María Santucho –inspiradores y sostenedores del centro– dieron a la canción trovadoresca cubana (y latinoamericana) en el Siglo XXI.”

Luis Ramón dijo...

Este 2021 nos está dejando huérfanos del amor,de la verdad y de la solidaridad...

Lola dijo...

Silvio, un fuerte abrazo para ti

julieta gitana dijo...

Que tristeza esta partida repentina. Te abrazo, querido Silvio. Saludos a todos.

Unknown dijo...

Si ese Palomino existe sin dudas acabara’en el infierno,que clase de HP!.R3.

demexicoalapatagonia dijo...

Creemos en tu canto, en tu militancia a prueba de balas; creemos en tu fuego, en tus "Auroras" y en tu ejemplo; creemos en tu trashumancia por el "Canto de todos", en tu Fidel-idad y en tu trinchera; creemos en tu valor y en tu indeclinable presencia. Y como creemos firmemente en vos, estaréis en canción y en ejemplo de canción Necesaria siempre ... Porque no fuiste de nadie, y sois de todos.
https://www.instagram.com/tv/CXn8vafgsJ8/?utm_medium=share_sheet

Giordan Rodriguez Milanes dijo...

Escribió las canciones más extremas que yo haya escuchado nunca, en las que era bala feroz, rompía monte encuero y llegaba a pedir que hundieran las manos en sus entrañas y experimentaran con sus vísceras. Cantando y prodigando generosamente su existencia, mi amigo Vicente se convirtió en una suerte de holocausto cotidiano que tributaba a un luminoso porvenir.

Se sabe que la vida no siempre premia la virtud con la justicia. Pero si este amigo tiene fama de algo entre sus compañeros –además de trovador irreductible– es de nobleza humana. Y es que todos sabemos que él siempre ha sido el más dispuesto al sacrificio, verdadero cantor de barricadas, tantas veces no bien gratificado.


Silvio Rodríguez, aquí mismo, en SC.

Ante un hombre como Vicente, la opinión de un detrito como Palomino solo puede aspirar a CH4 para contribuir a joder el Medio Ambiente.

Julián Lichene dijo...

Lo lamento Silvio.
Fuerte abrazo.

Orlando Landrove dijo...

Muchas gracias por ponernos a recordar a Vicente a través de esta entrada. Principalmente para los más jóvenes, recordar y en la mayoría de las ocasiones conocer lo contado es algo muy necesario. Al menos así lo pienso.

Que bueno irse con tantas cosas hechas. Sin valor jamás hubiera sido posible. Adiós Vicente.

Raúl Requena dijo...

Que fuerza tienes Silvio,para ante una situación así seguir publicando en tu blog,Gracias por existir, eres único

Elizabeth dijo...

Cuánta nostalgia con la perdida de Vicente, terrible este año, cuántas perdidas. Un abrazo Silvio, mi más sentido pésame. Saludos a todos

Sender Escobar dijo...

Mi padrastro (tambien papá) fue su vecino por muchos años en Alamar. Siempre recuerda su amabilidad, contaba que en la dura etapa del Periodo Especial cuando Vicente salía en su carro hacia La Habana, siempre recogía personas en la parada para adelantarlos, todo lo contrario a cierto funcionario político de importancia que vivía en la misma zona y no miraba ni para los costados cuando salía en su flamante carro asignado.
Recuerda mi papá que un día lo visitó con un primo español de su entonces esposa que quería conocer a algún trovador cubano. Vicente los recibió con mucha amabilidad y estuvieron conversado por horas. En una de las paredes de la casa estaba escrito con pintura: silvio.

Mi papá le preguntó por eso. Le contó que el poeta llegó un día que estaban pintando y dibujó su nombre en la pared y él se sentía incapaz de tapar el nombre de su amigo.

#porsiemprevicente

❤️🎸🎼

Lebis dijo...

Palomino, mi abuela llamana así, Palomino, a la mierda que queda en el calzon o el culero de un culo mal limpiado.
Mi abuela te definió como sí te conociera....
Que cosas...

JRGL dijo...

Soy José Rafael, pero no me sale mi cWuenta de Google. Excelente entrada. La disfruté de principio a fin. Que en gloria estés querido Tinto!

Ariel dijo...

Descubrí a Vicente cuando vino con Santi a Argentina en 1986. Me atravesó su canción “Mira como te quiero, mujer”. Tanto, que años después pregunté en la lista de la tropa si alguien tenía los acordes (aunque solo miento con la guitarra). Me contestó el propio Vicente a través de Ivette.
Luego vino a nuevamente con Santi Argentina y, también a través de ella, me avisó para que fuera a verlo. Nos abrazamos y le regalé una foto mía.
Más tarde Espe le mostró esa misma foto, y Vicente no sólo le dijo que ya la tenía, sino que le pidió que me pasara su dirección de correo, para tener el contacto directo.
Yo no le escribí, no sabía qué decirle, entonces fue él el que me escribió a mi. Así era él.
Así establecimos un contacto que nunca se cortó.
Años más tarde me avisó que volvía a Argentina, y allí fui a verle. Al reconocerme no sólo nos fundimos en un nuevo abrazo, sino que fue él el que pedía que le hicieran una foto conmigo. Así era él. Val me sacó la foto, Alida vio que sacaba una tarjeta de YPF y me preguntó, Vivían ya me había identificado como segundacitero mientras esperábamos para entrar al camarín. Y también estaban Martín, Bárbara y varios más. Gracias a él nos reconocimos, no nos habíamos visto nunca antes, pero ya éramos hermanos.
Así nos abrazamos cada vez que coincidimos.
Así era él, un indispensable… Descubrí a Vicente cuando vino con Santi a Argentina en 1986. Me atravesó su canción “Mira como te quiero, mujer”. Tanto, que años después pregunté en la lista de la tropa si alguien tenía los acordes (aunque solo miento con la guitarra). Me contestó el propio Vicente a través de Ivette.
Luego vino a nuevamente con Santi Argentina y, también a través de ella, me avisó para que fuera a verlo. Nos abrazamos y le regalé una foto mía.
Más tarde Espe le mostró esa misma foto, y Vicente no sólo le dijo que ya la tenía, sino que le pidió que me pasara su dirección de correo, para tener el contacto directo.
Yo no le escribí, no sabía qué decirle, entonces fue él el que me escribió a mi. Así era él.
Así establecimos un contacto que nunca se cortó.
Años más tarde me avisó que volvía a Argentina, y allí fui a verle. Al reconocerme no sólo nos fundimos en un nuevo abrazo, sino que fue él el que pedía que le hicieran una foto conmigo. Así era él. Val me sacó la foto, Alida vio que sacaba una tarjeta de YPF y me preguntó, Vivían ya me había identificado como segundacitero mientras esperábamos para entrar al camarín. Y también estaban Martín, Bárbara y varios más. Gracias a él nos reconocimos, no nos habíamos visto nunca antes, pero ya éramos hermanos.
Así nos abrazamos cada vez que coincidimos.
Así era él, un indispensable…

Saludos,
Ariel

Gloria Alicia León Martínez dijo...

Qué triste caray, qué golpe bajo tan duro para la cultura y para la revolución. Qué pasa con este sector, están emigrando los buenos a otros confines.
Lo siento tanto...

Alba Peralta M. dijo...

Sender (15:24), qué belleza de cuento corto nos has traído.
Gracias, me encantó, ahí sí había amistad y fidelidad.

Tinto fue tan consecuente y fiel en lo que hacía, que trascendió en pleno ejercicio de su vocación, con el fusil en la mano, que en este caso fue su canto y su guitarra.
Mucho amor y luz para él!!!


Palomino (13:07) si quizo decir "refractario", mejor desaparezca de aquí y váyase "limpio" pero de bien, hacia el infierno.
Desalmado!!!

Mimí dijo...

Un gran abrazo, Silvio!

quique castro dijo...

Querido Silvio...lamento la perdida del amigo Vicente Feliu ...me sorprendio su pronta partida ....no de qué está pasando ...pero las partidas as la estrellas se van multiplicando ...lamento la partida de tu casihermano ,el Tinto !gloria y descanso para el trovador! Lo lamento profundamente !!abrazos

Lien dijo...

....................

Lien dijo...

............

Claudia de Chile dijo...

Esta entrevista es muy valiosa, es una sintesis de la hisyoria de la trova. ademas de la historia de un autentico trovador, al cual se cumple por conpleto el "Yo me muero como viví "
Una Ovación para Vicente y ya extraño su "abrazos patoel mundo".

Benito de la Fuente Escalona dijo...

Gracias por poner la entrevista.
Tenía una idea de las actividades de Vicente y de su carácter 'guerrero' en general, pero no con ese detalle.

Omar Fontes dijo...

De Cuba en Resumen Latinoamericano y del Tercer Mundo:

Silvio Rodríguez: Mi hermano Vicente

Ante la noticia de la partida física del trovador cubano Vicente Feliú, compartimos con nuestros lectores un artículo publicado en el blog de Silvio Rodríguez «Segunda Cita» el 11 de noviembre de 2017, que creemos que es oportuno volver a leer:

Algo que siempre recuerdo son los ojos azules de Elsa Miranda, muy abiertos y fijos en los míos, apretándome los dos brazos y diciéndome “¡Tráemelo vivo!”, en vísperas de Angola. Pero desde muchos años antes su hijo Vicente era uno de los estudiantes más aguerridos de la secundaria. De todos nosotros era el que parecía un héroe y, a la vez, el más elegante, el único que casi siempre andaba en saco. Nunca pude explicarme cómo conseguía aquel balance entre muchacho de clase media y feroz combatiente.

Yo con dieciséis y él con quince, nos gustaban las mismas músicas, las mismas películas y a veces las mismas compañeras (cosa que nunca nos llevó a disgustos). Creo que la segunda vez que bebí en mi vida fue una noche que fuimos a un bar a escuchar a Los Astros, de Raúl Gómez, que por entonces tenían un número pegado en la radio. Después de un par de cubalibres salimos a coger la ruta 27 frente a Maternidad de Línea, y ya en su casa de la calle Neptuno tuve que subirlo en hombros por las empinadas escaleras. No se me olvida que Esther y Tata, sus inmortales tías, me dijeron horrores por llevarlo en semejante estado.

Cuando me desmovilicé de las FAR y volví a verlo, se debatía entre hacer canciones y graduarse de profesor de Física. Pero la bohemia acabó seduciéndolo (era demasiado tentadora) y aquel muchacho con portafolios se convirtió en el jipi más sangriento de su generación. Escribió las canciones más extremas que yo haya escuchado nunca, en las que era bala feroz, rompía monte encuero y llegaba a pedir que hundieran las manos en sus entrañas y experimentaran con sus vísceras. Cantando y prodigando generosamente su existencia, mi amigo Vicente se convirtió en una suerte de holocausto cotidiano que tributaba a un luminoso porvenir.

Se sabe que la vida no siempre premia la virtud con la justicia. Pero si este amigo tiene fama de algo entre sus compañeros –además de trovador irreductible– es de nobleza humana. Y es que todos sabemos que él siempre ha sido el más dispuesto al sacrificio, verdadero cantor de barricadas, tantas veces no bien gratificado.

Para decir exactamente eso son estas palabras y esta entrada, para decir que, aunque en ocasiones falten honores, medallas y reconocimientos, sin duda existen dignidades ejemplares mucho más necesarias y ciertas que las que son de humo.

Felicidades en tus nobles 70, Vicente Feliú Miranda.

Tomado de Segunda Cita

https://www.cubaenresumen.org/2021/12/silvio-rodriguez-mi-hermano-vicente/

malayibiri dijo...

Días tristes en verdad. Año triste.
Mis más sentidas condolencias a familiares y amigos.

Vicente Feliú es de las personas de las que definitivamente no me gusta decir “descanse en paz”, por todo lo que seguimos necesitando lo que nos dio en su vida.

AQUÍ CUBA! WALTER FRÍAS dijo...

Qué decir de o sobre VF que no se haya dicho? Cómo decir ASÍ ERA ÉL?
Hace 10 años en el marco de la jornada del educador una compañera de trabajo lo contactó a través de su padre para que participara en nuestra actividad. VF llegó al lado hora acordada por sus medios acompañado de Pepe Ordás y Arsenio Rodríguez. Nos regalaron un mínimo concierto al tres manos. No faltó CRÉEME!!! Fue la oportunidad única de conocerlo personalmente!!! Y CRÉEME que sus canciones, su diálogo,su honestidad,sencillez y entrega fueron suficientes para seguirlo siguiendo cómo dice Victoriano.

Mirtha dijo...

Cuando leí lo expresado por Mike Palomino,mi primera reacción fue, porqué publica Silvio semejante comentario en medio de tanto dolor ? Y me doy cuenta q es el detalle que faltaba para caracterizar la bajeza moral de este personaje.. ojalá no aparezca más en esta casa..!!

Victoria dijo...

Querido Silvio, maravillosa la entrevista a Vicente. Nos instruye como va recorriendo un camino de consecuencia, avanzando en lo que se vivía en el continente, sus inicios como trovador y sus primeras relaciones que lo marcaron, como su amistad con Víctor Jara y otros cantantes latinoamericanos. Hasta los golpes que recibió en Bolivia fueron forjando a ese gran hombre y amigo.
Hoy el pueblo cubano está de duelo, y todos abrazamos el mismo dolor.
Hasta siempre Vicente.

Victoria dijo...

Para Vicente

Se ha muerto un amigo,
Vicente era su nombre,
generoso con su música,
comprometido con su guitarra,
al igual que su fusil.

Quizás el instrumento se guardará,
en un armario, o en un atril,
donde no vuelvan esas manos
a tocarlo.

Sin embargo,
la melodía quedará intacta,
donde el viento susurra,
suavemente,
“créeme”.

sergiojoel dijo...

Silvio:
Recuerdos de Vicente Feliú (I)
Durante algunos años compartí con Santiago Feliu ( el otro Santiago) cuando este trabajaba como funcionario de la embajada de Cuba en Guatemala, en las conversaciones que tuvimos conocimos de sus hermanos Vicente y Santiaguito.
De sus canciones tuve conocimiento desde hace muchos años y también de su posición diáfana y comprometida con las mejores causas.
Entre otras recuerdo su desvelo porque se lograra la libertad de la amiga de Cuba Ana Belén, puertorriqueña presa en estados unidos por defender a Cuba.
Esta es una carta que le envió Feliú en 2016 al Presidente Obama pidiéndole la libertad de Ana Belen:
La Habana, Cuba, 12 de mayo de 2016
Señor Barack Hussein Obama.
Ante todo, mis respetos.
Las grandes diferencias entre los Estados Unidos de América, país del cual hoy es Ud. Presidente, y el mío, Cuba, tienen antiguas y profundas raíces desde sus propios orígenes como naciones. También las semejanzas. Son causas reales que saltan a la vista y por las cuales cada país ha intentado siempre conocer de los planes del otro, por un problema elemental de seguridad.
Es Usted el primer Presidente de su país que logra establecer relaciones con Cuba desde 1959, teniendo claro y expresando públicamente que no somos una amenaza para la seguridad nacional de los Estados Unidos. El concepto de que podemos asumir una vecindad coherente, colaboradora y participativa en muchos aspectos comunes, y convivir con los desacuerdos, refuerzan el deshielo que ambos pueblos sin dudas desean y aplauden.
Por estas razones me decido a solicitarle que tenga en cuenta a una persona que pensó y actuó de acuerdo a su conciencia sin mediar chantaje, remuneraciones económicas ni implicaciones para la seguridad nacional de los Estrados Unidos. Me refiero a Ana Belén Montes, ex agente de la DIA, encarcelada por espionaje a favor de Cuba desde hace 14 años, y señalarle un fragmento de su alegato de defensa que le incluyo aunque seguramente Ud. conoce:
“Mi mayor deseo sería ver que surja una relación amistosa entre Estados Unidos y Cuba. Espero que mi caso, en alguna manera, estimule a nuestro gobierno para que abandone su hostilidad en relación con Cuba y trabaje conjuntamente con La Habana, imbuido de un espíritu de tolerancia, respeto mutuo y entendimiento.
“Hoy vemos más claro que nunca que la intolerancia y el odio –por individuos o gobiernos- lo único que disemina es dolor y sufrimiento. Espero que Estados Unidos desarrolle una política con Cuba fundamentada en el amor al vecino, una política que reconozca que Cuba, como cualquier otra nación, quiere ser tratada con dignidad y no con desprecio.”
Saludos
Sergio

sergiojoel dijo...

Silvio:
Recuerdos de Vicente Feliú (II)
Esas palabras de Ana Belén Motes tienen gran y hermosa coincidencia con las suyas al finalizar su discurso en el Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso el pasado 22 de marzo de 2016: “La historia de Estados Unidos y Cuba abarca revolución y conflicto; lucha y sacrificio; retribución y ahora reconciliación. Ha llegado el momento de que dejemos atrás el pasado. Ha llegado el momento de que juntos miremos hacia el futuro –un futuro de esperanza.
Y no será fácil, y habrá reveses. Tomará tiempo. Pero mi visita aquí a Cuba renueva mi esperanza y mi confianza en lo que hará el pueblo cubano. Podemos hacer este viaje como amigos, y como vecinos, y como familia – juntos. Sí se puede. Muchas gracias.”
Es por todo esto, señor Obama, además de por su condición de Premio Nobel de la Paz, que le solicito tenga en cuenta la posibilidad de indulto para esta mujer que quiso siempre que nuestros dos países vivieran en paz, sin dañarnos el uno al otro.
Quedo con un saludo y deseándole éxitos en su gestión.
Vicente Feliú Miranda
Trovador Cubano
En abril del 2010 el día que Silvio ( su otro hermano) presentaba en Casa de Las Américas su producción Segunda Cita, yo pasaba por el lugar y ante el numeroso grupo de personas que se encontraban allí disfrutando de Silvio penetro en la Casa en el momento que todo había terminado y solamente tuve tiempo de comprar un CD de Segunda Cita y al ver a Feliú le pregunto por Silvio para que dedicara a mi hijo el CD y me dice de manera muy bonachona como buen cubano que era y es, que si quería ver a Silvio que saliera rápido pues ya estaba en su auto listo para retirarse y así lo hice y logre alcanzarlo y me dedicó el CD para mi hijo.
Copia de la sencilla dedicatoria la guardo y siempre agradeceré a Vicente por su ayuda.
Hace unos dos años y medio me encontré a Vicente en el Memorial “José Martí” lo aborde y le pedí me autorizara a utilizar una canción que él había dedicado al Che para algo que estaba escribiendo y su respuesta no se hizo esperar, como buen Guevariano que siempre fue me dijo que no tenía que consultarle que me autorizaba, y así lo hice “Una canción necesaria, al Che no in memoriam”
Gracias de nuevo Feliú.
Para Santiago y toda la familia mis condolencias por la repentina muerte de este gran promotor cultural, hombre de principios y trovador que es y será Vicente Feliú.
Silvio: Cuando un amigo de va queda un espacio vacío que no lo puede llenar la llegada de otro amigo”, todos sabemos cuanto te duele lo que le paso a tu entrañable hermano.
Saludos
Sergio

silvio dijo...

VICENTE
por Michel Hernández / https://oncubanews.com/cuba/vicente/

Es una de esas muertes que se alejan de cualquier forma de pensamiento racional. Tomó su guitarra, interpretó algunos acordes y se dispuso a cantar La Bayamesa. De repente cae fulminado por un un infarto masivo. No hubo oportunidad de maniobrar, de salvarle la vida. Todo con un alto nivel simbólico. La canción, su guitarra y su último emplazamiento encima del escenario. Vicente parecía haber sido el propio director de su última obra, de su última puesta, de su último concierto. Si no se tratara de un hecho tan triste para la cultura cubana, podríamos decir que Vicente a los 74 años eligió su propia muerte. Que nos dejó de la mejor forma que hubiera querido irse este fundador.

Con un amigo comentaba ayer que la muerte de Vicente Feliú junto a las recientes pérdidas de otros influyentes artistas e intelectuales va dejando un vacío en la cultura cubana relacionado con la influencia que ejercieron en sus respectivos campos desde una perspectiva marcada siempre por la ética.

Esa idea resume en gran medida la obra de Vicente. Fue un músico que junto a compañeros de generación como Silvio, Pablo, Nicola, entre otros, sentó las primeras bases de un movimiento del que todavía falta mucho por decir en la historia cultural cubana. Su obra alcanzó un importante anclaje durante los años 70 y 80 en el sur latinoamericano, donde su vida y sus canciones andaban sueltas durante aquellos años.

Vicente se convenció desde temprano que tenía una responsabilidad histórica con lo que fundó, siendo todavía aún muy joven, y defendió ese sentido de la creación con una obra con un matiz político arraigado en los primeros años de la revolución cubana. No hubo oportunismos en su carrera, ni poses. Vicente cantaba lo que creía y defendía sus ideas en una escena tan amplia en su diversidad estética y de pensamientos políticos, como lo es la trova cubana. En ese ámbito se ganó el respeto por sus canciones y por las afinidades humanas que estableció con músicos, incluso con los que no compartía las mismas visiones sobre el significado que cada uno le otorgaba a la canción de autor y a la posición de un trovador ante la sociedad.

En ocasiones, quizá por las propias barreras creadas por las exigencias políticas o conflictos sociales que han separado o dividido a los cubanos, tomó distancia de algunos de sus colegas pero nunca se alejó de la admiración que les profesó, algo que indudablemente era correspondido aunque la sociedad, la vida o la fe los hayan puesto a kilómetros de distancia.

La obra de Vicente es poco conocida entre los cubanos. A la hora de su muerte casi todos se remitieron a Créeme, ese tema antológico de la Nueva Trova perteneciente al disco homónimo. El tema, en verdad, es una de esas canciones que refleja al calco la personalidad de su autor. Ahí se une trasfondo poético con el ideal que soñó. Desde ahí parece que siempre nos mirara Vicente. Aunque Vicente es más que Créeme.

En su obra descansan otros discos como Guevarianas, No sé quedarme, Aurora, El colibrí. Pero entre sus más de 30 discos entre álbumes en solitario y colaboraciones aparece Ansias del alba, ese magistral fonograma que grabó e interpretó junto a su hermano Santiago Feliú. En ese disco se unieron ambos desde un pensamiento tan similar como diverso, hasta el dolor en muchas ocasiones, pero con la idea de rendir homenaje al Ejército Zapatista y sobre todo a una condición humana observada como un terreno fértil para el intercambio, la comprensión y el renacimiento creativo y espiritual.

silvio dijo...

Vicente.. 2 y fin

De Vicente algunos medios, periodistas o políticos han querido resaltar solamente su obra, su fe o su canción más divulgada. Pero fue un hombre que no escapó a esa bohemia de la trova ni a esos avatares lúcidos que nacen cuando uno se pierde en la niebla de un bar o de un trago con sus colegas. Si se obvia ese perfil y sobre todo su entrega a esa aventura mayor que es la vida, se estaría convirtiendo su carrera en una habitación escueta.

Porque Vicente, eso sí, dio lustre al significado que le concedió al hecho de ser un trovador y haber sido parte de un movimiento que originó una aventura estética y ética en la cultura cubana de la que este país aún tiene mucho que aprender, especialmente cuando el vacío que dejan artistas como Vicente y otros intelectuales está siendo ocupado muchas veces por un pensamiento que adolece de la luz que en su momento le imprimieron hombres que desde el debate, el respeto y el quehacer intelectual no renunciaron a nada. Vicente como Santi hoy siguen mostrando que la trova cubana es tan diversa y oportuna como aquellas ansias del alba, de las que aún muchos padecen (padecemos) la nostalgia.

EFE dijo...

López Obrador lamenta la muerte del trovador cubano Vicente Feliú
Dic. 18, 2021 11:17 AM PT

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, lamentó este sábado la muerte del músico y cantautor cubano, Vicente Feliú, quien falleció a los 74 años víctima de un infarto.

“No solo la formación política nos vuelve conscientes y comprometidos con las causas justas, también el arte, la literatura y la música. Por eso voy a extrañar al maestro Vicente Feliú. Escuchen esta canción de su autoría, cantada con Silvio Rodríguez”, escribió el mandatario en su cuenta oficial de Twitter.

El mandatario acompañó su mensaje con un video en el que se puede ver a Vicente Feliú acompañado de Silvio Rodríguez, interpretando “Créeme”, uno de los temas emblemáticos del fallecido trovador cubano.

En la últimas horas, la hija de Feliú, Aurora de los Andes, confirmó el fallecimiento de su padre, quien murió de un infarto mientras ensayaba el tema “La Bayamesa”, una versión contemporánea de la canción romántica y patriótica homónima entonada por primera vez en 1851.

Feliú es reconocido como uno de los músicos que protagonizaron la corriente llamada Nueva Trova, emparentada con la canción de protesta latinoamericana.

Su tema antológico “Créeme” fue uno de los tantos que formaron parte de su carrera, que incluyó la composición de música para obras de teatro y televisión y una amplia discografía: “Créeme” (1978), “No sé quedarme” (1985), “Arte poética” (1990), “Aurora” (1995), “Ansias del alba” (1997, con su hermano Santiago), “Guevarianas” (1997) y “Colibrí" (2000).

Vicente Feliú compartió escenario, entre otros, con Luis Eduardo Aute (España), León Gieco y Mercedes Sosa(Argentina), Inti Illimani (Chile) y Daniel Viglietti (Uruguay).

A principios de 1968 Feliu fundó el movimiento de la Nueva Trova junto a Silvio Rodríguez, Pablo Milanés, Noel Nicola, Eduardo Ramos, Augusto Blanca, Sara González y otros músicos.

Dicho movimiento rescató el sonido de la trova tradicional cubana con una dosis de política al ser cronista de grandes acontecimientos en el país caribeño y América Latina.

https://www.latimes.com/espanol/mexico/articulo/2021-12-18/lopez-obrador-lamenta-la-muerte-del-trovador-cubano-vicente-feliu

Omar Fontes dijo...

Si me permiten, del Fb del campesino pinareño Adrian Dupeiron:

Compañero presidente en nombre de los campesinos de Pinar del rio me dirijo a usted con el objetivo de informarle la inconformidad que existe hoy en los campesinos tabacaleros de Pinar del rio y del país. Meses antes se nos informó que se nos pagaría un por ciento de las ventas en mlc a los campesinos y que dicho porciento era del 3.6 para el tabaco tapado y las Vegas finas de primera con el cual el grupo Tabacuba comenzó a trabajar y ya se han realizado varios pagos a muchos campesinos y cooperativas. Hoy la empresa Tabacalera del municipio de San Juan y Martínez está cerca de los 2 millones de mlc pagados a los campesinos. A raíz del cambio del presidente del grupo Tabacuba y al asumir dicho lugar el compañero Murillo el mismo decidió parar el pago de este mlc a los campesinos con la simple justificación de que era demasiado dinero para los campesinos y que eso estaba mal y bajar dicho por ciento al 1.8. Esto ha desatado un estado de malestar bastante elevado en el campesinado porque consideramos injusto que se cambie la forma de pago así tan brusca y repentinamente por la simple decisión de un hombre. Al parecer el campesino nunca va a tener derecho a disfrutar de los beneficios de su trabajo. Hoy los campesinos tabacaleros pensamos que si hubo alguna equibocación en la forma de pago esta no es la hora de subsanar el error si ya se le ha pagado a muchos de la forma inicial que se planteó y creemos que todos somos iguales. Compañero presidente dejo a su justa comprensión y análisis este tema no sin antes decirle que los campesinos tabacaleros estamos completamente comprometidos con la revolución pero nunca estaremos de acuerdo con las injusticias.
Atentamente.
Adrian Dupeiron Porra campesino de la CCS Rupertino Ajete. Del municipio de San Juan y Martinez

Jorgebraulio dijo...

ELEGÍA A LA INCOHERENCIA

(Vicente Feliú)
Camino paso a paso toda la casa
hago como que hago el amor detrás de toda puerta.
Me hundo pulgada tras pulgada
en el recinto oscuro y frío del ego.
(i Ah! Las mariposas vuelan y viven sobre ninguna flor
y sobre todas las flores),
En Polonia se emborracha a los cuerpos represivos
para que choquen contra los nuevos vientos del Oeste.
Llevamos nueve días flotando sobre las cervezas
de estas fiestas de julio.
(Prácticamente las auras son las encargadas
de terminar todo este arduo trabajo.
Así no quedarán olores por el camino).
Las calles no son más
que cadáveres de transeúntes que alguna vez fueron hombres.
iYo soy un dios parado encima de la cabeza de un alfiler!
(Pero las guitarras son muy difíciles de definir,
no son nítidos los límites con uno mismo).
Ven conmigo. Camina de costado.
No te apoyes sobre mí que los dos nos caemos.
No te acerques a mis manos,
soy derecho pero zurdo de nacimiento.
No me pidas nunca un libro,
Javier Heraud me espera encima de una nube.
Si no te canto ahora mismo esta canción,
ve y mójate la cara.
Si me desnudo en esta sala
quita los muebles que me ahogan.
Si se me rompe alguna cuerda,
enróllala a mi cuello y tira bien fuerte.
Si pierdo pista caminando, por favor,
déjenme dormir en paz.
Si pierdo pista caminando,
déjenme dormir en paz,
Gracias.

(1970)

Carmen dijo...

Sin conectividad suficinete para entrar a SC, con una aplastante tristeza vengo a dejar mi fuerte OVACION!!! a Vicente y el cariño de nuestros guajiros a su familia y a su hermano Silvio.

Miguel Queipo Salvande dijo...

Como todos los imprescindibles Vicente Feliú siempre estará en la luz más diáfana que nos ilumine, en el sonido certero que nos guíe en la muerte que hace que hombre como él sean imperecederos.Un abrazo para toda la familia y amigos por tan grande pérdida.

Rolando dijo...

Que decir ante tanta tristeza?
Un abrazo Silvio.

Mayte Piera dijo...

Qué dolor y qué duro golpe la partida de Vicente.

De repente me vinieron como en una película, los momentos que vivimos junto a él y Aurora en casa de María Tabata, en Madrid, hace unos años. He estado repasando los cientos de fotos que salieron de aquel encuentro y se me encoje el alma pensando en lo injusta e implacable que es la muerte…. En lo vulnerables que somos y en lo absurdo de tantas cosas…

Y me viene también a la cabeza de forma persistente tu canción, Silvio, Causas y Azares… y no puedo evitar sentir un miedo horrible.

Desde aquí mando un abrazo grande a Aurora, a sus amigos y demás seres queridos y en especial a ti, Silvio. Cómo duele perder al amigo...

Benito de la Fuente Escalona dijo...

Jueves 23 próximo, 4:00 PM. Instituto de la Música (calle 15 Esq. F, Vedado). Homenaje póstumo al Tinto.

silvio dijo...

Del FB de José María Vitier:

Cantor incansable de la Patria.
Tu voz seguirá siendo "tabla sobre un mar violento". Tabla de resistencia y salvación. Tu "Créeme" fué un himno y ahora es tu mejor epitafio. Seguiremos creyendo en ti. Hasta la belleza. Hasta la Vida.. Siempre.

TODAVÍA.
No lo imagino conforme en ese estado de descanso eterno, que muchos, con sincero dolor y conmovida intención, piden para su alma. Vicente fue un guerrero incansable . Consecuente y fiel a sus principios. Y no creo que descanse en paz hasta ver cumplidas todas sus utopías. Ese es el mensaje que nos deja su muerte, su vida y su obra. Que hay que seguir. Que queda mucho por crear y sanar. Que no hay derecho al descanso...Todavía.

Resumen Latinoamericano dijo...

Cuba. Créeme cuando te diga que me voy al viento: Nos dejó físicamente Vicente Feliú

TeleSur dijo...

Vicente Feliú. Elegía a la coherencia

Yae dijo...

Que tristeza.. Una pena tremenda...
Un abrazo Silvio.
Hasta Siempre Vicente!

Alberto Montoya Alonso dijo...

EN LA FRENTE DEL FUTURO HOY ESCRIBO VICENTE

Morirse de bruces en el escenario
como un árbol caído
en los brazos del mundo,
morirse agarrado al canto
en la lucha por la vida
como único sentido.

Dejas en tu pueblo un dolor eterno,
un rayo clavado en el pulmón de la guitarra,
dejas cien mil semillas, un millón de sueños
en el sueño de la garganta.
Te vas, amigo, hermano del alma
cuando más nos haces falta.

¿Qué Dios impío te lleva
y te aleja del camino?
¿Ángel o demonio, qué asesino
paró tu corazón de estrella?

Morirse trasteando el futuro,
deletreando la sangre en cada verso,
repitiendo por diez mil veces
como una campana de amor y gloria:
“Créeme cuando te diga…”
“mujer, mira como te quiero”.

Un día naciste en mitad de la sal
y te entregaste a una lucha, a una bandera,
con la tarea más que cumplida hoy te vas
y el universo te eleva sobre las aguas
para hacer con tu ejemplo y con tu canto
un verso de amor eterno en la memoria del mar .

¿Qué Dios impío te lleva
y te aleja del camino?
¿Ángel o demonio, qué asesino
paró tu corazón de estrella?

Roquetas de Mar 17 de diciembre de 2021
Alberto Montoya Alonso

Jessa Greàu Galleguillos dijo...

Hola Silvio, esperando que estés bien, te cuento que hoy en Chile estamos viviendo un proceso electoral complicado.
Si me dijeran “pide un deseo” pediría que ganara el pueblo a través del candidato presidencial Boric, todo el territorio chileno está atento y ansioso ante nuestro destino. Espero que vayan a votar en masa y que NO gane la ultra derecha.
Vota 1 Vota Boric 🌳🌳🌳🌳🌳🌳🌳🌳🌳🌳
Deséanos éxito y suerte 🍀 Silvito por favor.
Se despide Jessamine Galleguillos Olivares, te quiero mucho <3.

Giordan Rodriguez Milanes dijo...

Debe ser duro, para quien no es querido ni por su familia, leer el modo intenso como aquí se quiere a Vicente Feliú.

Anoche en la Casa de la Trova de Manzanillo se homenajeó espontáneamente a Vicente. Aquí, en la cuna del cantor Carlos Puebla, se oficializó el Movimiento de la Nueva Trova -por asuntos de emulación socialista- con un rígido manifiesto, pretendida catequesis de la creación artística revolucionaria.

Cuarenta y nueve años después, Vicente vuelve a romper aquí la rigidez cuando un trovador muy joven y desconocido va al escenario de la sigue los acordes de La Bayamesa de Céspedes, Fornaris y del Castillo, y luego otro bardo, desde su taburete en el público, interpretó Créeme.

Patricia Moda dijo...

Les pongo un enlace a un documental que se hizo en los 60 años de Vicente, muy bueno.

Vicente Feliú: dónde habita el corazón, documental 2007

yamirys valle glez dijo...

💙Créeme 💙
https://m.youtube.com/watch?v=KciNt5B4aMA

💙Historia de la silla💙
https://m.youtube.com/watch?v=Obd3QHjQats

💙Retorna💙
https://m.youtube.com/watch?v=VqS_J0R2Rws

💙siempre tendrás un lugar de los más altos y sagrados de la patria💙

Unknown dijo...

Anoche demore' en dormirme.Recorde' que Vicente llevo'aquel aguaji' a la casa de la playa en Boca Ciega y el y el entonces compañero de Mirian Ramos (no recuerdo el nombre) lo cocinaron;estaba allí casi toda la Nueva Trova.De more en dormirme.R3.

silvio dijo...

Jorge Ruíz

patriaesvirtud dijo...

Buenas tardes.
No se si es esta la entrada para compartir este llamado de alarma que nos hace Daniel García.
Creo qeu es importante que lo hagamos viral

"Sobre el riesgo de mal gestionar la tregua que el SARS-CoV-2 nos ha dado

De entre las tantas cosas en las que sé me he equivocado, está pensar que Omicron no podría tener más inmunoescape que Beta y a la vez ser más transmisible que Delta. Pero este virus no para de asombrarnos.
Cuba vive hoy una situación paradisíaca de la que, estoy muy convencido, nos despertaremos como si fuera por una bofetada. Y da tristeza ver que, en general, no hay conciencia social de lo que nos va a pasar.
Aún sin saber hacer y analizar los modelos matemáticos que nos guían, solo hay que estudiar para ver lo que nos va a pasar, es lo que le está pasando a todos los países donde Omicron ha entrado, y en Cuba va a entrar y se va a transmitir, no hay forma de pararlo.

Desde la ciencia, toca producir las vacunas que necesita Cuba para boostear a todo a el mundo, y ya está hecho. Toca mejorar nuestras vacunas si se demuestra que es necesario, pero hay que ser consciente de lo siguiente, la ciencia no es magia, será muy difícil para nosotros y para cualquier fabricante tener vacunas actualizadas antes de que Omicron se vuelva predominante, es imposible. Hay que aguantar con las vacunas que tenemos y que desarrollamos para la variante original, que han demostrado ser muy muy buenas. También se ha demostrado que con dosis de refuerzo (booster) de esas vacunas originales se logra incrementar la respuesta de anticuerpos como para aguantar el palo de Omicron.
Pero los datos muestran que una vez que se riegue, vamos a tener cientos de miles de casos de Omicron. Debe ser mucho más leve que con la Delta, eso es seguro, gracias a las vacunas y a la inmunidad de los convalescientes vacunados, pero va a ser fuerte de nuevo. No hay hoy ningún dato que sugiera que no va a ser así. Hay que prepararse, social y administrativamente para esto.
Hoy vi una carpa, creo que de circo, en Alamar que tenía una aglomeración de miles de personas. Eso lo veo cada día en algún lugar. ¿Es que no recodarmos que seguimos en pandemia? ¿Por qué se tiene que autorizar este y otras muchas multitudes que se aglomeran por decenas de razones?
Yo estoy a favor de mantener Cuba abierta, pero se necesita control sobre la apertura, sobre todo a nivel local.
El palo que vamos a recibir va a ser muy fuerte, seguro no en muertes como la vez anterior, pero va a haber muertes. Nuestros ancianos necesitan cuidado social. Ellos son vulnerables, incluso vacunados.

Por favor, habla de esto con tus amigos y conocidos. Omicron puede estar ya entre nosotros y no saberlo, limítate de acudir a estas aglomeraciones. Recuerda lo que nos pasó en Matanzas, fue en unas semanas y explotó todo. La ciencia hoy indica que con Omicron hay alta probabilidad de reinfección y por tanto de transmisión creciente, incluso exponencial.
Podemos volver a los miles de casos diarios en semanas. Necesitamos el tiempo para vacunar a Cuba entera de nuevo. Es una movilización logística que lleva su tiempo.
La conducta social y administrativa actual no es sostenible una vez que se riege Omicron. Hay que rectificar. Esta guerra no ha acabado."

Doris dijo...

Buenas tardes

Una de mis canciones favoritas interpretadas por Vicente. Un día le dije que él era el heredero de la Vieja Trova tradicional, porque interpretaba esas canciones como nadie...❤❤❤❤❤

Las amargas verdades de Sindo Garay

https://youtu.be/fruvE2KRSAE

Allí estaremos el jueves para rendirle homenaje

Besos

Unknown dijo...

Si,Jorge,fue un gran día y una gran noche porque todos dormimos alli'...ya no están Alipio,Guille,Noel y Vicente...pero los seguimos queriendo.R3.

Rubén Iglesias dijo...

Hoy me confieso ante SC, me leí la entrada con la más profundas de las calmas, letra a letra, palabra a palabra. Excelente entrevista.
Luego me fuí a buscar el video donde cantan Créeme a duo Silvio y Vicente, mucho amor en esa colaboración, se nota.
Más tarde, me encuentro en el Luna Park año 1985, a lleno completo, un Concertazo esa noche. Un Silvio inmenso, un Santiaguito Feliu, impetuoso, un Afrocuba genial.
Gracias Silvio por esa entrevista, hay muchos que han echo mucho y valga la redundancia, y ese mucho, desgraciadamente, no se conoce. Descansen en Paz los Hermanos Feliu.

Pablo Poletto dijo...

Estuvimos juntos detrás de aquel mítico escenario de Alamar, en el recordado concierto del apagón. Aquel, el número 34 de la gira interminable. Compartimos muchos momentos más que ese, pero ese, sin dudas, fue realmente mágico. Recuerdo la sonrisa de Vicente cuando le dije que le había llevado dos kilos de yerba para el mate, no pudo aguantar hasta el final del concierto y me pidió que se la lleve en ese momento. Cantar "Dónde habita el corazón" junto con Aurorita, Ale y Miryam será algo que guardaré por siempre en lo más profundo de mi alma.

Te abrazo bien fuerte Silvio, porque se el cariño que tenías por Vicente. Y en ese abrazo me incluyo para sentir que el Tinto, nos estará abrazando por siempre con sus canciones.

Hasta siempre Vicente!

Variaciones dijo...

Una mariposa.
A mi querido hermano: Vicente.
Se sentía sola, triste, angustiada, muda; sin embargo, irremediablemente lúcida. Necesitaba con urgencia el rumor de un abrazo; esa palabra con llanto o sin él; la necesidad de estar presta al combate, y la pregunta insalvable: ¿por qué? A pesar de que venía de una familia de buena madera, se sabía resquebrajada, casi rota; inundada de lágrimas en medio de ese día de silencio atroz. Sin dormir, casi olvidaba la mañana, nada sabía a nada; sus cómplices, las flores, callaban. La mar furiosa y desatada, retumbaba en un grito poderoso contra el negro heraldo. Perdida en ese absurdo, intentaba atrapar la memoria de todo: de las tardes, de los sueños, del juego de esconder algún mapa para que él, sonriendo, descubriera el tesoro de una palabra; sonreían. Sola, triste, angustiada, muda; memoró los años juntos: los días de rabia, la puntería aceitada y fija ante el enemigo; la alegría de la esperanza - ese talismán que los hacia inseparables -; las amistades de lealtad; el dolor de las traiciones; el dulce olor de una muchacha, el durazno de aquél día; la mirada de los viajes y caminos. Necesitaba su abrazo, el silbido de su mano; la voz que escuchaba por primera vez rumbo al faro que nutre. Necesitaba la respiración compartida para no perderse entre los vientos del temor de estar sola, triste, dolorida; callada. Una mariposa de colores imposibles se posó en su costado; aleteó acariciándola con palabras que nadie sabrá, y comprendió; comprendió que estaba sola y acompañada hasta siempre; que debía cantar para que él viviera todas las noches, todas las mares, todas las alegrías, algunos sinsabores, y toda la esperanza. Y la mariposa revoloteó, alegre, ante el acorde de Sol mayor que la guitarra de Vicente Feliú caminó por el mundo.
Jorge Rodríguez.

Antílope dijo...

Recordando algunos de los comentarios que realizó Vicente aquí en el blog, me vino a la memoria este breve y sencillo cuestionario, que muchos respondimos el año pasado para divertirnos y desconectar en los meses iniciales de la pandemia.

Vicente Feliú dijo...

Ahí voy, para que no digan...

Virtud favorita: Honestidad
Virtud favorita en el hombre: Honestidad y valentía
Virtud favorita en la mujer: Honestidad y sandunga
Atributo personal más destacado: Tratar de ayudar
Idea de felicidad: Ver abrirse una flor, el canto de los pájaros, la salida del Sol…
Idea de la desgracia: La oscuridad
El defecto que más disculpas: Ciertas debilidades
El defecto que más detestas: La prepotencia
Manía: Comerme el mus de chocolate de Argelia
Persona que le resulta más antipática: La aduladora
Poeta preferido: José Martí, Mario Benedetti, Javier Heraud, Roque Dalton…
Escritor preferido: José Martí, Pablo de la Torriente-Brau, Paco Ignacio Taibo II, Eduardo Heras, Víctor Casaus…
Héroe preferido: El Soldado Desconocido
Heroína preferida: La Soldada desconocida
Flor favorita: Mariposa
Color favorito: Azul, verde olivo
Plato preferido: Filete de emperador a la plancha con arroz blanco
Máxima favorita: “Canto que ha sido valiente siempre será canción nueva”
Lema favorito: Guerrear por la maravilla

16 de junio de 2020, 20:58

*

~ Abrazos

Omar Fontes dijo...

Desde Chile se denuncia escasa circulación del transporte publico, lo que dificulta el voto de la gente. ¿Y tan lejos quedan los centros de votación de las residencias de los ciudadanos??
Carros (autos) particulares salen a la calle con el cartel "Te llevo a votar gratis".

Vía Telesur

Guadalupe dijo...

Silvio querido y segundaciteros:

Tan claramente vista la humanidad de Vicente con esta entrevista, muchas vidas que vivió y alentó el canto nuevo en nuestra América, un promotor cultural al cien por ciento.
En 2019, lo gozamos en el Encuentro de la Tropa Cósmica en México, muchos días de convivencia y siempre con la amabilidad por delante, estuvo también su hermano de la Trova Augusto Blanca y Rosy su compañera de la vida.
Ayer hicimos un concierto recordando a Vicente, a todos nos golpeó su repentina partida.
Nos cantaron tus canciones y algunas de Vicente, Mauricio Díaz (El hueso), Chema Rodríguez, Gonzalo Ceja, Bruno Santiago y Adriana Martínez.
También tuvimos participantes extranjeros con transmisiones directas desde Chile, Williams Molina y Aldo González.
Y por supuesto participó un trovador cubano: Karel García quien nos envió un video.
Todo en un ambiente de pesar y además de solidaridad para nuestra amiga Zayra Sánchez, quien padece leucemia y la seguridad social no le cubre su tratamiento, por eso y por ser un tilín mejores les pedimos solidaridad a los Silviófilos.
Además contamos con la presencia de Clemente Rodríguez, padre de uno de los 43 normalistas desaparecidos, quien desde 2014 reclama el cuerpo de su hijo, y desde entonces dejó sus cultivos en su pueblo, Tixtla en Guerrero, por eso llevó sus artesanías para su venta por ser su única fuente de ingresos.

Todos te mandamos nuestro abrazo fraterno, así como a las Auroras.

Los quiere siempre.


Guadalupe

arturo dijo...

Omar Fuentes, el Servel, organización encargada de organizar las elecciones, cambio las direcciones de quienes votan dificultando de esta forma el ejercicio; agregar a esto que desapareció el transporte público. Yo me atrevo a hablar de fraude electoral porque todo esto beneficia al candidato de la extrema derecha, no son los ricos los que andan en micro sino el pueblo.

Solo espero que esto sea denunciado por el conglomerado de izquierda y se haga lo que tanto pedían que se hiciera en Venezuela, que se anule la elección.

Ah, pero verdad que tenemos una comisionada de la ONU... (esto último es una ironía)

silvio dijo...

Salim Lamrani: LA EMIGRACIÓN CUBANA HACIA LOS ESTADOS UNIDOS, PARTE 1, DE 1860 A 1989: UN ANÁLISIS ESTADÍSTICO Y COMPARATIVO (PDF)

Unknown dijo...

Están intentando fraude en Chile.R3.

Unknown dijo...

Va ganando la izquierda en Chile.R3

Victoria dijo...

En Chile se inició el conteo de votos. Está muy pareja la votación.

marcelo matamala dijo...

El pueblo de Chile ha triunfado..!!

Y será hermoso!!

NO MÁS BLOQUEO!!

Doris dijo...

VIVA CHILE!!!!

Ganó el candidato de Izquierda Boric
Felicidades para nuestros hermanos chilenos y el pueblo todo, que tanto ha sufrido.

🇨🇱🇨🇱🇨🇱🇨🇱🇨🇱🇨🇱🇨🇱

Omar Fontes dijo...

Chile elige a la Izquierda!! Felicidades!! Vence Gabriel Boric!! El ultraderechista Kast reconoce derrota.

Armando dijo...

Las noticias hablan del triunfo de Boric en Chile y el reconocimiento de Kast.

¡Ojalá sean las alamedas!

Giordan Rodriguez Milanes dijo...

Trastocado el número de cierta flor entre el azul y el púrpura. Lo marco y la maquinita me dice que no existe y aun así tenemos el mismo apellido. ¿Qué coño pasa si el cariño supera cualquier sintagma?

Victoria dijo...

Ganó Boric!!!!!!!!!!

Patricia Moda dijo...

Chile ya tiene nuevo presidente: Gabriel Boric se impone en el ballottage y Kast asumió la derrota

RosaNazar dijo...

Vaaamos Chile m....!!!!🇦🇷🇨🇱✊💪💪👏👏👏👏

RosaNazar dijo...

Desde alguna dimensión el Tinto está feliz...por Chile🇦🇷🇨🇱🇨🇺✊💪👏👏👏

Victoria dijo...

Viva Chile!!!!! 🍾🌹🥰

Carlos dijo...

Hola desde España. Viva Chile. Viva el pueblo. Vivan los trabajadores.
Hemos ganado!

alina dijo...

Chile ....pisará las calles nuevamente,de lo que fue Santiago ensangrentada...
Kast reconoce a Bóric como nuevo presidente .

Unknown dijo...

Victoria de la izquierda en Chile.R3.

Benito de la Fuente Escalona dijo...

Fernández Crespo, saludos. (Traigo ahora este comentario –con la venia de los moderadores- porque en el momento de ir a ponerlo nos golpeó dramáticamente el fallecimiento de Vicente, y el duelo y la tristeza que nos embargó a todos me lo impidió)

Decir sandeces no sé si clasificará algún día como delito. Ojalá, porque así nos libraríamos de mucha muela inútil, repetitiva, sin basamento en la realidad, que promete sin resultados o, incluso, tóxica. O al menos dicha muela no quedaría impune.

Pero quizá la ofensa gratuita y la acusación sin sustento sí estén tipificadas, al menos como contravenciones. Habría que revisar la legislación vigente.

De todas formas, a lo que iba: la Constitución en su Cap. 3 declara “…la soberanía reside intransferiblemente en el pueblo, del cual dimana todo el poder del Estado. El pueblo la ejerce directamente o por medio de las Asambleas del Poder Popular y demás órganos del Estado que de ellas se derivan, en la forma y según las normas fijadas por la Constitución y las leyes.”

Como el único criterio de verdad es la práctica me remito al juicio de alguien que fuera diputado a la ANPP, que no habla a la ligera y que no es nada sospechoso de ser un ratón hamelinense, aunque tenga relación con una flautista. Y cito:

“No es la Asamblea el problema, es el sistema, que está concebido con una dirección político-ideológica imposible de objetar. Por eso quien decide en la Asamblea no es quien aporta más sentido común y convence, sino los puntos de vista jerárquicamente superiores. Lo mismo pasa con las políticas de la agricultura, de la educación, de la ciencia, del deporte y de la cultura (con todas las políticas). Las directrices supremas son determinantes y pueden imponerse sobre la capacidad y el conocimiento. El órgano rector, el Partido, decide incluso sobre la Constitución. Esto último hace que resulte una suerte de poder sacralizado, por más que la utilidad de una gestión deba depender de su justicia y eficacia.”
Silvio, SC. 16 de diciembre de 2021, 10:06.

No es que yo quiera darle al bardo toga por guitarra, pero tendrá sus razones y lo dicho explica muchas cosas.

Cida Meira dijo...

Silvio, o Vicente estava em um palco e um infarto fulminante o levou numa tarde de sábado recebi essa notícia triste e angustiante, pois há poucos dias o Vicente enviou-me uma postagem através do Instagram, uma homenagem para o Fidel, lembro que coloquei um coraçãozinho vermelho e ele respondeu com um coraçãozinho azul.. Silvio, assim ele se despediu de mim, só posso pensar assim..
E hoje, com a vitória da esquerda no Chile, fico pensando como ele estaria feliz!! Ele está feliz, tornou-se uma estrelinha cubana para nós nesse céu da Latinoamérica!
Venceremos, Vicente Feliú!✊��
Viva o Chile de Victor, Allende, Violeta, Neruda..!!!

Abraço forte, trovador querido!

alina dijo...

RT ,ahora

Emilia dijo...

Felicidades Chile!!! Abrazo a los chilenos segundaciteros.

Toda la fuerza en lo que se avecina, para que su gestión tribute a satisfacer las exigencias del sufrido pueblo chileno.

Cigarra dijo...

Sobre el riesgo de gestionar mal la tregua que el SARS-CoV-2 nos ha dado

Benito de la Fuente Escalona dijo...

Viva Chile!!!
Al menos habrá nueva Constitución y la sombra del fascismo se alejó.

silvio dijo...

Mensaje de Isabel Parra:

Silvito lindo
Donde sea que esté
Está con nosotros hoy ganó el pueblo chileno
Estamos felices
Besos Chabe.

yamirys valle glez dijo...

Al Final de Este Viaje
Silvio Rodriguez

Al final de este viaje en la vida quedarán
nuestros cuerpos hinchados de ir
a la muerte, al odio, al borde del mar.
Al final de este viaje en la vida quedará
nuestro rastro invitando a vivir.
Por lo menos por eso es que estoy aquí.
Somos prehistoria que tendrá el futuro,
somos los anales remotos del hombre.
Estos años son el pasado del cielo;
estos años son cierta agilidad
con que el sol te dibuja en el porvenir,
son la verdad o el fin,
son Dios,
quedamos los que puedan sonreír
en medio de la muerte, en plena luz.

Al final de este viaje en la vida quedará
una cura de tiempo y amor,
una gasa que envuelva un viejo dolor.
Al final de este viaje en la vida quedarán
nuestros cuerpos tendidos al sol
como sábanas blancas después del amor.
Al final del viaje está el horizonte,
al final del viaje partiremos de nuevo,
al final del viaje comienza un camino,
otro buen camino que seguir descalzos
contando la arena.
Al final del viaje estamos tú y yo intactos,
quedamos los que puedan sonreír
en medio de la muerte, en plena luz.

💙Viva Chile💙

Victoria dijo...

Querido Silvio. Estamos disfrutando el primer discurso del presidente electo Gabriel Boric. Parece un sueño. Tanto esperamos por este cambio.
Abrazos para todos, estamos felices y celebrando.
Cariños para usted.

Francis Alberto dijo...

Bueno el discurso de Gabriel..., me gusta.

Omar Fontes dijo...

Bello el mensaje de Isabel Parra a las 20:00.

arturo dijo...

Las RRSS no siempre son inútiles y hoy quedó demostrado. Cuando empezó a circular que en todo Chile no estaba funcionando el medio de transporte público el pueblo se movilizó, apareció esa solidaridad que nos destaca como sociedad y logramos que la patraña del gobierno no logrará su objetivo. Igual llego el pueblo a las urnas y resultamos vencedores... Ahora vamos por esa nueva Constitución, por un Estado plurinacional y por seguir aprendiendo que todos juntos somos un gigante invencible.

Victoria dijo...

Como dice la canción :"porque esta vez no se trata, de cambiar un presidente, será el pueblo quien construya un Chile bien diferente"

Alba Peralta M. dijo...

Que viva Chile iluminado!!!

Orestes H dijo...

Del FB de Alexandar Poduvanac (chileno).

"...Bueno, el pueblo chileno ha expresado su voluntad y Boric es nuestro nuevo presidente. Lo cierto es que nuestros añejos líderes, Lagos, Frei, Bachelet dos veces y Piñera dos veces, no fueron capaces o no tuvieron la voluntad política de entregarle justicia social al pueblo. Por ese motivo es que Chile necesitaba un liderazgo nuevo y fresco y tenemos hoy a un Boric que ha prometido entregarle justicia social al pueblo, presentando un programa de gobierno en donde se refleja esa voluntad. Ojalá no suceda lo que nos sucedió con Bachelet, una socialista que no solo traicionó al pueblo gobernando para el capitalismo, si no que traicionó los fundamentos del socialismo y que hoy sirve a USA y al neoliberalismo desde la OEA. Por eso hoy el pueblo, aquellos que por más de 200 años hemos sufrido los abusos del capitalismo, tenemos la esperanza de que por fin tendremos una vida más plena y en mi caso una vejes más digna...."

Orestes H

Giordan Rodriguez Milanes dijo...

¡Viva, Chile, coño!. ¡Y los chilenos humildes! El tronco a piñazos mas épico en el que he participado involucró a chilenos estudiantes de medicina en Manzanillo. ¡Viva Chile!

Sender Escobar dijo...

¡¡Arriba Chile!! 🇨🇱

Jorge Fernández Crespo dijo...

Felicitaciones a los chilenos. Que haya ganado el candidato de centroizquierda sobre el de extrema derecha es un paso en la dirección correcta. Habrá que ver cuanto a la izquierda deja llegar a esta centroizquierda, una extrema derecha que además de su abrumadora supremacía económica, contó con el apoyo del 45% de los votantes.

Benito 19:01 Como no me queda clara la lectura que usted hizo de mi comentario, con gusto le explico que "decir sandeces" se refería exclusivamente al funcionario que manifestó la supremacía del Partido sobre la Constitución, y la pregunta sarcástica sobre si clasificaba como delito se refería a la futilidad de denunciarlo ante la Fiscalía como proponían varios foristas. Trataré de ser más explícito en el futuro para evitar que alguien se sienta aludido inmerecidamente por mis palabras.

Andrés Perdomo Guache dijo...


Contundente el triunfo de Boric en Chile. Dormiré mejor esta noche. Ojalá se abran definitivamente las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor.

!Viva Chile!

Benito de la Fuente Escalona dijo...

Muchas y ambiciosas las metas de Boric. Que el pueblo chileno y la suerte lo ayuden a alcanzarlas!!