domingo, 12 de febrero de 2017

"Mi blog es Segunda Cita"

Por Guillermo Rodríguez Rivera

Desde los días de mi adolescencia, pensé que me gustaría seguir diversas profesiones. Era temprano para decidir.

Cuando escuchaba a Benny Moré, al primer  Elvis Presley, a Miguelito Cuní o a Johnny Mathis, habría querido ser cantante. Pero la naturaleza, que me dio el gusto por la música, me negó la voz para cantar.

En el Santiago de Cuba donde nací y crecí había una escuela de periodismo que llevaba el nombre de Mariano Corona Ferrer, un joven tipógrafo que se hizo periodista y fue de los primeros en lanzarse a la lucha armada en 1895 y alcanzó el grado de comandante del Ejército Libertador. Su mayor gloria fue cuando el general Antonio Maceo lo designó director de El cubano libre, periódico casi nómada del mambisado, porque radicaba lo mismo en las llanuras de Baraguá que en las márgenes de un río.

Después pensé ser abogado y hasta director de cine. No me hice periodista porque me di cuenta que la del periodista es una habilidad que se adquiere escribiendo y leyendo a los maestros sobre la base de una formación humanística. El mayor de los periodistas cubanos, nunca estudió periodismo: José Martí fue abogado y doctor en Filosofía y Letras, pero sus “Escenas norteamericanas” son ejemplo del mejor periodismo que pueda concebirse.

Al fin, estudié letras y me hice escritor y profesor. Sin embargo, los primeros trabajos que tuve fueron de periodista: la Revista Mella, Radio Reloj Nacional, la Revista Cuba. En Mella hice grandes amistades: Víctor Casaus, Carlos Quintela, Silvio Rodríguez, Norberto Fuentes. La vida se encargó de separarme de algunos y unirme más a otros. No olvido al negro Manolo Rojas, chofer de la revista entonces, con quien canté y aprendí innumerables rumbas que todavía recuerdo, porque también fui admirador de Saldiguera y Virulilla, los grandes cantores de Los Muñequitos de Matanzas.

En la revista Cuba fui secretario de redacción y tuve como jefe al más capaz de los periodistas que he conocido: Darío Carmona, un republicano español que estuvo exiliado en Chile, en Cuba y al final de su vida pudo regresar a España, después de la muerte de Franco. Después, intervine en la fundación de El Caimán Barbudo y a los viejos amigos se unieron otros: Jesús Díaz, Luis Rogelio Nogueras, Orlando Alomá, Aurelio Alonso.

Quien lea lo que escribo, aunque sea un poema de amor, advertirá que del periodista mantengo el gusto por la realidad de todos los días, por esa historia que irá a los libros pero que ahora transcurre ante nuestros ojos junto a lo menos trascendente, y mi espíritu polémico ante lo que creo que no está bien (los dogmáticos de los años setenta le pusieron el nombrete de diversionista) acaso sea la supervivencia litigante del abogado que nunca llegué a ser.

No recuerdo ahora si fue Silvio quien me invitó a colaborar en su blog. En verdad, él me pidió que prologara una lujosa edición que hizo la editorial Planeta de los textos de sus canciones. Ahí volvió a hacerse cotidiana la vieja amistad y le mandé a su blog – cuando lo tuvo: de eso hace ya unos años – los artículos con los que valoré la Ofensiva Revolucionaria de 1968 y que son los que inician este libro.

Después de aquellos cantantes que admiré en mi adolescencia, Silvio Rodríguez había venido a ocupar el lugar que tuvieron ellos, sumándole un componente inesperado por aquellos tiempos: el compromiso con una revolución que los dos habíamos visto nacer y el invariable amor por la poesía.

A veces me han preguntado por qué no tengo un blog y siempre respondo que sí lo tengo: mi blog es Segunda Cita: ello se debe a que casi nunca su director y yo tenemos opiniones enfrentadas. El secreto está en esas coincidencias que fue armando la vida. Cuando Víctor Casaus, otro cómplice (generacional, ideológico y poético) me pidió que reuniera para editar lo que he escrito para Segunda Cita, imaginé que ello no alcanzaría para un libro, pero cuando Patricia Ballote Álvarez, trabajadora de los Estudios Ojalá, me hizo el invalorable favor de reunir mis colaboraciones, tuve que seleccionar las trescientas cuartillas que ahora les presento o, mejor, les presentan sus editores, Silvio Rodríguez y Víctor Casaus. Yo, Guillermo Rodríguez Rivera, apenas les hago llegar estas líneas que, como mis rodillas me lo impiden, tiene la bondad de leerles Marlen López León, mi mujer, gran amiga, quien todos los días me libra un poco de la muerte.

Gracias por asistir a esta presentación.



211 comentarios:

«El más antiguo   ‹Más antiguo   201 – 211 de 211
Anónimo dijo...

Arturo,dices que habría que terraformar,y pienso lo que supondría,alterando el equilibrio de ese planeta ,como estamos haciendo con la Tierra.
Es ilusionante,supongo,que consigan cultivar lechugas fuera de la tierra,pero preferiría que las plantasen aquí y se las diesen a quienes no tienen que llevarse a la boca.
Me ilusionaria mucho más eso,al igual que me ilusionaria mucho mas que ,en vez de acortarle la vida a este precioso planeta,luchasemos por alargarsela.
Me ilusionaria,en fin,que miraremos a nuestro alrededor,comprendiesemos lo afortunados que somos,y luchasemos por que todos los seres de este planeta fuesen igual de dichosos que nosotros.
Se que te encanta el espacio.A mi también,pues lo veo como una creación del Dios en el que creo,veo su hermosura y me conmueve.Veo el milagro que somos lo que nos queda por hacer,y me patece,hasta cierto punto pretencioso,por parte del ser humano,yo incluido,querer conquistar planetas que nos sirvan de nodrizas,y tener uno que lo estamos arrasando.
Sólo es mi punto de vista.Nada más.Un abrazo,Arturo,y que la Fuerza acompañe.

arturo dijo...

Juan Tomas, te voy a hacer un par de preguntas. ¿Y si nuestra máxima misión como especie fuera el sembrar vida en el universo o en una parte de el? ¿no sería maravilloso el llevar vida donde no hay y hacer crecer una flor en cualquier lugar de la inmensidad cosmica?

La ciencia no es mala, solamente puede, en algunos casos, estar mal aplicada.... pero no pongamos a todos en el mismo saco.

yamirys valle glez dijo...

Buenas TArdes

Un poquito tarde.. pero llegando siempre.. FELIZ DIA LUPITA ( sigo guardadndo tu hermosa bandera mexicana)
felicidades VIVI ( aún sin probar tu MATE.. pero cuidado también)
Felicidades para la madre de Hans, mi beso para ella También

Qeridas mujeres, sigan RENACIENDO,, como dijera al VIVI!!!,, y yo añado.. no descuiden rencer entre tantas maneras y colores,,, en AZUL!

yamirys valle glez dijo...

Ay que decir de la música....???,ajajajjajajaj

Nada, que por suerte para mi nunca he tenido un novio músico ,ajajajajajajaj

CONEJAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!!!!!!!!! te recuerdo siempre... en estos momentos de risa...maliciosa ,ajajaja
BONITA APARECE, hace poco le tiré un foto a una CONEJA GRANDOTA QUE TENGO... imáginando que fueras tu ( de peluchín),, junto a mi ZU ( GATO) y mi BLUE ( perra)

Anónimo dijo...

Arturo,nunca me lo había planteado.Si sería maravilloso.
No creo que estemos aquí para eso,pero sería bonito.
No pretendo que dejes de soñar,todo lo contrario.
Deseo que todos tus sueños de cumplan.

Sobre la ciencia,no creo que haya metido a todos en mismo saco.Sólo pretendía no excluirme a mi para no parecer pretencioso.

Mi sueño lo pude cumplir gracias a la ciencia. Ser padre. Sin ella,no lo sería.

Sueña lo que desees,pero tenemos distintos sueños.Ni mejores,ni peores que cualquiera.Pero son los nuestros,como la rosa del Principito.

Un abrazo,Arturo,y que la Fuerza te acompañe,amigo.

ruben padula dijo...

Hola, Silvio y Guillermo:
Tuvimos la suerte con Mirta, mi mujer, de asistir a la presentación de Las Crónicas de Segunda Cita de Guillermo Rodríguez. En realidad, fuimos a la sala Nicolás Guillén por otro Rodríguez, el que lleva de nombre Silvio, y que con solo ese nombre sostiene una poesía comprometida con la belleza y el hombre. Desde cuánto tiempo y cuánto hemos cantado sus canciones, las que nos ayudaron a sobrevivir del genocidio y seguir bregando por un hombre y un mundo mejor.
Desde una ciudad del interior de Córdoba, Argentina, desde Río Cuarto, retornado de 15 días de caminar por primera vez La Habana, de cumplir un sueño, conmovido y feliz, abrazo a los dos. Y digo que estoy leyendo las Crónicas que me permiten tener una mirada más profunda y certera de la Cuba Revolucionaria, y saludo a Guillermo por conjugar el amor por su patria y la crítica aguda, una mirada no dogmática sin concesiones, pero con propuestas superadoras. Estaré en el blog como una manera de estar en y con Cuba, nuestro faro, nuestra segunda patria, con todo el amor que puedo sentir por ese pueblo formidable.
Rubén H. Padula

silvio dijo...

Rubén y Mirta, bienvenidos a Segunda cita.

NancyDroguett dijo...

Mi estimado Silvio y miembros que lo acompañan en este Blogg. Soy chilena y este febrero reciente tuve el privilegio de conocer el lugar que he llamado "Un pequeño país de grandes encantos" La verdad que como nunca antes, inicio mi año laborar (soy profesora) con gran alegría, no sólo por haber cumplido el sueño de conocer Cuba, sino que darme cuenta que un sistema como el que viven los cubanos conlleva a una sociedad más equitativa. Soy una de los tantos miles y miles de chilenos que siente una profunda admiración por el pueblo cubano. Quiero agradecer a través de ti Silvio (tan cercano al pueblo chileno) a los cubanos su amabilidad, cultura, educación y cariño. Perdón por no opinar de los temas que convocan opiniones aludidas a un tema determinado como el expuesto en este blogg, solo quiero agradecer todo aquello que aprendí, especialmente las manifestaciones artísticas que se encuentran en cada rinconcito. Tuve el honor de haber asistido el día jueves/09/02/2017 en Casa del Alba a un encuentro con Santiago Feliu, como también haber asistido a una escuelita primaria y de presenciar el "Matutino", quedando tremendamente asombrada porque es dirigida por "Los niños" Tantos recuerdos están en mi cabeza, ojalá pueda volver pronto a este bello, hermoso y entrañable país. Sin duda que he dejado mi corazón en La Habana.
Hasta pronto!! Los amo!!

silvio dijo...

Nancy, bienvenida también a Segunda cita.

chaly dijo...

tengo en mis mano el libro de GRR Por el camino de la mar, concuerdo con Cintio Vitier q el nombre debe ser Nosotros , los cubanos , recomiendo a todos leerlo , un analisis y descripcion psicologica de nosotros , me enorgullese y calma poder entender el por que de nuestras actitudes , lo recomiendo gracias profesor GRR

Prófuga del Reloj dijo...

No había leído esta entrada.
No puedo manejar esto de las presencias que en un tris se vuelven ausencias. Sé que puedo adaptarme y acostumbrarme a muchas cosas pero no a esto.
¿Es el precio que debemos pagar por estar aquí un ratito?
Algo falla en mí o en el Orden Universal.

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